El chavismo: un grupo de bárbaros bajo el control de los Cubanos.
Una aproximación a la ciencia-ficción.
Hace más de 30 años el notable escritor de ciencia-ficción estadounidense Jack Vance publicó su trilogía de “Durdane”: (I), “El Anome”, (II), “Los Bravos Hombres Libres” y (III) “Los Asutra”. En esa maravillosa trilogía Vance parece haber pronosticado, sin darse cuenta, la invasión de Venezuela por una tribu de bárbaros semi-inteligentes enviados desde el exterior para sojuzgar al país y utilizarlos como cabeza de playa para sus fines de dominación. Claro, en sus libros Vance no llama al país Venezuela sino Shant. Tampoco llama a la tribu invasora los chavistas, sino los Roguskhoi. La primera vez que leí la trilogía fue en la década de 1980, cuando aún los invasores chavistas no habían aparecido en Venezuela. Sin embargo, ahora que se han adueñado del país, me doy cuenta de que hay un paralelismo casi perfecto entre los monstruos que hoy dominan a Venezuela y los Roguskhoi de Vance, manejados por los Asutras. Vance describe a los Asutras como seres semi-escarabajos, semi-arañas que se insertan en el cuerpo de los Roguskhoi y los ponen bajo su control telepático, obligándolos a actuar de la manera como ellos quieren que actúen. Yo creo que el equivalente de los Asutras en nuestro caso son los Cubanos. Los chavistas han sido infiltrados por los Cubanos, quienes los han ido controlando con métodos químicos o telepáticos de alguna naturaleza, a fin de hacerlos obedecer sus instrucciones.
Mi hipótesis de trabajo se basa en los primeros viajes que hizo Chávez a La Habana. Allí fue recibido por Fidel Castro y alojado aparentemente en una villa especial, no en un hotel. En su comida o bebida se le dió algun tipo de droga que lo mantuvo inconsciente por varios días. Durante ese período, Chávez fue objeto de un implante de órgano de una naturaleza desconocida, de un tratamiento químico o de un lavado de cerebro a lo “candidato de Manchuria”, que lo redujo a ser un simple vehículo de la voluntad Cubana. Al regresar a Venezuela ya Chávez era un vasallo mental de Fidel Castro, ya los Cubanos le habían metido el Asutra hasta los tequeteques. En años subsiguientes grandes cantidades de venezolanos de “izquierda” visitaron La Habana y allí fueron objeto del mismo tratamiento dado a Chávez: Rangel, los Rodríguez (Isaias, Jorgito y Ramón), etc. En efecto, el tratamiento convirtió a algunos de ellos en seres sub-humanos, debido a alguna reacción bioquímica compleja. Por eso es que Rodríguez Chácín, Aristobulo,Cilia, Darío Vivas, Iris Varela, Adina Bastidas, Ana Luisa Osorio y Lina Ron, entre muchos otros, exhiben una morfología extraña, bastante alejada de los patrones anatómicos normales y un cociente intelectual a nivel de los homínidos. Nuevas generaciones de Roguskhoi criollos han sido creados para hacer los trabajos más sucios del grupo de bárbaros: la jueza Calderón, los generales de cuatro soles, Jacqueline Faría, Carlos Escarrá y Clodosbaldo, especímenes que pertenecen a una generación posterior de monstruos, la cuál ha recibido asutras de menor categoría, proporcional a la ínfima calidad moral de los huéspedes. Los habitantes de Shant son sojuzgados, en los libros de Vance, mediante el uso obligatorio de un collar explosivo, el cuál es accionado por el anome (Chávez) vasallo de los asutras (los Cubanos)) cada vez que alguien trata de sublevarse.
Lo que es muy interesante en la trilogía de Vance es que el líder que finalmente emerge para luchar y vencer a los Rogusskhoi y a los asutras es un jóven músico, Gastel Etzwane, quien con perseverancia y alguna ayuda recibida de un académico venido del Planeta Tierra, logra inspirar al pueblo a la mobilización contra los invasores .
Para que el paralelismo entre la trilogía de Vance y el caso de Venezuela sea completo, es necesario que sea un jóven músico Venezolano quien lidere la rebelión contra los Roguskhoi criollos y sus jinetes Cubanos. Andará conspirando Dudamel? Será Ilan Chester el hombre?
Una aproximación a la ciencia-ficción.
Hace más de 30 años el notable escritor de ciencia-ficción estadounidense Jack Vance publicó su trilogía de “Durdane”: (I), “El Anome”, (II), “Los Bravos Hombres Libres” y (III) “Los Asutra”. En esa maravillosa trilogía Vance parece haber pronosticado, sin darse cuenta, la invasión de Venezuela por una tribu de bárbaros semi-inteligentes enviados desde el exterior para sojuzgar al país y utilizarlos como cabeza de playa para sus fines de dominación. Claro, en sus libros Vance no llama al país Venezuela sino Shant. Tampoco llama a la tribu invasora los chavistas, sino los Roguskhoi. La primera vez que leí la trilogía fue en la década de 1980, cuando aún los invasores chavistas no habían aparecido en Venezuela. Sin embargo, ahora que se han adueñado del país, me doy cuenta de que hay un paralelismo casi perfecto entre los monstruos que hoy dominan a Venezuela y los Roguskhoi de Vance, manejados por los Asutras. Vance describe a los Asutras como seres semi-escarabajos, semi-arañas que se insertan en el cuerpo de los Roguskhoi y los ponen bajo su control telepático, obligándolos a actuar de la manera como ellos quieren que actúen. Yo creo que el equivalente de los Asutras en nuestro caso son los Cubanos. Los chavistas han sido infiltrados por los Cubanos, quienes los han ido controlando con métodos químicos o telepáticos de alguna naturaleza, a fin de hacerlos obedecer sus instrucciones.
Mi hipótesis de trabajo se basa en los primeros viajes que hizo Chávez a La Habana. Allí fue recibido por Fidel Castro y alojado aparentemente en una villa especial, no en un hotel. En su comida o bebida se le dió algun tipo de droga que lo mantuvo inconsciente por varios días. Durante ese período, Chávez fue objeto de un implante de órgano de una naturaleza desconocida, de un tratamiento químico o de un lavado de cerebro a lo “candidato de Manchuria”, que lo redujo a ser un simple vehículo de la voluntad Cubana. Al regresar a Venezuela ya Chávez era un vasallo mental de Fidel Castro, ya los Cubanos le habían metido el Asutra hasta los tequeteques. En años subsiguientes grandes cantidades de venezolanos de “izquierda” visitaron La Habana y allí fueron objeto del mismo tratamiento dado a Chávez: Rangel, los Rodríguez (Isaias, Jorgito y Ramón), etc. En efecto, el tratamiento convirtió a algunos de ellos en seres sub-humanos, debido a alguna reacción bioquímica compleja. Por eso es que Rodríguez Chácín, Aristobulo,Cilia, Darío Vivas, Iris Varela, Adina Bastidas, Ana Luisa Osorio y Lina Ron, entre muchos otros, exhiben una morfología extraña, bastante alejada de los patrones anatómicos normales y un cociente intelectual a nivel de los homínidos. Nuevas generaciones de Roguskhoi criollos han sido creados para hacer los trabajos más sucios del grupo de bárbaros: la jueza Calderón, los generales de cuatro soles, Jacqueline Faría, Carlos Escarrá y Clodosbaldo, especímenes que pertenecen a una generación posterior de monstruos, la cuál ha recibido asutras de menor categoría, proporcional a la ínfima calidad moral de los huéspedes. Los habitantes de Shant son sojuzgados, en los libros de Vance, mediante el uso obligatorio de un collar explosivo, el cuál es accionado por el anome (Chávez) vasallo de los asutras (los Cubanos)) cada vez que alguien trata de sublevarse.
Lo que es muy interesante en la trilogía de Vance es que el líder que finalmente emerge para luchar y vencer a los Rogusskhoi y a los asutras es un jóven músico, Gastel Etzwane, quien con perseverancia y alguna ayuda recibida de un académico venido del Planeta Tierra, logra inspirar al pueblo a la mobilización contra los invasores .
Para que el paralelismo entre la trilogía de Vance y el caso de Venezuela sea completo, es necesario que sea un jóven músico Venezolano quien lidere la rebelión contra los Roguskhoi criollos y sus jinetes Cubanos. Andará conspirando Dudamel? Será Ilan Chester el hombre?
La obra de Vance es premonitoria de lo que pasaría en nuestro país 20 años después de su publicación. Que le parece?
6 comentarios:
Apreciado Don Gustavo:
Lo seleccioné como receptor del reconocimiento "11 de abril". Puede buscarlo en http://elblogdelpadrecarlos.blogspot.com/2009/04/reconocimiento-11-de-abril.html
Saludos
Gracias Padre carlos. Muy agradecido por su distinción,
Gustavo
Utilizar –cubano- como calificativo comunista y parásito ha sido un adjetivo sumamente desproporcionado y fuerte.
Yo hubiera dicho gobierno, castristas, pero -cubanos-, ellos sólo sobreviven como mejor pueden, dándose golpes en la oscuridad por la venda negra sobre sus ojos. Aunque, finalmente, no fui yo, sino usted, quien escribió el artículo y si lo he leído, ha sido por sana voluntad, algo que los–cubanos- desconocen.
Es cierto que decir Cubanos envuelve a muchos quienes no aprueban de lo que sucede en la isla, son víctimas de lo que sucede allá. Castristas hubiese sido un mejor término. LO usaré de ahora en adelante. Gracias,
Gustavo
No, gracias a usted por este espacio =]
yes.. love this :)
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