Diario de Viernes

 

 UN MUNDO MÁS PEQUEÑO

Hasta 2019, acompañado por Marianela, mi mundo continuaba en expansión. Teníamos vida social y hacíamos planes casi continuos sobre viajes cortos y largos.  Hablábamos de las más diversas actividades a ser compartidas. Hacia fines del verano de  2019 le pregunté: ¿“Por qué no nos vamos para Portugal por un par de semanas?  Ese es un país de Europa que aún no conocemos y está al lado de nuestro país favorito, España”.

Decidimos que lo podíamos y debíamos hacer. Ya yo tenía casi 87 años y ella 84. ¿Para cuándo aplazarlo? ¡Abajo la cautela!

Fue un viaje esplendoroso. No comenzó bien porque TAP, la línea aérea de Portugal, a la cual pagué $80 extra para obtener asientos más cómodos, no nos dejó ocuparlos al abordar, alegando que ya yo estaba muy viejo para poder manejarme con eficiencia en caso de una emergencia. La supervisora agregó: “Usted está debe andar ya en  silla de ruedas”, agregando el insulto a la descalificación.

Lo cierto es que llegamos a Lisboa y regresamos a casa pero nunca pude lograr que TAP me devolviera mi dinero. Ver narración de nuestro viaje en: https://pararescatarelporvenir.wordpress.com/2019/09/15/gustavo-coronel-viaje-de-encuentros-y-despedidas/

En Portugal caminamos incontables kilómetros, comimos incontables sardinas y bacalaos, tomamos múltiples botellas de vinos de las regiones que atravesábamos, viajamos en los excelentes trenes portugueses: Lisboa, Porto, Coímbra, pueblos del sur, pueblos del centro y del norte.  Dos semanas de maravillas en un país de gente amable, lleno de historia. Regresamos a USA en un crucero que nos llevó a Nueva Escocia y a lo largo de  la costa noreste de USA, tocando un bello pueblo tras el otro.

Semanas después de nuestro regreso a USA comenzó el cambio. Comencé a tener hematurias (sangre en la orina)  y mi médico me dijo: “Si te duele son cálculos. Si no te duele es cáncer”. Y  no me dolía.

Mi cáncer nos obligó a re- planificar nuestra vida asumiendo que yo me iría primero. La pandemia me obligó a demorar la cirugía porque el riesgo de ir al hospital era aún mayor al de esperar.  

 De manera inesperada, una madrugada de julio de 2020 Marianela me dejó. Falleció en su sueño y los planes debieron ser reformulados, pues sería yo quien tendría que enfrentar una nueva vida en soledad.

Ahora

El hombre no está hecho para sobrevivir a la mujer. Mi vida ha cambiado significativamente, como un lago que se hubiera empequeñecido pero que pareciera haber ganado en profundidad. Ello se debe a que en solitud y soledad he redescubierto cuatro mundos.

El mundo animal

Había pasado la mayor parte de mi vida viendo a los animales de reojo, como seres que estaban allí pero que no merecían especial atención de mi parte. Ahora, gracias a algunos excelentes programas de televisión  y mis diarias observaciones puedo apreciar  cualidades en los animales que nunca había tomado en cuenta. No ceso de maravillarme del grado de compenetración que existe entre el ser humano y el animal y cuán importantes se hacen el uno para el otro.   Al verlos en pantalla de la TV o caminando con su dueños  en mi vecindario los veo con nuevos ojos de respeto y disfruto de su dulce e inteligente mirada. 

 El mundo vegetal

Desde que andaba por Venezuela como geólogo de campo siempre me han gustado los árboles y las flores pero siempre los vi como parte de una floresta, una selva, un jardín, como unidades colectivas. Ahora los veo como individuos, cada uno con su propia historia, hasta en comunicación a través de su red de raíces con sus amigos y familiares. Y así como hay un Pedro y un Luis así es posible distinguir el roble alegre del roble melancólico. Donde vivo hay un  bello bosque por el cual camino con frecuencia y donde he aprendido a diferenciar las variadas especies y verlas como miembros de una comunidad amable que parece alegrarse de verme. Ello me ha llevado a convertirme en guarda bosques voluntario, reportando a la administración de mi complejo residencial cualquier problema que pueda aquejarlos.

Las Cosas Inanimadas

Jorge Luis Borges le dedicó un poema a sus cosas, el bastón, el llavero y se hizo preguntas sobre su eventual destino una vez él falleciera. Ello me ha llevado a prestarle más atención a las mías, el  llavero de TIFANY, regalo de Marianela de hace 40 años, mi suéter azul italiano, ya hecho trizas pero aún irremplazable, la cartera que tiene décadas conmigo, la medallita con la imagen de Don Bosco que me regaló el Cardenal Rosalio Castillo Lara hace 77 años, cuando aún él era seminarista.

  Y, por supuesto, mis libros, a los cuales veo y aprecio como si fuesen seres vivos. Sé que les espera la orfandad. Pero cada día que los veo y los releo los siento como  anclas a mis felices etapas anteriores.

La Mujer

En mi pequeña familia de padre, madre, hermana y yo, mi madre era quien llevaba la voz cantante y tuvo mucha influencia en moldear mi persona. La memoria de Marianela y su inteligencia emocional me ha ahondado ese sesgo inicial a favor de la mujer hasta el punto que vería la llegada del matriarcado universal como una esperanza de sobrevivencia para nuestra vapuleada raza humana.   No solo en Venezuela sino en Estados Unidos, mis dos patrias, veo como necesario que pronto llegue a la presidencia una mujer, esperando que no sea demasiado tarde.

 

EL PRÓXIMO PRESIDENTE DE USA ESTARÁ ENTRE DIÓGENES ESCALANTE Y  ELEAZAR LOPEZ CONTRERAS

Hace días fui a visitar un buen amigo quién estaba cumpliendo 94 años y fui a llevarle una botella de ponche crema de Eliodoro González P.  su bebida favorita.

Entre las varias cosas que conversamos, además de recordar los carnavales de 1946, cuando estaba de moda el bolero “Dos Almas”, estuvieron las últimas metidas de pata de Nicolás Maduro y las próximas elecciones presidenciales en USA, nuestro común país de adopción. Sobre Maduro fue breve y categórico: “Chávez y Maduro me recuerdan a los hermanos Monagas”, me dijo, casi como él estuviese estado allí durante aquellas presidencias. “Han sido igualitos de rapaces, arbitrarios y corruptos. Y cultivan un patrioterismo de pacotilla que ya no encuentra adeptos ni entre los más cursis seguidores”.

”Por lo que se refiere a USA”, me dijo, “estoy viendo que el nuevo presidente tendrá que ser escogido entre un Diógenes Escalante y un Eleazar López Contreras”.

Por un instante, me quedé en silencio porque pensé que a mi amigo se le habían ido los tapones.

Pero, añadió de inmediato: “Es que estoy leyendo un extraordinario libro de Jorge Olavarría, “La Revolución Olvidada” en el cuál Olavarría incluye un capítulo especialmente fascinante sobre el súbito descenso a la locura de quien fuera el candidato favorito de los venezolanos para suceder a Isaías Medina en 1945, Diógenes Escalante. Su único rival para la presidencia era Eleazar López Contreras, quien era visto como parte de una tendencia continuista del gomecismo y se le rechazaba por su edad  (aunque no era más viejo que Escalante) y por lo que llamaba Rómulo su intento de hacer regresar el país “a etapas ya superadas”.

“Por eso te digo”, continuó mi amigo, “que casi 80 años después aquí en USA estamos más o menos en las mismas, porque la lucha parece estar planteada entre  Trump, quien no está en sus cabales y Biden, quien ya está demasiado frágil”.  “Aquí la cosa es hasta peor” – continuó mi amigo -  “porque Escalante se volvió loco súbitamente, mientras que Trump ya tiene tiempo así.  Una mañana lo llamaron desde Miraflores a su habitación del Hotel AVILA para recordarle que el presidente Medina lo estaba esperando para desayunar y respondió: “No podré ir, porque me robaron mis camisas y mi automóvil”, a pesar que las camisas estaban intactas en el closet y el auto lo esperaba en el estacionamiento del hotel.

Por supuesto, hasta ahí llegó la candidatura del Dr. Escalante. Mi amigo pensó unos segundos y añadió: “Aquí las cosas están más complicadas. La obsesión patológica de Trump por el poder lo ha llevado a enfrentar cuatro juicios criminales y uno civil y ha sido ya condenado por abuso sexual… Pero…. Está de líder en preferencias de los votantes para ser el próximo presidente de los Estados Unidos”.

Le comenté a mi amigo que no comprendía como muchos votantes parecieran dispuestos a elegir a un peligroso narcisista como presidente de la nación que es vista como líder del planeta. Y me respondió: “Es que en USA siempre ha existido admiración por lo que llaman un “maverick” (un excéntrico). Y se ha llegado a pensar que a un “maverick” se le puede aceptar que transgreda normas éticas que aplican al resto de los mortales. Gente que va a la iglesia todos los domingos le perdonan a Trump abusos de conducta  que ellos no aceptarían como norma en sus hogares”.

Mi amigo se tomó un buen sorbo de ponche crema y continuó: “Por su parte Biden es irresponsable, puesto que él debería saber que no está en condiciones de aguantar un quinquenio más como presidente del país (uno que le falta y cuatro que vendrían). El peso de la presidencia estadounidense se ha hecho realmente descomunal para cualquier mortal, agobiado por inmensos problemas geopolíticos, domésticos y familiares. Biden podría hasta morir en la Casa Blanca”.

 “Por el contrario”, terminó mi amigo, “de un anciano solo podrá esperarse poca innovación y, sobre todo, pocas sorpresas. Vivimos en  la USA de Kim Kardashian, de YE y la esposa de Will Smith, en la cual la gente  siente la necesidad de recibir revelaciones cada vez más grotescas y sensacionales”. 

Leonel Martínez, una segunda oportunidad 40 años después

En 1984 Leonel Martínez, de 20 años, representó a Venezuela en los Olímpicos de Los Angeles en Tiro al Plato y llegó de 41avo. Hoy tiene 60 años y ha calificado por segunda vez para los Olímpicos que se llevarán a cabo en París el próximo año. Ahora, dice Martínez, está en mucho mejor condición, ya que este deporte es mucho más mental que físico y a esta edad se siente más calmado, más relajado.

Si no gana esta vez, siempre podrá ir a Los Angeles en 2028, cuando solo tendría 65 años.

LA SOURIS QUI RUGIT

El anuncio hecho con bombos y platillos de reanudación de la actividad petrolera en el Lago de Maracaibo hecho por PDVSA y la empresa francesa Maurel  Prom parecería que le da un vuelco a la situación de inercia que caracteriza la actividad petrolera venezolana. El alivio de las sanciones, dice, permitirá a la empresa Maurel  Prom  regresar al campo Urdaneta Oeste, a fin de incrementar la producción en ese campo en…… 10.000 barriles diarios.

Tiembla la OPEP ¡

Se trata un campo de petróleo mediano a liviano, unos 26 grados API, bastante profundo. No solo el volumen a ser producido será muy modesto sino que una buena  parte de lo producido iría a pagar la deuda que PVSA tiene con la empresa, la cual aparentemente sobrepasa los $900 millones., ver: https://el-especialista.com/2023/11/08/exclusiva-detalles-del-acuerdo-entre-pdvsa-y-maurel-prom-sobre-convenio-de-explotacion-en-el-lago-de-maracaibo-zulia/  y https://www.barrons.com/amp/news/spanish/petrolera-francesa-maurel-prom-retoma-operaciones-en-venezuela-tras-alivio-de-sanciones-de-eeuu-e2de92b2

De allí que esta noticia hecha por PDVSA pueda ser catalogada como el rugido del ratón.