LOWENTHAL Y sMILDE
***** recomiendan transarse, negociar, hacer concesiones, ir a votar,
levantar sanciones. TODO ELLO OXIGENA A MADURO
***** piensan que es POSIBLE
DERROTAR AL régimen SI LO VALIDAMOS COMO LEGÍTIMO Y jugaMOS BAJO sus reglas
En un artículo publicado en el New York Times del pasado
20 de Julio, ver: https://www.nytimes.com/es/2020/07/20/espanol/opinion/venezuela-oposicion-guaido-maduro.html. , titulado “Que Debe Hacer la Oposición para Avanzar” Abraham Lowenthal y
David Smilde reiteran, hasta con mayor
énfasis, los mismos malos consejos que nos dieran en Diciembre de 2019 sobre
como resolver la crisis venezolana. Esta vez nos dicen lo siguiente:
1. Sigan el ejemplo de Chile de 1986, cuando
una coalición de oposición a Pinochet ganó un plebiscito ordenado por el propio
Pinochet, resultado que fue aceptado por el ejército. Con esta recomendación se equivocan por triplicado porque (a), Maduro no
ordenaría un plebiscito, (b), el ejército no aceptaría que él perdiera, ni (c),
el proceso sería transparente. Rechazo que los autores digan que ese ejemplo “deba
aplicarse a la Venezuela de hoy”,
recomendación ingenua o mal intencionada;
2. Según los autores: “No ayuda a la oposición subestimar el
compromiso de quienes militan en el chavismo con su propia visión de Venezuela,
ni ignorar el apoyo que ese movimiento obtuvo de un sector de los venezolanos y
el respaldo residual que todavía le da”.
Rechazamos igualmente esta aseveración porque son Lowenthal y Smilde
quienes sobre- estiman el apoyo que tiene el régimen. El apoyo al chavismo/madurismo
en Venezuela se encuentra esencialmente reducido
a los cómplices civiles y militares del régimen y a algunos de los grupos criminales llamados colectivos. Lo
que los autores piensan que es apoyo popular es miedo, sojuzgamiento basado en el terror y el hambre;
3. Los autores del artículo argumentan que: “las autoridades de Maduro
controlan el territorio de Venezuela, las instituciones públicas, las fuerzas
de seguridad, la vasta mayoría de los recursos y la capacidad del país para
diseñar e implementar políticas nacionales” y agregan: “Un gobierno
altamente autocrático solo puede ser derrocado… cuando hay apoyo nacional para
una fuerza alternativa creíble, capaz de ganarse el respaldo de las Fuerzas
Armadas y de gran parte del sector empresarial, de la sociedad civil y de la
opinión pública, y demostrar la capacidad gerencial y técnica para dirigir el país”.
Es intolerable que estos dos intelectuales estadounidenses, formados en una
sociedad libre y democrática, coloquen a la dictadura de Maduro en un plano de igualdad
moral con sus víctimas y le exijan a la oposición capacidades y apoyos que ni
siquiera le exigen al régimen. No existe en estos politólogos la menor pizca de
comprensión sobre la diferencia entre
los criminales del régimen y sus víctimas.
4. Lowenthal y Smilde dicen: “La oposición debe articular una visión
llamativa y unificadora que le ofrezca esperanza a la mayoría de los
venezolanos, así como métodos de participación y beneficios prácticos”.
Parecen considerar al régimen como un gobierno
“normal” que debe ser derrotado
mediante una mejor oferta. Según ellos la oposición debe demostrar ser mejor
que la dictadura. Esta es una postura totalmente divorciada de la realidad de
la situación;
5. Según los autores: “La mejor manera de [construir una
alternativa] es participando activamente
en los asuntos públicos y la política, y emprendiendo actividades de ayuda y
reconstrucción, aun si eso significa cooperar con el gobierno”. Los autores del artículo llaman abiertamente a
la colaboración con el régimen. Se unen al grupo de entreguistas quienes han optado
por uncirse al carromato de la dictadura.
6. En base a esas consideraciones los autores proponen: “Participar en elecciones”,
lo cual “debe intentarse para fortalecer la visibilidad y la capacidad
organizativa de la oposición en toda Venezuela… Estas actividades podrán dar frutos más
adelante, aunque la oposición democrática no triunfe en los comicios
parlamentarios programados para diciembre”
Para Lowenthal y Smilde la participación en la opereta electoral que
prepara el régimen sería una manera de
irse preparando pata un futuro indeterminado en el cual la oposición pueda
finalmente ascender al poder. Lowenthal y Smilde piden paciencia a los
venezolanos porque los frutos vendrían “más adelante”. Es difícil mantener la calma
ante recomendaciones tan rastreras como estas.
7. No solo Lowenthal y Smilde piden paciencia, no solo recomiendan no intentar
promover intervenciones extranjeras contra el régimen, no solo advierten contra
una intervención militar estadounidense ( la cual en todo caso – sería una
intervención multilateral), sino que
agregan – ya sin disimulos : “La oposición también debería considerar
presionar, por el bien del país y sus ciudadanos, para que se levanten algunas
de las sanciones impuestas a Venezuela en lugar de presionar para que se
endurezcan esas medidas con la esperanza de que ocasionen la caída del gobierno”.
Según estos paladines de la dignidad las
sanciones que han debilitado al régimen de Maduro deben cesar.
8. Finalizan con estas perlas: “Las discusiones amplias y bien preparadas
entre representantes del régimen de Maduro y de la oposición democrática
proporcionan la mejor ruta disponible para allanar el camino a una transición
democrática. Para que esas discusiones sean eficaces, se requiere espacio,
tiempo y confidencialidad, no transparencia inmediata”. Insisten los
autores del artículo en llevar a cabo negociaciones no transparentes con el
régimen lo cual casi inevitablemente llevaría a concesiones indebidas y a
soluciones “pragmáticas” en sacrificio de los principios. Es evidente que Lowenthal
y Smilde ven el problema como un simple ejercicio politológico, sin asomo de
empatía o atención a la ética.
En otras palabras, se pueden dar el lujo de
ser inmorales.
NOTA SOBRE EL ESCRITO DE ESTOS AUTORES DE DICIEMBRE 2019:
En Diciembre 2019 Abraham Lowenthal y David Smilde
publicaron en el importante Centro de Reflexión de Washington DC Wilson Center
un extenso escrito sobre Venezuela, ver: https://www.wilsoncenter.org/sites/default/files/spanish-lowenthal_and_smilde_final.pdf, en el cual hicieron algunas consideraciones sobre el conflicto venezolano
que comenté en mi blog, ver: https://lasarmasdecoronel.blogspot.com/2019/12/lowenthal-y-smilde-malos-consejos-sobre.html, por considerarlas sumamente negativas para la causa de la democracia
venezolana. En aquel escrito los autores cometían, en mi criterio, los
siguientes errores de apreciación:
1. Pedían confiar en la sinceridad
de propósitos del régimen de Nicolás Maduro y lo aceptaban como legítimo, lo
cual era un grave error. El régimen de Nicolás Maduro es ilegítimo de origen y
de comportamiento y se equivoca quien
confía en sus buenos propósitos;
2. A fin de validar al régimen
los autores minimizaban la grave situación de dependencia del régimen de Maduro
en Cuba y afirmaban que el régimen de Maduro no podía no calificarse de un
“Estado Mafioso”, algo que es evidente;
3. Los autores recomendaban una
estrategia de hablar “discretamente” con Maduro mientras
se seguía peleando abiertamente con él. Ello representaría una duplicidad
inmoral. Tales negociaciones clandestinas serían rechazadas por el país;
4. Los autores proponían darle
garantías a los personeros claves del régimen de que serán respetados, de que
sus intereses serían protegidos. Aunque los autores no excluían la posibilidad
de aplicar justicia, claramente recomendaban ofrecer concesiones en este punto
para poder negociar con éxito;
5. Los autores recomendaban
incluir en el proceso de transición a aquellos personeros civiles y militares
del régimen de Maduro que expresaran el deseo de seguir participando. Esto
sonaba a una amnistía general, puesto que estos personeros simplemente
expresarían ese deseo para salvar el pellejo;
6. Los autores postulaban la
necesidad de “ser tolerantes”, aun cuando la justicia no fuese debidamente
aplicada.
Sobre lo de 2019 (punto 3), eso fue exactamente lo que hizo la oposición colaboracionista.
ResponderEliminarSobre el punto 6 actual 2020, "tener paciencia" , me recuerda cuando el presidente interino eterno le dijo a un joven hambriento, en Vargas, "aguanta"
Para que esto haya llegado a este estado de anomia, de apatía y de desesperanza, aparte de la destrucción fisica del país, ha sido necesaria la colaboración de una falsa oposición
En cuanto a los sinvergüenzas que proponen el desaguisado son una muestra, otra, del cáncer marxista que se ha apoderado desde hace décadas de la universidad, la academia, la cultura y la industria del entretenimiento de ese país.
Muy de acuerdo con el comentarista anterior. Según sus biografías, estos sujetos que menciona Coronel en su artículo, son profesores universitarios y miembros del mundo académico donde está enquistada la extrema izquierda. Estos son los “tontos útiles” que usa el marxismo para avanzar en las democracias con el objetivo de destruirlas completamente, como lo han hecho acá en Venezuela, y que ahora están enfilando todas las baterías contra los Estados Unidos.
ResponderEliminarTambién hay que notar que muchos de ellos, como Lowenthal, son miembros militants del partido demócrata. Así que de ganar Biden las elecciones de Noviembre, por ser simplemente títere de la extrema izquierda del partido demócrata, no hay dudas que ésas opiniones malsanas o "consejos", serán lo que formará la política, ó estrategia de ese gobierno hacia Venezuela.
23 años y estos sinverguenza todavía creen que Caldera y Calvani está en Miraflores.
ResponderEliminarNo mejora el enfermo.
Humberto Acosta.
oxigeneados on no, ya pa que?
ResponderEliminarPensar en una negociacion con un régimen que ha abusado de las leyes, ha matado y encarcelado gente por no estar de acuerdo con ellos, donde la droga y la corrupción son los negocios de régimen, es absurdo!
ResponderEliminarÉste par de individuos no conocen la situación en Veenzuela o son tarifados del régimen.
La nave espacial del tamaño de un carro pequeño acaba recien de despegar ¨existosamente¨ hacia el Planeta Marte. Su nombre es espectacular: ¨perseverancia-perseverance¨!
ResponderEliminarPerseverancia es una cosa que todos hacemos para subsistir.
Creo que la Perseverancia es todo lo que le queda a los Venezoolanos!
Ahora en cuanto a negociar con el Régimen en Venezuela. Cabría preguntarse, ¿con cuántos hay que negociar y cuánto será la negociación?
ResponderEliminar¡Eso si que es ir al fondo de la cuestión!
Y cuando no hay negociaciones de nungún tipo o muy pocas negociaciones, dijo mi compadre: ¨sálvese quién pueda, na guará...¨; media vuelta y Caballo Blanco de Simón Bolívar...