Uno lee el documento de la demanda de Cabello, verlo en el link arriba
mencionado, y no puede creer que haya
gente tan pirata en Venezuela. O, mejor dicho, si puede verificar lo pirata de
la gente que está en el poder. Entre otras burradas la demanda se refiere al
autor del libro, Emili J. Blasco, como una mujer. Así lo dice: “la responsable del
texto….”.
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Este señor es "la responsable del texto", según la demanda. Ver hacia
el final de la página:
Quien no se molesta en averiguar el género de la persona que
representa el eje central de la demanda, mal puede ser confiable en sus
acusaciones. En efecto, el texto de la demanda, aunque mal escrito, simplemente
refuerza la naturaleza informativa de las noticias aparecidas en las
publicaciones demandadas. Las citas de esas publicaciones que aparecen en la demanda son esencialmente
informativas. Nadie tiene que probar que Cabello es el capo del cartel de los
Soles para decir que en los Estados Unidos hay un ex-funcionario del régimen
que así lo ha atestiguado.
Por otra parte, la contra ofensiva del régimen ha sido patética. En El
Universal, ver: http://www.eluniversal.com/nacional-y-politica/150417/aseguran-que-no-prospero-denuncia-contra-diosdado-cabello-en-estados-u
se hacen eco de un supuesto desmentido de un tal Sr. Jim Luers, quien habría
dicho que el testimonio de Salazar sobre Cabello ha probado ser falso. Pero en
El Universal no dicen quién es el tal Sr. Luers ni a quien representa. Resulta
que el Sr. Luers no existe como vocero del gobierno estadounidense. Yo he
buscado al tal Jim Luers por Internet y no aparece por ninguna parte. Podría El
Universal decirnos de donde viene el tal Jim Luers y cuando y donde dijo lo que
ellos han repetido como loritos, sin verificar la noticia?
Salazar, el fugado, existe mientras Jim Luers no existe.
Esa es la
diferencia entre los dos periodismos. El testimonio de Salazar en USA sigue su
cuso. Y si el juicio de cabello en contra de Tal Cual, La patilla y El Nacional
estuviera radicado en un país donde exista justicia, sería propicio para que
las conexiones de Cabello salieran a flote en los interrogatorios de los
testigos. En Venezuela, el tal juicio será una farsa más del régimen.
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