El Celacanto es un pez que surgió durante el período geológico conocido como Devónico, hace unos 400 millones de años. Parecía haberse extinguido durante el Cretáceo, hace unos 75 millones de años, pero un ejemplar fue encontrado vivo en 1998, en el mar cerca de la isla de Celebes, Indonesia. El simpático pez no había muerto, como se creía, solo estaba de parranda. Su captura le dio al pescador de Celebes una temporal “celebidad”.
Recordamos esta resurrección al ver en la prensa que Eduardo Fernández prepara el lanzamiento de su pre-candidatura presidencial. Después que se creía retirado a sus tareas intelectuales, muy meritorias por cierto, se pensaba que Eduardo, quien tuvo su momento hace ya unos 30 años, no tendría ánimo ni disposición para regresar a la actividad política. Sería algo así, diria la gente, como si Luis Sojo regresara a jugar la segunda base del Lara. Sin embargo, allí está, aspirando de nuevo a los primeros sitiales de la política.
Tiene todo el derecho. Lo que dudamos es que deba hacer uso de ese derecho, en una Venezuela que no parece estar muy alineada con los personajes del pasado. Un Oswaldo Alvarez Paz, quien se ha mantenido activo y ha puesto la carne en el asador, hasta el punto de ir a la cárcel por sus opiniones, no recibe mucha intención de voto, aunque si mucho respeto. La gente lo percibe como un excelente candidato a ser Ministro del Interior en un futuro gobierno democrático. Eduardo, quien ya perdió con Oswaldo por allá en el Plioceno medio, no tiene mucho que buscar en una competencia donde la gente ve nuevas caras con simpatía, precisamente por ser nuevas y carecer de las malas mañas que justa o injustamente ellos asocian con políticos antiguos. Eduardo quizás reciba votos especializados, de geólogos y arqueólogos, pero no los votos masivos que se requieren para un regreso verdadero.
Eduardo: recapacita. Tu trabajo como asesor para los jovenes que hoy emprenden el camino de la lucha política puede ser muy valioso.
Estoy totalmente de acuerdo con el criterio del Sr. Coronel. Yo confío que el Sr. Fernández, con su extensa experiencia política, recapacitará. El sabe que, esa experiencia, puede ser utilizada mejor de otra manera.
ResponderEliminarCorrectisimo Dr, es momento de una nueva generacion.
ResponderEliminarSeria criminal permitir que los fosiles del pleistoceno adeco - copeyano sigan en su afan de querer gobernar al pais, post la pesadilla Chavizta, especialmente si ellos son la gente que por su egoismo, avaricia y corrupcion "les trajo Hugo Chavez". Hasta cuando van a insistir en su "derecho divino" de gobernar a Venezuela? No se dan cuenta que los ultimos 13 años vienen a raiz de mal gerenciar el pais y no pagar una deuda social acumulada por ellos cuando tuvieron el poder y los recursos y dejaron esa gente en los ranchos podrirse cuando entraba tanto dinero? Ya esos saurios ya tuvieron su oportunidad y la malgastaron, que se arrimen a un lado y se extingan con dignidad y dejen a una nueva generacion tener la oportunidad de tomar las riendas del pais. Es que su soberbia e ignorancia es tan suprema que no se dan cuenta que los consideramos los precursores del factor Chavez y los odiamos casi tanto como a Chavez? Hasta cuando? Si se permite el regreso de la vieja guardia es verdad que cada pueblo tiene el gobierno que se merece.
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