Nobleza espiritual o sumisión? El caso de Jorge Roig y Alejandro J. Sucre

 

Leo dos testimonios de venezolanos demócratas y pregunto:   ¿reflejan grandeza de espíritu en la mejor tradición franciscana o revelan excesiva mansedumbre?

Roig nos dice en twitter:

La Gran Aldea: “Hay que darle garantías y una salida política al Partido Socialista Unido de Venezuela y a los militares. Tenemos que olvidarnos de cacería de brujas” https://t.co/CNBGBb7att"...

Por su parte Alejandro J. Sucre escribe un artículo titulado: “Muy bien Fedecámaras”, en el cual elogia el acercamiento que hizo Fedecámaras al régimen de Nicolás Maduro y la actitud tendiente a la coexistencia pacífica con el régimen que exhibe Henrique Capriles. Ver artículo en: https://www.digaloahidigital.com/articulo/muy-bien-fedecamaras

La declaración de Roig es contundente. Pide “garantías” y una “salida política” para los miembros del PSUV y los militares, demanda olvidar las “cacerías de brujas”. Es decir, Roig le pide a los venezolanos “poner la otra mejilla”, garantizar la integridad de los miembros del régimen chavista/madurista que ha arruinado al país, que ha asesinado a venezolanos, apresado a venezolanos, perseguido y exiliado a millones de venezolanos. Pide una salida “política” para los civiles y militares que han saqueado al país, que han utilizado el contrabando, la extracción ilegal de minerales y el narcotráfico, como actividades preferidas. Esta posición conciliatoria de Roig podría verse como demostración de una extrema mansedumbre franciscana o, por el contrario, de un masoquismo intolerable. Yo me inclino por lo segundo. Cuando contrasto lo que Roig está dispuesto a concederle a los criminales con la magnitud del crimen cometido, debo rechazar su postura, según la cual piensa que la aplicación de la justicia es equivalente a “cacería de brujas” y que el apaciguamiento y la genuflexión son estrategias válidas para devolverle la dignidad a un país humillado y pisoteado por los salvajes.    

Por su parte Sucre se extiende en loas a Fedecámaras y dice, entre otras cosas:

·      Sucre: Fue un contundente y acertado respaldo a la política de acercamiento que el país reclama

Digo yo: El país no reclama acercamiento con los criminales del régimen. El 90% del país los rechaza. La actitud de acercamiento de Fedecámaras al régimen es producto del celestinaje y los intereses egoístas de algunos empresarios.

·      Sucre: Igual ocurre con gran parte de la oposición liderada por Henrique Capriles donde piensan que el debate y las diferencias nunca deben salirse de los canales democráticos

Digo yo: El apego a lo democrático tiene que ser un ejercicio mutuo, de dos vías. Jugar con guantes blancos contra quienes esgrimen el garrote y lanzan escupitajos tiene otro nombre menos digno

·      Sucre: Basta de la criminalización de los líderes entre sí y muy buen paso de Fedecámaras de haber roto formalmente con el formato impuesto por algunos radicales de la oposición

Digo yo: Sucre pide eliminar la criminalización de los miembros del régimen que trafican con drogas, usan el contrabando como actividad cotidiana, lavan el dinero de los venezolanos en el exterior, asesinan y persiguen, expropian y humillan. A eso lo llamo colaboracionismo

·      Sucre: Fedecámaras descriminalizando al oficialismo y el oficialismo asistiendo a la Asamblea número 77 de esa institución han dado un paso al frente muy importante para romper con el patrón de rencillas a los que nos tienen sometidos algunos

Digo yo: esa coexistencia pacífica entre los criminales y los empresarios humillados y victimizados por los abusos de poder evidencian la naturaleza invertebrada de Fedecámaras. Eso no es conciliación sino entreguismo

·      Sucre: La oposición debe dar una respuesta de más profundidad democrática acercándose al pueblo en cada rincón del país para formarlo, en lugar de buscar prender candelitas y “salidas” rápidas y usar sanciones y marchas, aunque democráticas, como armas.

Digo yo: Para Sucre, hay que ir a “formar” el pueblo. Pero el pueblo se forma con el ejemplo digno, no se forma con el ejemplo de la entrega. Lo que él llama “candelitas”, marchas y sanciones indeseables son las armas de quienes no desean arrodillarse frente a la barbarie.

·      Sucre: Venezuela debe ser un centro de inversiones chinas, rusas, europeas y estadounidenses y no un centro de confrontación geopolítica…. Fedecámaras ha dado un primer paso importantísimo.

Digo yo: No soy un experto financiero como el Sr. Sucre pero pienso que es ilusorio pensar que en un país puedan coexistir armoniosamente inversiones de países que tienen intereses geopolíticos muy diferentes y esencialmente contradictorios. El país que lo pueda lograr tendría que convertirse en una especie de burdel financiero, tipo paraíso fiscal. No solo de pan vive el hombre, Sr. Sucre.