No le funcionó el fraude a Rafael Correa
Poco a poco los individuos y empresas que se aliaron con
el abogado Steven Donziger y el gobierno de Rafael Correa, para tratar de
quitarle miles de millones de dólares a Chevron en Ecuador, han ido abandonando
al abogado y a su ya pequeño grupo de cómplices. La deserción más reciente es
la de la empresa H5, una firma de servicios legales de California, la cual
ayudó a Donziger a captar fondos de la empresa Burford Capital y convenció al
bufete de abogados Patton Bogs para que se prestara a apoyar el juicio amañado.
Esta empresa también ayudó a Donziger a tratar de encubrir el informe del llamado
experto independiente Lenin Cabrera, el cual fue redactado por su equipo de
asistentes técnicos y legales para pedir una multimillonaria indemnización a
Chevron. La empresa H5, al rendirse,
renuncia a la participación que había adquirido de la posible multa
a Chevron. En la Corte de Nueva York, el 4 de Marzo de 2014, el juez Lewis
Kaplan dictaminó que el juicio contra Chevron en Ecuador había sido fraudulento
y sentenció a Steven Donziger por violar la ley contra la corrupción conocida
como RICO.
Ya más de doce individuos y empresas originalmente asociadas
a la demanda contra Chevron se han retirado de esta asociación por considerar
que el juicio fue fraudulento, a la luz de las pruebas presentadas por la
empresa en el juicio de Nueva York. Todavía Chevron mantiene su demanda en
contra de los abogados cómplices de Donziger, quienes crearon una empresa
llamada Amazonia Recovery Ltd., en Gibraltar, para recibir y distribuir los
fondos que hubieran resultado de la sentencia en Ecuador contra Chevron.
Tenemos unos cinco años siguiendo este juicio con alguna
atención, porque desde el principio me pareció que allí había un gran gato
encerrado. La empresa operadora que salió de Ecuador hace más de 20 años fue
acusada de contaminar el área, mientras que la empresa que había operado por
ese lapso de tiempo hasta hoy, Petro Ecuador, ni siquiera fue mencionada en la
demanda. El experto nombrado por el juez era un incompetente y un corrupto,
quien resultó estar en la nómina de la
parte acusadora, mientras el Presidente Correa amenazaba con encarcelar al juez
que absolviera a Chevrón.
La empresa decidió pelear y ha logrado probar el inmenso
fraude. Ahora el grupo acusador es el que está condenado. Se ha hecho justicia.
En la América Latina de hoy escasean las victorias de la justicia y. por ello,
hay que resaltarlas.
Lo que me sorprende todavía es la forma en la que tantos intereses se unieron para afiliarse a la demanda de Donziger, con la esperanza de sacar provecho de la recompensa de alguna manera. Los actores que se pagaron para hacerse pasar por manifestantes, fondos de cobertura que compraron cuotas de la liquidación anticipada de la empresa que financió la causa judicial, los sitios de medios sociales abrieron para atacar Chevron que operaron con fondos del gobierno ecuatoriano, y más.
Parece ser que los buitres están regresando a sus nidos hambrientos en esta ocasión.
Con todo el respeto que me merece pero su información con respecto al juicio seguido contra Chevron no se compadece al parecer con esta información aparecida hoy en el diario el País de España. Sería saludable un comentario de su parte ya que pareciera contradecir el suyo.
ResponderEliminarhttp://internacional.elpais.com/internacional/2015/09/04/actualidad/1441401848_514963.html