Explosión en CAVIM: la guinda de la torta?

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Hasta 1975 no existía una industria de armamentos y defensa en Venezuela. Todavía hoy podemos decir, a pesar de CAVIM, que esa industria no existe.

CAVIM fue creada por Carlos Andrés Pérez en Abril de 1975 para promover una industria doméstica de armamentos pero, 40 años después, no ha podido hacerlo. En 2006 CAVIM anunció la producción de la llamada pistola “zamorana”, de 9 mm y 15 tiros, copia de una pistola checa que nunca tuvo éxito alguno fuera de aquél país. Esta pistola checa con pretensiones llaneras ha sido un fracaso. Se hicieron algunos prototipos y hasta alli llegó.

CAVIM también adquirió en 2006 de Rusia los derechos del rifle AK-47s y anunció la instalación de una fábrica en Maracay. Cinco años después no se ha comenzado la fábrica.

Otros proyectos de CAVIM, como la sub-ametralladora Orinoco II, también han sido abandonados por su baja calidad.

El presidente actual de CAVIM es el General Aref Richany Jiménez, quien es un entusiasta chavista aunque esté bastante bajo en la lista protocolar militar (63). En los Estados Unidos los analistas que observan a Venezuela lo consideran como miembro de una mafia chavista con lazos en el Oriente Medio (Hizballah), mafia que incluye, entre otros, a Richani, El-Aissami (Ministro), Tarek William Saab (Gobernador), Fadi Kabboul (PDVSA), la hermana de El-Aissami (embajadora en Holanda) y Kamal Naim (Asamblea Legislativa del estado Bolívar). El general Richani es un personaje digno de cuidadoso análisis.

En el sector laboral las cosas no andan nada bien en CAVIM. A quienes allí trabajan les está vedado, por disposición del TSJ, el derecho de huelga. Los trabajadores demandan desde el año pasado, entre otras reivindicaciones, el mejoramiento de la cesta ticket o bonificación alimentaria, extensión del 40 % de aumento que se le otorgó al estamento militar nacional, revisión del tabulador de sueldos y salarios y del programa de evaluación por desempeño, equiparar a los obreros concediéndoles la jubilación que vienen concediendo a los empleados y que dicha jubilación no sea inferior al salario mínimo nacional, restitución del bono post vacacional y elevar el aporte para útiles escolares. Todo lo cual supone modificar el Reglamento Laboral vigente en dicha empresa. Hasta donde sabemos eso no se ha logrado y Richani tiene una reputación de patrono intransigente.

En Internet existe el siguiente recuento de los problemas laborales en CAVIM: “Trabajadores de empresas militares se movilizan.

Sobreponiéndose a las amenazas y a la criminalización sistemática de la protesta por parte del gobierno y las instituciones del Estado, los conflictos en Venezuela también han alcanzado a los trabajadores de empresas militares como Cavim (Compañía Anónima Venezolana de Industrias Militares), así como a los empleados civiles del Hospital Militar de Caracas. En el primer caso se trata de trabajadores que se han movilizado y cortado vías exigiendo el cumplimiento de 18 cláusulas del contrato colectivo, violadas por el patrono. Más de 70 trabajadores de Cavim, acompañados de esposas e hijos, interrumpieron en varias ocasiones el tránsito en la carretera nacional Morón-Coro en el centro occidente del país, exigiendo reivindicaciones laborales y respuesta a planteamientos hechos en un documento consignado ante la gerencia de la empresa en junio pasado Los trabajadores demandan derecho a jubilación, así como un aumento salarial del 40%. También plantean que el 8% de la ganancia bruta de la empresa costea la jubilación de los militares, mientras que el personal de la empresa en Morón no percibe el mismo beneficio. 34 El cese a las amenazas de parte de la actual cabeza de Cavim, General de División Aref Eduardo Richany Jiménez, hacia los trabajadores que participan en las acciones de protesta en demanda de derechos y la creación de un sindicato dentro de la empresa, son también parte de las demandas que los trabajadores exigen. De Cavim salen los químicos y explosivos que no son de uso exclusivo para la actividad castrense, sino que contribuyen al desarrollo de la industria siderúrgica, hidroeléctrica, minera y especialmente petrolera. En el caso del Hospital Militar, los trabajadores civiles exigen la cancelación de pasivos laborales. El Ministerio de Defensa mantiene una deuda por concepto de prestaciones sociales, pago del fideicomiso y bono vacacional. Los trabajadores aseguraron que han sido víctimas de amenazas por parte de los directivos de la institución, responsabilizándolos de una serie de hechos, evadiendo de esta forma el pago de las deudas. Mientras que la ministra de Salud, Eugenia Sader, se ha limitado a afirmar que los trabajadores estarían siendo manipulados por sectores de derecha en el marco del proceso electoral."

Pensamos que la nueva Asamblea Nacional debería investigar a fondo esta situación de los trabajadores de CAVIM.

Los contratos suscritos por CAVIM también deberían de ser objeto de revisión por la Asamblea Nacional. Hay algunos contratos suscritos con empresas de Hong Kong, como J.P. Global Investments LTD, que sería bueno investigar, aunque no tenemos en este momento ninguna información concreta sobre irregularidades.

Y ahora, la explosión, con pérdida de vidas, heridos y pérdidas materiales significativas.

Que pasó allí? Fue un simple accidente causado por la pobre calidad de los procesos administrativos y de vigilancia de la empresa? Quienes son los responsables? Dirá el gobierno que fue sabotaje de la CIA? Que se quiso eliminar, si alguna cosa? Hay un movimiento de resistencia en marcha? O es un plan urdido por el gobierno para echarle la culpa a la oposición?

La opinión pública debe estar muy atenta a esta investigación, como debe estar muy atenta a la investigación del incendio de la sede del INTI en el Sur del Lago y como ha debido estar atenta a la investigación del asesinato de Danilo Anderson , a la prisión de la Juez Afiuni, de Alejandro Peña Esclusa y de la situación de los presos de Chávez.