Protesta contra Obama es de fabricación cubana

 La misma maniobrita que usaba Fidel

El régimen de Hugo Chávez protesta “indignado”contra las declaraciones del presidente estadounidense Barack Obama sobre Venezuela. En comunicado dictado a Villeguitas por sus controladores cubanos se habla de un “deterioro” de las relaciones con los Estados Unidos. Estas declaraciones llevan la clara marca de fábrica de los estrategas cubanos, a quienes armar un caso contra los Estados Unidos siempre les parece la salida más adecuada cuando se les llena el cuarto de agua.

Las declaraciones de Obama, bien al vuelo por cierto, no pudieron ser más neutras. “No especulamos con la salud del Presidente Chávez” (es lo que piden los chavistas que diga la oposición). “El gobierno de Venezuela es autoritario” (Colón!).  “La decisión sobre el futuro venezolano debe estar en manos de los venezolanos” (es lo que dicen Raimundo y todo el mundo).

Hay que estar claros. No importa lo que hubiera dicho Obama, a Villeguitas le iban a ordenar que dijera lo que dijo. Esa ha sido la estrategia cubana de los últimos 60 años, protestar contra USA cada vez que tienen graves problemas internos. Y tremendo problema tienen en este momento los cubanos y los venezolanos piticubiches.

El líder que les manda el petróleo está allá, en post operatorio. Solo ellos saben en que condiciones está. Si estuviera en buenas condiciones ya lo hubieran fotografiado. La situación crítica del autócrata venezolano se refleja en las elecciones regionales de mañana. Hay que buscar, dicen los cubanos, un tema que reanime a los seguidores del autócrata y que una a los venezolanos alrededor del patrioterismo. Es una maniobrita más que sacan de un sombrero ya obsoleto.

Lo cierto es que Venezuela está a la deriva en este momento. No hay quien mande. A Maduro no lo escucha nadie. Cabello está preparando su movida.Los boliburgueses haciendo arreglos con el sistema financiero internacional para esconder su dinero mál habido. Los ministros aterrados, como los de Stalin en sus últimos momentos. Los embajadores con discursos anti-Chávez ya escritos para cuando sean necesarios. Esa es la realidad que los cubanos encargados de la estrategia comunicacional del régimen venezolano están tratando de ocultar detrás de posiciones patrioteras y patoteras dirigidas a antagonizar el imperio, por cierto el único que les paga al contado por el petróleo.   

Venezuela es una inmensa telenovela, donde cada día arman a toda prisa el capítulo para esa noche.