Para
los aficionados al boxeo el debate de anoche entre Trump y Clinton fue una clásica
confrontación entre un tira golpes, Trump y un boxeador, Clinton. Me recordó a
Bonavena frente a Ali, a Mano de Piedra frente a Leonard y, sobre todo, a Tyson
frente a Holyfield. Este segundo debate presidencial no fue una batalla entre
dos ejércitos organizados sino una pelea callejera. Así lo quiso Trump, quien
obligó a su adversaria a furiosos cambios de golpes. Como en la pelea entre Tyson
y Holyfield, en el debate de anoche
Trump le “mordió” una oreja a Clinton, no una sino varias veces, al aprovechar cada pregunta para insultarla,
en lugar de responder lo que se le preguntaba. Anoche vimos a un Trump
camorrero, en ataques furiosos y desorganizados, tratando de alterar el ritmo
de Clinton, lográndolo en ocasiones. Sin embargo, al final Clinton pudo imponer
su ritmo más educado, más sustantivo, para ganar la batalla por tres puntos.
Cuales
fueron esos tres puntos:
1.
Las diferencias
entre los dos candidatos se revelaron con mucha nitidez en este debate. Clinton
se mostró más presidenciable, más calmada que el energúmeno que fue Trump.
Trump interrumpió, insultó, balbuceó, hizo de todo menos responder las
preguntas que se le hacían. Trump se quitó los guantes y se armó con un garrote,
Clinton los conservó y eludió la mayoría, pero no todos los golpes;
2.
Trump se
mostró autocrático, políticamente machista. Clinton más democrática. Trump
repitió su tesis sobre la baja calidad de los inmigrantes latinos y musulmanes
que estaban entrando al país. Clinton resaltó el drama de los refugiados y
abogó por una sistema de selección que no equivaliese a una negativa a ayudar a
las víctimas de las tragedias de otros países. De nuevo, Trump se mostró
orgulloso de su habilidad para no pagar impuestos;
3.
Trump
mostró menos conocimiento que Clinton sobre los grandes asuntos que los Estados
Unidos deberá enfrentar, en especial los de política exterior. Prefirió
hablar en negativo, siempre tratando de
culpar a Clinton de todo lo malo que había ocurrido en el país. En ese plano
logró incomodar a Clinton, quien en ocasiones estuvo a punto de perder la compostura.
Hacia el final, Trump admitió que él no estaba de acuerdo con su propio
candidato a vicepresidente sobre la política a seguir en Siria, mostrándose
partidario de apoyar a Rusia en su táctica de destruir a los rebeldes que
luchan contra Asad.
En
líneas generales, el segundo debate confirmó las diferencias entre los dos
candidatos. Yo le compraría un auto usado a Clinton siempre y cuando mi
mecánico de confianza lo revise bien, pero jamás pensaría en comprarle uno a
Trump.
Ambos candidatos apestan. Clinton es politics as usual, mentirosa, guabinosa, atada con los special interests, y ademas insoportable, sin carisma alguno. Trump es un bully, megalomano, narcisista, ignorante, torpe, mal criado, y hasta peligroso.
ResponderEliminarDe todas formas, gane quien gane, el Congreso, los demas politicos, y los conglomerados financieros, los millonarios, son los que realmente gobiernan y deciden. El presidente no hace mucho por si solo, por eso los democratas, al final, se parecen a los republicanos, y todo sigue casi igual, decada tras decada, con cambios de presidentes.
Cual de los 2 es menos malo? No se. 4 años mas de Obama con Hilary - excepto que Obama tiene cierto carisma, mas agardable - o el loco de Trump? A trump lo controlaria el congreso, los generales, el tribunal supremo, y el pueblo en general, si quisiera cometer alguna barbaridad. Son los USA, no es Venezuela. Es una democracia civilizada, el presidente no hace lo que le da la gana. O sino, impeachment rapidito.
Por eso decidi no votar esta vez. Es como tener que elegir entre una pulmonia o dolor de muelas. Sospecho que habra mucha abstinencia estas elecciones. A mucha gente no le gusta ninguno de los 2 candidatos. Ojala eso lleve un mensaje: alta abstinencia = both candidates suck, get it together next time..O con suerte, que ganara Trump, cometa una barbaridad, que lo boten, y pongan a Mike Pence de presidente, un tipo mucho mas potable.
¿Abstinencia? Más bien abstención Mr. Sledge. Las dos palabras están en el DRAE pero la segunda encaja más con el fenómeno que Ud. señala.
ResponderEliminarEn cuanto al debate, estoy de acuerdo, volvió a ganar Clinton, por puntos. Auguro un sólo período para Ms. Clinton, a menos que Trump termine de destrozar al GOP. Cuídense, sí, los demócratas de un Bernie Sanders joven en el futuro. Ya compraron los tickets para el experimento marxista con el vejete comunistón.
Clinton como presidente? mas de lo mismo. Sobre todo para Venezuela.
ResponderEliminarTrump como presidente? El planera de los simios.
Deberia existir en la constitucion norte-americana una clausula pre-elecciones:
ResponderEliminarUn sufragio o 'poll' en el cual si la mayoria de los votantes desprecia a los candidatos finales, pues se hace un 'referendum" pre-elections. Lo cual forzaria a ambos partidos de cambiar de candidatos presidenciales, portergando la elecciones unos 3 meses.
Estoy seguro que 80% de los votantes estamos defraudados, decepcionados por el sistema, y estos 2 impresentables candidatos. Habria que implementar un "Pre-elections Impeachment", botarlos a los 2 de la carrera presidencial, y remplazarlos.
Una idea para el siglo 22.. Mientras tanto a calarse a la Clinton = 4 años mas de Obama, pero sin carisma. Menos mal que hay muchas peliculas y programas en cable TV sin la Clinton..