sábado, 30 de junio de 2018

Chamba juvenil, “magnicidio” y atropellos a la propiedad privada



Los culpables del intento de "magnicidio", según Delcy Rodríguez, "La Vengadora"

*** Nuevos crímenes del narco-régimen
Ya el desastre del narco-régimen venezolano es de tal magnitud que no es posible atender a una sola debacle o de un solo crimen. Como un dique que presenta múltiples fracturas,  no hay ya manos suficientes para tratar de bloquearlas simultáneamente.
Acabo de leer un decreto que crea algo un nuevo programa loco llamado la Gran Misión Chamba Juvenil, firmado por los 35 impresentables miembros del gabinete ejecutivo, es decir, el presidente Maduro, la vicepresidente Delsy y los 33 ministros,  una especie animal que se multiplica como los conejos en Australia.
La Gran Misión Chamba Juvenil
¿Quiénes son los beneficiarios de esta nueva Misión (Limosna)? Son todos los jóvenes de 15 a 35 años. Según el decreto se trata de subsidiar a toda esta inmensa masa de venezolanos, colocándolos en los siguientes campos de actividad: Misión Jóvenes de la Patria Robert Serra;  Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista, (INCES); Brigadas Agrourbanas; Misión Saber y Trabajo;  Programa Soy Joven Productivo;  Chamba Juvenil Vuelta al Campo;  Fundos Zamoranos; Sistema de Becas de Liceos, Universidades y Colegios; Vivienda Joven;  Criptoeconomía.
 Para darles un ejemplo, la Misión Jóvenes de la Patria Robert Serra se dedica a: involucrar a los jóvenes en actividades en el barrio para lograr que cada chamo pueda parecerse a Robert, ser como Chávez…”. El diabólico objetivo sería crear venezolanos acomplejados y gansteriles como los difuntos  Robert Serra y Hugo Chávez. Otros irían a engrosar el grupo de becarios-reposeros en los planteles bolivarianos. De especial preocupación es la mención sobre criptoeconomía, ya que los jóvenes se dedicarían a crear las condiciones para desarrollar y fortalecer el sistema de las criptomonedas, en especial  La Minería Digital;  El intercambio o Trading;  La Billetera Digital o Wallet; las Casas de Cambio o Exchange; y los Mercados Digitales o criptotiendas. Nada de trabajar.
“Magnicidio”
Otro tema de moda para el narco-régimen es el del “magnicidio”, zarzuela montada para acusar a verdaderos opositores venezolanos de intentos de asesinar al payaso enquistado en  Miraflores. Una reciente confesión de la ex- Fiscal Ortega Díaz se refiere al montaje que el régimen llevó a cabo en 2014 para  acusar a  María Corina Machado, Diego Arria, Henrique Salas Romer, Gustavo Tarre Briceño y a Pedro Mario Burelli  de planear el 'magnicidio' de Maduro. En esa oportunidad también quisieron involucrar a los Embajadores estadounidenses Bill Brownfield y Kevin Whitaker en la farsa. Delcy Rodríguez  llegó a presentar en la Asamblea Nacional un cuadro donde presentaba a los presuntos magnicidas. Hoy el narco-régimen ha resucitado las acusaciones, esta vez enfocadas en contra de María Corina Machado, sugiriendo que Colombia es parte de la trama. Ello revela el desespero de Maduro por crear escándalos que puedan servir para darle algún oxígeno a su agonizante narco-régimen.
Confiscación de viviendas: Ubica tu Casa
Este atropello a la propiedad privada pretende quitarle las viviendas a quienes no la estén ocupando en el momento y estén ausentes del país debido a la situación de miseria y tragedia que impera en el país. Es una acción delictiva promovida por los Consejos comunales, centros de vagos y maleantes apoyados por el régimen. Esta acción es producto del odio de clases y está dirigida en contra de quienes con su trabajo han podido poseer su hogar, a fin de beneficiar a quienes por su desidia y/o ignorancia carecen de un techo sobre sus cabezas. Esta agresión del narco-régimen está llevando a la creación de grupos de defensa que no permitirían tal abuso, lo cual puede llevar a la guerra civil.
Confiscación del 70% de  la producción a empresas privadas
El más reciente atropello al país tiene que ver con la exigencia del narco-régimen a las empresas privadas de entregarle el 70% de su producción, sin saber qué tipo de pago se le daría, probablemente en inservibles papeles del narco-régimen o en los igualmente inservibles “petros”. Esta es una afrenta que debe ser resistida con todos los hierros.

Cuatro crímenes que se añaden a la cadena interminable de insultos a los venezolanos. La reacción de Venezuela ante el narco-régimen no puede esperar más. Hay que ir a una huelga general indefinida. La sociedad venezolana tiene que echar el resto frente a los hampones del narco-régimen y sus cómplices militares y de la falsa oposición. Falcón desea ir a dialogar con Maduro después de acusar al régimen de fraude electoral. El y quienes lo siguen son moralmente invertebrados.
Quienes tengan sangre en las venas no deben soportar más insultos y humillaciones. Ya el país está listo para ponerse de pie. El sector salud, el sector transporte están en rebeldía. Sigámoslos.

jueves, 28 de junio de 2018

Se cae el régimen y hay que empujarlo




               ** Ideas para una hoja de ruta post chavista

Para H.O. 

La caída del narco-régimen chavista de Nicolás Maduro se vislumbra a corto plazo, aun cuando los venezolanos no movieran un dedo para sacarlo del poder. Ello sería el resultado del creciente colapso de todas las instituciones y sectores del país, algo que está a la vista de todos, Ejemplos: PDVSA en ruinas; el sector de la salud colapsado; las finanzas destruidas hasta el punto de que los acreedores internacionales ya se organizan para tratar de recuperar sus deudas y el país se encuentra en progresiva  cesación de pagos; la fuerza armada desmoralizada y en efervescencia; el seno del chavismo profundamente fracturado y dividido entre los “chavistas” y los “maduristas”, tratando de culparse mutuamente por el desastre; la inflación desbordada; el hambre y las enfermedades fuera de control; el éxodo de venezolanos indetenible; revelaciones sobre nuevos casos de  corrupción a los más altos niveles del narco-régimen aparecen cada día en la prensa internacional. Desde afuera la Unión Europea impone nuevas sanciones, el rey de España pide ayuda a USA para expulsar al narco-régimen; el vicepresidente de USA, Pence, viaja a la región a promover el endurecimiento de las sanciones; el Club de París analiza la cesación de pagos del régimen venezolano; la ONU envía informe condenatorio de Venezuela al Tribunal Internacional de Justicia; la OEA envía su informe igualmente condenatorio a La Haya; La Organización Internacional del Trabajo investiga las violaciones del derecho laboral venezolano; la Organización Panamericana de la Salud emite un informe muy crítico sobre la crisis de salud en Venezuela
Es un tsunami de podredumbre avasallante que el narco-régimen trata de contener rotando desesperadamente su pequeño entorno de ladrones y jineteros morales; Delcy Rodríguez es ahora vicepresidente; El Aissami ahora ministro de un nuevo ministerio; Freddy Bernal va para allá; Diosdado Cabello y  su esposa brincan para acá, el sobrino de Calixto salta al BCV; ministros entran y salen vertiginosamente; Rafael Ramírez utiliza sus “ahorros” en pintarse como víctima; Jorge Giordani es ahora un crítico del régimen del cual fue figura protagónica.  El incesto político alterna con la fugas de los cobardes hacia una tardía oposición.
Sin embargo, esta tragicomedia del narco-régimen no es suficiente. Es  necesario que el país se ponga de pie, se levante, se rebele. ¿Por qué? Hay dos poderosas razones. 
La primera es el severo precio que Venezuela paga por cada día que el narco-régimen permanece en el poder. Es un precio inaceptable en términos de muertes, angustia, miseria, persecuciones, tristezas y lágrimas, no solo para quienes se oponen al narco-régimen sino para quienes aún – de manera inexplicable – lo defienden porque piensan en su caja de comida mensual  y todavía creen en las promesas del paraíso socialista. Venezuela se ha convertido en un ejemplo de degradación colectiva ante los ojos asombrados de la región. Nuestra caída ha sido tan horrorosa que genera compasión aún entre los países más pobres del hemisferio. Esto no es aceptable porque niega nuestra historia y nuestras aspiraciones de ser un país civilizado.  
La segunda es que la sociedad venezolana se ha deteriorado en sus principios y valores y es preciso rescatarlos. Ha permitido que un grupo de ignorantes y corruptos, de mediocres y abusadores, le haya puesto la bota encima por casi 20 años. Y esto es comprobable ya que esa gentuza está todavía en el poder. No ha sido expulsada  ni por la oposición civil ni por la acción constitucional de la Fuerza Armada. Al contrario, la Fuerza Armada se ha convertido en su principal cómplice en el saqueo del país, acción que la condenará por siempre ante los ojos de los venezolanos amantes de la civilidad y la libertad. La oposición ha tenido brillantes momentos y ha puesto sus mártires pero la masa crítica ha fallado, dando un paso atrás cuando era necesario echar el resto. Es increíble que aún hoy en día existan miembros de la llamada oposición que favorezcan  un entendimiento con el narco-régimen. Si Venezuela desea redimir su buen nombre en el concierto de las naciones debe expulsar al narco-régimen de su seno, no esperar a que alguien lo haga por ella. En realidad, nadie lo va a hacer, a menos que exista, en paralelo, un estado de abierta rebelión interna que demuestre que existe coraje colectivo y una reserva moral en el liderazgo del país.
Por ello, es urgente que líderes Ledezma, Leopoldo, María Corina, Arria, Ugalde, Aristeguieta y los líderes de los sectores de la sociedad civil venezolana se reúnan a la brevedad posible para organizar una huelga general que pueda poner al país de pie y pedir al mundo exterior su apoyo en lo que debe ser un enfrentamiento final con el narco-régimen. Todas las condiciones están dadas, menos la decisión de ir adelante.  
La salida del narco-régimen, cuando se haga efectiva, debe ser seguida por una transición muy breve, donde el nuevo presidente sea, bien el presidente de la Asamblea Nacional o, si ello se decidiese por común acuerdo, se estructurara un triunvirato civil, ninguno de cuyos miembros sería elegible para una candidatura presidencial posterior. Este triunvirato, apoyado por la Asamblea Nacional genuina, debería fijar la fecha de las elecciones presidenciales, a ser supervisadas por un nuevo CNE y por organismos internacionales, a ser llevada a cabo con contaje manual, como el celebrado en Colombia recientemente.
¿Quiénes podría ser miembros de este triunvirato? Nombrar nombres es arriesgado porque invita a la discusión improductiva sobre este o aquél,  pero si tal modalidad fuese aceptada, será inevitable proponerlos y someterlos a la consideración de la Asamblea Nacional. Hay suficientes venezolanos capaces de integrar este triunvirato.
A título totalmente personal, ya que no tengo ataduras grupales de ninguna especie, pienso en personas del tipo de Luis Ugalde, Moisés Naím,  Asdrúbal Aguiar, Diego Arria,  Gustavo Tarre,  María Corina Machado, Alfredo Romero, Paulina Gamus, Gerver Torres, Enrique Aristeguieta Gramcko, Carlos Blanco, Pedro Mario Burelli o Tamara Suju, venezolanos quienes se han mantenido enfrentados  a la dictadura y poseen la madurez e integridad necesarias para conducir un período de transición en Venezuela que será delicado y lleno de obstáculos.    
Se requiere una guía estratégica básica que oriente la actividad del gobierno de transición. Debería, quizá, pensarse a lo largo de las siguientes líneas:
1.   Clara diferenciación del nuevo gobierno con el anterior
2.   Establecer confianza del mundo exterior en la nueva dirección del país
3.   Obtener ayuda internacional de tipo humanitario y financiero para sobrellevar la crisis
4.   Hablarle claro al país sobre la desastrosa situación del país y sobre la responsabilidad de los miembros de la pandilla chavista
5.   Comenzar a desmontar algunos mitos especialmente dañinos como el estatismo exagerado y los conceptos de falsa soberanía y Venezuela potencia, así como los alineamientos hoy existentes con gobiernos forajidos como Irán, Zimbabue, Cuba, Nicaragua, Libia y grupos como las FARC y Hezbollah
6.    Eliminar de inmediato los subsidios petroleros a países extranjeros y desligarse totalmente de UNASUR, de ALBA y de Petro Caribe, tal como está estructurada.
7.   Nombrar una Comisión de restructuración de la industria petrolera nacional, la cual deberá propondría una estrategia de transición en el lapso de seis meses y una recomendación sobre un nuevo modelo de gestión petrolera para el país.
8.   Liderar agresivamente el inicio de un cambio actitudinal en el pueblo venezolano para guiarlo hacia una sociedad trabajadora, no dependiente del Estado paternalista
9.   Hacer énfasis  en la separación de poderes y en la depuración de los organismos y agencias del estado, hoy saturados de corrupción e ineficiencia  
10.                   Integrar un Consejo de Recuperación Económica Nacional para guiar los primeros pasos de esta urgente tarea.
Con estas sugerencias solo pretendo ofrecer algunas ideas y contribuir a los esfuerzos que se llevan a cabo actualmente para iniciar el proceso de regreso de Venezuela al sitio que nunca ha debido abandonar en el concierto de las naciones civilizadas. Estoy seguro de que algunas de ellas podrían no ser  factibles, otras podrían ser hasta ingenuas, pero dar un paso al frente es un riesgo que deben correr  todos los ciudadanos venezolanos genuinamente interesados en la recuperación de nuestra nación.

martes, 26 de junio de 2018

My letter to OPEC asking for the expulsion of Venezuela as a member country


I sent a letter to Mr. Mohammad Sanuso Barkindo, Secretary general of OPEC, which can be read below. In this letter I ask OPEC to expel Venezuela from the organization for failing to comply with its production quota and for running its petroleum industry with a group of incompetent and corrupt managers. This expulsion should hold while the current regime continues mismanaging the petroleum industry of my native country. It is not easy to contact OPEC and the only way I found was via a form which severely limita the extent of the communication. However, I think is clear enough:


                                                                                McLean, June 2018
Mr.
Mohammad Sanusi Barkindo
Secretary General
Organization of Petroleum Exporting Countries, OPEC

Dear Mr. Barkindo:
I am a Venezuelan geologist, member of the founding Board of Petroleos de Venezuela. I write to you to denounce the tragic situation of the Venezuelan petroleum industry. As a former petroleum Geologist and executive of the Venezuelan petroleum industry and a citizen of the country I want to express my deep shame for the manner this industry is being run. The country has not been able to fulfill its quota requirements for a long time now and merits expulsion, since such failure is due to incompetence and criminal activity in the management of the oil corporation. After a long and distinguished membership in OPEC Venezuela now has now become a source of discredit to the organization and this should not go unpunished.
Sincerely yours,
Gustavo Coronel

domingo, 24 de junio de 2018

La OPEP asombrada de la ignorancia de Manuel Quevedo, presidente de PDVSA


*** Venezuela podría ser expulsada de la organización por la
                     corrupción e ignorancia de sus líderes
Las delegaciones de los países miembros de la OPEP reunidas en Viena para decidir sobre un aumento de producción a nivel de la organización, escucharon con asombro mezclado con hilaridad al ministro de petróleo venezolano  Manuel Quevedo decir que Venezuela cumplirá este año con la orden de Nicolás maduro de aumentar la producción venezolana en un millón de barriles diarios. “Esto lo haremos sin dudas” dijo Quevedo a un periodista, ver:  https://www.cnbc.com/video/2018/06/22/venezuelan-energy-minister-can-absolutely-grow-production.html. Y agregó: “Contamos con nuestros trabajadores”.
Posteriormente, la Agencia EFE transmitió información más detallada de lo aseverado por Quevedo. Dijo: “ 22-06-18.-El ministro venezolano del Petróleo aseguró este viernes que cumplirá el objetivo fijado por Nicolás Maduro de producir un millón de barriles diarios más en 2018 aunque reconoció que será un "reto" y rechazó el "pesimismo" de las agencias internacionales que apuntan al contrario a un importante declive de la producción”.  
Los expertos petroleros de la OPEP escucharon  estas palabras de Quevedo con asombro, ya que la producción venezolana se ha desplomado en los últimos años y hoy está al nivel de lo que el país producía hace más de 40 años. Recuperar un millón de barriles diarios de producción en seis meses es algo que desafía toda imaginación. Quien lo diga demuestra ser un charlatán que merece ser expulsado del recinto.  La Agencia Internacional de la Energía (AIE) aseguró la semana pasada que, según sus previsiones, la producción podría caer a menos de un millón de barriles diarios a finales de este año, una caída que atribuye a "la mala gestión, la falta crónica de inversión y la corrupción" en la industria petrolera del país.
Sin embargo, Quevedo afirmó en español, ya que necesita un traductor: “ Ellos [los expertos] tienen su opinión pesimista de nuestro país, nosotros tenemos una opinión optimista, de trabajo, con nuestros trabajadores (...) Vamos con los trabajadores a recuperar PDVSA".
Mi contacto en la OPEP me dice que estas declaraciones de Quevedo han sido suficientes para que la organización comience a pensar seriamente en expulsar a Venezuela de su seno. En este momento el país que fuera co-fundador de la organización aparece como un lastre, incapaz de aumentar la producción, incapaz de cumplir con su cuota de producción, con su industria petrolera en manos de ignorantes irresponsables. Me agrega mi contacto que los expertos de la organización se quedaron estupefactos al oír a Quevedo hablar de la pérdida de producción simplemente como un caso de “producción diferida”. El uso de este concepto que hizo Quevedo demuestra su ignorancia, pues producción diferida es aquella que no se ha producido en un momento dado por razones de logística, pero la cual puede producirse al resolverse tales obstáculos ya que el potencial de producción así lo permite. La situación de PDVSA es totalmente diferente. La empresa no puede producir más porque su potencial de producción ha colapsado.  PDVSA no tiene producción diferida sino producción perdida.
Esta es una situación de colapso general que requeriría la inmediata expulsión de Quevedo de PDVSA. Más aún, requeriría de la inmediata expulsión del gobierno porque esa ignorancia e irresponsabilidad que muestra Quevedo es característica de todos los niveles y todos los sectores del régimen. La fuerza que podría sacar a esta pandilla del poder, la Fuerza Armada, se muestra inerte o cómplice. O son tan ignorantes e irresponsables como Quevedo o son parte de la pandilla que saquea al país, Por eso digo, una vez más:
Venezuela debe ir a un estado generalizado de rebelión ciudadana. Tiene que ponerse de pie. El apoyo extranjero solo se materializará plenamente si el país se levanta. Frente a quienes hablan de solución electoral, de negociación y transiciones mixtas, se levantan los numerosos casos de sociedades que se han rebelado para expulsar a los criminales del poder, que se han resteado en defensa de sus principios y de su dignidad. Aquellos llamados líderes quienes llaman a la negociación esconden su cobardía detrás de un aparente llamado a la sensatez. Si estos llamados líderes hubieran vivido en 1810 todavía seríamos una colonia de España. Ellos ya están identificados y deberán apartados porque nunca sacarán al país del foso.
Estamos enviando una comunicación al secretario general de la OPEP denunciando al criminal régimen político que controla la industria petrolera venezolana y pidiendo la expulsión del país de la organización mientras no pueda cumplir con sus deberes de país miembro. 


viernes, 22 de junio de 2018

Los venezolanos deben pasar de las palabras a la acción




Soy miembro desde hace muchos años de un grupo de venezolanos que se reúne unas ocho veces al año para conversar sobre la situación venezolana y sobre el que hacer para mejorarla. El grupo está de acuerdo con la necesidad de que el narco-régimen chavista sea expulsado del poder lo antes posible pero hay diferencias de opinión, en ocasiones vehementes, sobre el cómo hacerlo. En ese sentido, somos un microcosmos del país. A pesar de lo pequeño del grupo allí están representadas las diversas perspectivas que vemos a nivel nacional. Todos los miembros están generalmente bien informados y dominan los diferentes aspectos importantes de la vida venezolana: petróleo, finanzas, industria y política. En los últimos meses, y en esto también somos representativos del clima nacional, se ha hecho palpable en el seno de este grupo un cierto desánimo, la creciente sensación de que la solución a la tragedia venezolana se nos escapa de las manos. Nos sorprendemos en ocasiones discurriendo, como ha sucedido hace poco, sobre si debemos votar o no votar, si gente como Falcón es una alternativa o no lo es, si el sector militar tiene o no tiene representantes dignos e institucionales, si PDVSA puede o no recuperarse, si el liderazgo político es honesto o no lo es.
Parecería que sin darnos cuenta nos estaríamos convirtiendo en parte del sistema, jugando el juego del régimen. Digo esto porque la mera discusión de esas alternativas mencionadas en el seno del grupo, sus intentos de análisis costo/beneficios, sugiere que los aceptamos como factores validos en juego. Aunque al final el grupo esté de acuerdo con negarle el pan y el agua al régimen, la existencia misma de la discusión significa, en mi criterio, que hemos sido subsumidos al menos parcialmente -  en el pantano de la trágica realidad venezolana.  
Si extrapolamos esta situación del grupo a la sociedad venezolana podremos encontrar allí la explicación de la permanencia en el poder del narco-régimen que ha destruido al país. La razón fundamental es simple: hemos dejado de ser actores para tornarnos en espectadores de nuestra propia tragedia. Algo que parecería imposible ha ocurrido: somos testigos en vivo y en directo de nuestra propia destrucción como país. La actitud general entre los venezolanos es una de “sálvese quien pueda”, cada quien atento a su situación personal. Para que la situación venezolana haya llegado a este extremo es necesario que hayamos dejado de actuar por mucho tiempo como ciudadanos, abandonando  nuestros deberes éticos. Nuestra actitud colectiva revela una profunda debilidad como pueblo.
Comienzo a dudar seriamente de la capacidad de nuestro pueblo para revertir esta tendencia y comenzar a pensar y a actuar como miembros de una sociedad y no solamente como sobrevivientes individuales.
 ¿Cómo deberíamos actuar en función de la sociedad venezolana y no solamente como resignados y letárgicos espectadores de nuestra destrucción?  
Comencemos por aceptar que estamos en la necesidad de diferenciarnos clara y tajantemente de los miembros de la pandilla chavista. No es posible “entenderse” con ellos. No es posible aceptar la validez de organismos creados por ellos o controlados por ellos. Si rechazamos la legitimidad del Consejo Nacional Electoral no es posible ser incoherentes e  ir a elecciones reguladas por una letrina manejada por jineteras de la ética.  
Tampoco es posible aceptar como de los nuestros a quienes piensen en que es posible esa coexistencia. Esto significa que gente como Falcón, Timoteo Zambrano, Manuel Rosales, Zapatero y quienes los sigan, de buena o mala fe, deben  ser considerados como colaboradores del narco-régimen y hasta como cómplices del crimen contra Venezuela.  
Es necesario promover en lo posible las sanciones internacionales en contra del narco-régimen. No solamente las individuales sino las de tipo diplomático y económico a nivel de países y organizaciones de países. No podemos resolver esta tragedia sin el apoyo del mundo civilizado.
Es necesario promover activamente la rebelión entre los miembros de la Fuerza Armada. Esta postura es criticada por gente que dice ser de oposición pero desconoce que la misma constitución venezolana obliga a la Fuerza Armada venezolana a rechazar activamente al narco-régimen.
Es necesario ponerse de pie y ser radicales en la defensa de la dignidad, del decoro, de los principios y de los valores. Creo que es necesario pedirle a Ledezma, María Corina, Aristeguieta, Arria, Leopoldo, Ugalde, a la Conferencia Episcopal, a las universidades, a los sindicatos, a Fedecámaras, a los colegios profesionales, a todos los venezolanos dignos, que se levanten en contra del narco-régimen de una vez por todas, acompañando la acción a las palabras. Venezuela debe ir a una huelga general indefinida, a fin de expulsar del poder a los miembros de la pandilla chavista. Una vez que esta pandilla esté fuera del poder sus principales cabecillas deberán ser enjuiciados y, eventualmente, llevados a prisión, a fin de que paguen con cárcel sus inmensos crímenes. No es honorable proponer la posibilidad de una amnistía, de un perdón, para esos criminales. Ello sería una horrorosa  derrota espiritual y moral para el pueblo venezolano. Sería su condena al infierno de nuestra degradación como pueblo.  
Tenemos que ponernos de pie y rechazar decisivamente el sistema caracterizado por la ignorancia, la mediocridad y la corrupción que ha dominado a Venezuela desde 1999. Permitirlo por tantos años habla mal de nosotros como pueblo. Solo la rebelión, la indignación activa puede redimir a Venezuela de estos años de horror.
No hay compromiso posible. La inercia es complicidad.   

martes, 19 de junio de 2018

Payasos de PDVSA se reúnen en San Tomé


Ya mi libro : "Venezuela 1981-2015, Una Memoria Ciudadana""  en el cual se narra la corrupción en PDVSA durante la etapa chavista, 2000-2015, puede leerse gratis en pantalla y, si lo desean, obtenerse en Amazon. Ver link a mi sitio virtual: www.armasdecoronel.com.


Mi buen amigo Sergio Sáez me envía una nota emanada de PDVSA sobre una reunión de los gerentes de la empresa en San Tomé para revisar “los planes de recuperación de la producción petrolera en la Faja del Orinoco. Me dice Sergio: “Es imposible levantar la producción de la faja con tanta habladera de paja”. Sergio tiene razón. Vean lo que dice la noticia de PDVSA:
San Tomé, 16 de junio de 2018.- Enmarcado dentro de las 6 Líneas Estratégicas y el Plan Nacional para la Recuperación de Producción, apalancado por el Gobierno Revolucionario del Presidente Obrero Nicolás Maduro, autoridades del Ministerio del Poder Popular del Petróleo, de la Vicepresidencia de Exploración y Producción de PDVSA y de la Dirección Ejecutiva de Producción Faja Petrolífera del Orinoco, sostuvieron un fructífero encuentro desde el Distrito San Tomé, en el bloque Ayacucho, al sur del estado Anzoátegui”.
 Este párrafo inicial nos da una buena señal de la razón por la cual esta pandilla que está en PDVSA no podrá nunca hacer un buen trabajo. ¿Qué dice este inflado párrafo? Que un grupo de bates quebrados se reunieron a hablar paja en San Tomé, eso es todo lo que dice.
La información agrega: “El objetivo de la mesa de trabajo fue realizar la rendición de cuentas correspondiente al primer semestre 2018 para revisar los planes de recuperación, sostenimiento e incremento de la producción en el mayor reservorio de hidrocarburos del planeta”.
Uno pensaría que, tratándose del mayor reservorio de hidrocarburos del planeta, lo cual  - por cierto  - es inexacto, estarían hablando del aumento en la producción. Pero no, La realidad es que durante el primer semestre de 2018 ha habido una declinación de la producción, no solo en la Faja del Orinoco, sino en todo el país. La producción petrolera venezolana ha llegado este año a los niveles de hace 50 años.
Continúa la noticia: “La reunión contó con la participación de Frank Coello, director del Despacho del Ministerio del Petróleo; los viceministros Ángel González, de Hidrocarburos, y Mauricio Herrera, de Refinación y Petroquímica; Christopher Alaña, director del Despacho para la Determinación de Precios del Crudo de Exportación; Nelson Ferrer, vicepresidente de Exploración y Producción (EyP), acompañado por el director ejecutivo de Producción Faja Petrolífera del Orinoco (FPO), Freddy Viloria y su homólogo Ángel Salabarria, director general (e) de la Oficina Regional FPO”.
Se fijará el lector que en esta reunión no había ni un solo obrero, todos eran gerentes. Esto demuestra que la transferencia de poder a los obreros de PDVSA pregonada por Nicolás Maduro es una gran mentira, diseñada para engañar al grueso de la masa laboral venezolana. Estos mediocres gerentes allí reunidos no son mejores que los obreros a quienes tienen engañados. PDVSA es una merienda de incapaces, desde el presidente hasta el portero.  
Fíjense en esto: “El director del Ministerio de Petróleo, Frank Coello, dio inicio a la asamblea saludando a las autoridades presentes informando a la vez, que estas iniciativas continuarán desarrollándose con mayor frecuencia, en las diversas áreas de la FPO, atendiendo a la instrucción dada por el máximo titular de la cartera petrolera, Manuel Quevedo para subir la producción nacional”.
Según este espécimen el ministro presidente Quevedo “ha dado instrucciones” para subir la producción. Ya Quevedo tiene meses “dando instrucciones” pero la producción sigue cayendo. Porque el problema de PDVSA no es de instrucciones por aquí o por allá sino de capital, de técnica y de buena gerencia, excepto que ninguno de estos factores existen.
Hay algo bien ridículo en lo que dice Nelson Ferrer, uno de los “gerentes”: "tiene que ser una recuperación sincronizada con el incremento de la confiabilidad en todas nuestras instalaciones, particularmente los Mejoradores que permita un procesamiento óptimo del crudo que estamos produciendo”. Ferrer habla de lo indispensables que son los Mejoradores para la recuperación de la producción  pero, simultáneamente, PDVSA ha anunciado el paro de dos de ellos.
La información termina diciendo: “la Dirección Ejecutiva Faja Petrolífera del Orinoco Hugo Chávez, sus Divisiones: Ayacucho, Boyacá, Carabobo y Junín en conjunto con la Oficina Regional FPO continúan diseñando estrategias para elevar en más de 1 millón de barriles la producción de crudos, a escala nacional, rumbo a la consolidación de Venezuela como Potencia Energética Socialista del siglo XXI”.
Es inconcebible que esta gente todavía hable de Venezuela como potencia energética del siglo XXI, cuando la empresa está colapsada, financieramente en ruinas, mientras los acreedores la demandan en varios países y la amenazan con confiscar sus bienes.
Todos estos miserables payasos, desde Quevedo para abajo, deben ir a la cárcel por incompetentes y corruptos. Merecen la pena máxima.   

sábado, 16 de junio de 2018

Jorge Giordani: una mediocridad que se resiste a callar

Ya mi libro : "Venezuela 1981-2015, Una Memoria Ciudadana""  en el cual se narra la corrupción en PDVSA durante la etapa chavista, 2000-2015, puede obtenerse en Amazon. Ver link a mi sitio virtual: www.armasdecoronel.com.


Jorge Giordani, ex-ministro de planificación y de finanzas del difunto sátrapa Hugo Chávez Frías forma, junto con Rafael Ramírez Carreño, Nelson Merentes y el mismo Hugo Chávez Frías el cuarteto fatídico responsable por  el proceso que ha llevado a Venezuela a la ruina. Su labor en las tareas de planificación del desastre, su insensata actuación como administrador de la riqueza petrolera venezolana durante el régimen de Chávez, lo hacen uno de los máximos culpables del desastre venezolano.
Yo no puedo decir que Giordani es un ladrón, como si es el caso de muchos de sus colegas del régimen de Hugo Chávez Frías. Pero si puedo decir que Giordani es un corrupto. ¿Por qué lo digo? Porque la corrupción no está limitada a robar el dinero de la nación, no está limitada a traficar con influencias para mantenerse en el poder. Corrupción es también pertenecer por un largo tiempo al servicio de un régimen donde haya gente robando y abusando de su poder ilegítimo, donde haya gente diciendo que trabaja para el pueblo cuando solo trabaja para su propio beneficio. Corrupción es ser cómplice. Y esto fue lo que hizo Giordani, no por días o semanas o meses, sino por años, mientras fue una de las eminencias grises del funesto régimen de Hugo Chávez Frías, mientras validaba con su silencio los desastres que el sátrapa cometía en contra de su pueblo. Tarde vino a piar Giordani, cuando escribió una carta en la cual admitía que el régimen de Chávez había malversado miles de millones de dólares. Mucha de esa malversación ocurrió cuando Giordani era ministro de la mayor confianza de Chávez y uno de los tres o cuatro personajes más importantes del régimen. Corrupción es también utilizar el dinero de la nación en proyectos ilusos y costosos que nunca arrancaron, tal y como sucedió con el Proyecto del Eje Orinoco-Apure. Corrupción es pertenecer a un gobierno que prostituyó a las empresas del estado, comenzando por PDVSA y la CVG y que desvió los ingresos derivados del petróleo hacia fondos financieros paralelos, manejados sin transparencia y en los cuales desaparecieron miles de millones de dólares. Giordani era uno de los administradores de esos fondos.
Giordani es un corrupto pero sigue hablando. Y lo que dice es insensato y demuestra que no está arrepentido de sus crímenes ni ha aprendido nada de los horrores de los últimos 19 años. Dice lo siguiente en su artículo de APORREA: “Encrucijada ante la historia, todo ello nos concierne”,  Viernes, 15/06/2018, ver: https://www.aporrea.org/actualidad/a264926.html :
“Los primeros años del proceso bolivariano con el triunfo electoral del Comandante Chávez en diciembre de 1998, y el inaudito esfuerzo de voluntad que terminó en una inmolación personal, a través de una política social de inclusión basada en la distribución de la renta petrolera… “
Se empeña Giordani en definir la satrapía de Hugo Chávez Frías como ejecutora de “una política social de inclusión basada en la distribución de la renta petrolera” cuando apenas fue una política de limosnas al pueblo, exigiéndole a cambio lealtad política para su régimen anti-democrático. Esa trágica política de limosnas fue humillante y embrutecedora para el pueblo y eventualmente condujo a niveles de pobreza mayores que los encontrados por el sátrapa.
Agrega Giordani:
“Esa lucha entre fuerzas, por un lado, las que pretenden mantener los privilegios de la Cuarta República iniciada en 1958 luego del derrocamiento del régimen de Pérez Jiménez e instalación del Pacto de Punto Fijo, y por el otro, la irrupción de un movimiento bolivariano impulsado por sectores nacionalistas de la Fuerza Armada venezolana, con el apoyo del pueblo y de fuerzas progresistas, no ha podido consolidar hasta los momentos un nuevo Bloque Hegemónico”…
Según este personaje el régimen de Chávez-Maduro ha tenido el apoyo del pueblo, de la Fuerza Armada y de sectores progresistas. Cualquier venezolano sabe que el pueblo está pasando hambre y muere sin atención médica cuando no a manos del hamponato promovido por el chavismo y que la Fuerza Armada, especialmente su llamado Alto Mando Militar representa hoy el mayor cáncer que aflige a la nación, nido de narcotraficantes, contrabandistas, especuladores y contratistas rapaces. Seguirlos ensalzando como lo hace Giordani demuestra su naturaleza ruin e indigna.  
No contento con el desastre que ha causado, ahora Giordani propone lo siguiente:
“Lo que se requiere es la definición de una estrategia ofensiva que oriente la construcción de un nuevo bloque histórico popular y revolucionario…. mantener lo que han sido los avances alcanzados por el proceso bolivariano. Debemos actuar antes de que sea demasiado tarde”.
Es decir, se requiere la aparición de otro sátrapa a lo Chávez. Maduro es un excremento, con lo cual estamos de acuerdo con Giordani, por lo que – según Giordani -  se necesitaría un líder carismático a lo Chávez quien repita los primeros doce de chavismo. Giordani no se arrepiente, no rectifica, su mediocridad no da para más que no sea pedir una repetición del sainete chavista que terminó con la muerte del sátrapa, a manos del castrismo, en una cama en La Habana. Y no solo lo pide Giordani para la pobre Venezuela sino para toda la región, o para todo el planeta,  al decir:
Y cómo estamos hablando de una Patria Grande, la que soñaron los Libertadores, no es solamente Venezuela la involucrada en esta construcción de futuro, ni en el ámbito de la América toda, ni tampoco en el de las luchas universales por esa utopía realizable posible”.
Este loquito vive en un mundo irreal, de su exclusiva creación. No habría que hacerle mucho caso si no fuera porque todavía existe un grupo remanente de viudos del chavismo que sueña con la aparición de un clon del sátrapa, el cual venga a rematar la tarea que no pudo completar el fallecido paracaidista.
Y lo que es más indignante es que Giordani pretende hablar verdad. Dice, con gran cinismo:
“Quién hoy pretenda combatir la mentira y la ignorancia y escribir la verdad, debe superar, cuando menos, cinco dificultades. Debe tener el valor de escribir la verdad, aunque en todas partes la sofoquen; la sagacidad de reconocerla, aunque en todas partes la desfiguren; el arte de hacerla manejable como arma; el juicio de escoger aquellos en cuyas manos resultará más eficaz; la maña de propagarla ante éstos”.
El mediocre Giordani pretende ser un perseguido, un héroe de la resistencia en contra del mismo régimen que el promovió. De criminal activo ha pasado a ser una voz plañidera que sueña con una repetición del cataclismo nacional que fue la etapa de Hugo Chávez Frías.
Giordani no debe ir a la cárcel, debe ir a un manicomio.

jueves, 14 de junio de 2018

Rafael Ramírez Carreño: un experto en corrupción habla sobre corrupción



Ya mi libro en el cual se narra la corrupción en PDVSA durante la etapa chavista, 2000-2015, puede obtenerse en Amazon. Ver link a mi sitio virtual: www.armasdecoronel.com.
  
Rafael Ramírez acaba de decir lo siguiente en su más reciente escrito:
 “Otro tema a discutir seriamente es el de la corrupción… hay connotados personajes que, es público y notorio, se han involucrado en corrupción, por las fortunas y bienes que detentan en el exterior, que las exhiben, que nadie se atreve a mencionar o bien porque son los "panas", amigos del grupo de alguien que se mantiene en el poder, o porque hacen lo que el madurismo quiere que haga”. No es un fenómeno único de una institución, el que crea eso, es un pendejo. La corrupción está en PDVSA, en la Fiscalía, en el Poder Judicial, en los cuerpos policiales, en el sistema penitenciario, en la Tesorería de la Nación, en Miraflores, en el círculo íntimo del madurismo, en Cencoex, en Cadivi, en los Puertos, en el ámbito militar, en la Banca, en el Petro, en el Arco Minero, en el SENIAT, en las Empresas Básicas, en el BCV, Ministerios de Infraestructura, Transporte y Comunicaciones, Alimentación, Cancillería, en los Sindicatos, Gobernaciones, Alcaldías, en los partidos de la oposición, en las empresas importadoras, en los privados, en las contratistas, constructores y un largo etc.”.
Nunca antes había existido tanto cinismo como el que anima a los chavistas. Es algo que han aprendido de los cubanos castristas, maestros en la mentira y en la desfachatez. Se han acostumbrado a negar sus abusos aún en presencia de la evidencia. Son como el marido sorprendido con la amante, quien niega la realidad o como el ladrón de una vaca a la cual lleva ensogada pero pregunta con desparpajo: “Cual vaca?”
Este caso de Rafael Ramírez Carreño es uno de los más emblemáticos en materia de corrupción chavista. No es como Pedro Carreño, Merentes,Vivas o los hermanos Rodríguez, quienes son corruptos pero no andan por allí fingiendo ser honestos. Ellos son corruptos y a mucha honra. El de Ramírez es un caso similar al de Diosdado Cabello, quien no solo es corrupto sino que pretende ser agresivamente honesto.
Ramírez Carreño pide debatir abiertamente sobre corrupción pero tiene años que guarda  silencio sobre su propia corrupción. Habla de “connotados personajes involucrados en corrupción” pero no nombra a ninguno y, por supuesto, no se nombra a sí mismo, aunque la prensa nacional e internacional está repleta de información sobre su corrupción y ello lo ha llevado a ser un prófugo de la justicia internacional. Donde se esconde?
Ramírez Carreño dice que la corrupción en este gobierno es sistémica y permea todos los estratos de la administración pública pero no dice que su actuación en PDVSA, en el ministerio de Petróleo y en la vida política de la Venezuela chavista por más de doce años fue factor importantísimo en la existencia y diseminación de esa corrupción. Cree posible que -  al fingir tomar la bandera de la anti-corrupción y fingir indignación – la gente pueda tomarlo como un paladín de la honestidad y no como lo que es: un paladín de la deshonestidad.
Y es que la evidencia abunda, desde su discurso ante la gerencia de PDVSA, en el cual puso a la empresa a la orden de Hugo Chávez y hablaba de una empresa “goja, gojita” hasta los casos ya conocidos en España, Venezuela, Andorra y USA, de lavado de dólares por parte de su entorno familiar y de sus lugartenientes. 
En un desesperado acto de mimetismo, como el camaleón, Ramírez Carreño trata de cambiar su fisonomía pero no lo logrará. Ayudado por sus “ahorros” ha comprado varios mercenarios quienes escriben a su favor en APORREA y hasta piden que regrese al mando de PDVSA. En una Venezuela podrida hasta el tuétano en el aspecto moral esta maniobra es vista con indiferencia. En un país donde el presidente es un payaso iletrado, entreguista y abusador, quien sea solamente corrupto suena hasta aceptable. Pero los venezolanos dignos deben permanecer alertas para no caer en manos de la deshonestidad disfrazada.
Es necesario fumigar a fondo esta pandilla de bandidos chavistas, a fin de lograr la recuperación espiritual y material de Venezuela.

martes, 12 de junio de 2018

ENTREVISTA CON MOISÉS NAÍM SOBRE MI NUEVO LIBRO




APRECIADOS AMIGOS:
Hace unos días Moisés Naím tuvo la gentileza de hacerme una entrevista de unos diez minutos, con ocasión de la publicación de mi libro: “Venezuela 1981-2015, Memorias Ciudadanas”. La entrevista puede ser vista por el link: https://we.tl/Bv3m0atZUW.
Al mismo tiempo deseo hacerles llegar mi nuevo sitio virtual (website)  www.armasdecoronel.com,  favor no confundirlo con www.lasarmasdecoronel.blogspot.com, el cual lleva a este blog.
Este website fue estructurado gracias a la colaboración de Moisés Naím y de Roger Santodomingo, a quienes agradezco mucho su apoyo. Contiene, en primer lugar, la versión electrónica de mi nuevo libro y también la versión electrónica de mi libro anterior,  “El Petróleo viene de La Luna”. Ambas versiones pueden descargarse sin costo alguno para quien deseé leerlos en pantalla.
 Al mismo tiempo mi nuevo libro puede ser adquirido de AMAZON por $2.99 para Kindle y por $12.99 en forma impresa. El nuevo libro tiene un prólogo escrito por Moisés Naím. El prólogo de mi libro anterior es de mi entrañable amigo Antonio Pasquali, pero no lo tuve a mano para incluirlo en la versión electrónica.
El website contiene referencias a mis libros anteriores y una descripción del nuevo libro que puede servir como guía a quienes piensen en adquirirlo (o leerlo).
Los dos libros que pueden descargarse de mi website son volúmenes complementarios sobre mi trayectoria, desde mi infancia en Los Teques en adelante, incluyendo mis experiencias profesionales, y mis perspectivas sobre la Venezuela y los demás sitios en los cuales me ha tocado vivir. El primero está escrito en forma de novela y el segundo como Memoria. “El Petróleo viene de La Luna” es testimonio de una época venezolana y de su industria petrolera de los años 1951-1981. El segundo, “Memorias Ciudadanas” narra mis experiencias durante los años que van desde 1981 hasta 2015.
¿Por qué los escribí? Porque creo que toda vida debe ser registrada de alguna manera y que todos podemos aprender de las experiencias ajenas.  
Espero que este trabajo les interese y eventualmente me hagan saber sus reacciones, buenas o malas. Como casi siempre es el caso las opiniones estarán divididas.  Pero ojalá que no sean como las que dieron los aficionados después de una corrida de toros particularmente infortunada de “Cagancho”. Esa tarde se dividieron las opiniones: unos culpaban al papá y otros a la mamá del torero.

lunes, 11 de junio de 2018

La tragedia venezolana reclama hablar claro: fuera los falsos líderes


Uno de los factores contributivos más importantes para la permanencia de la pandilla chavista en el poder ha sido la actitud de muchos venezolanos influyentes, quienes de buena o mala fe, de todo hay, han insistido en “arreglarse por las buenas” con esos facinerosos. Quienes lo hacen de mala fe simplemente tienen como objetivo participar a título personal de los beneficios que distribuye el narco-régimen chavista entre sus amigos y adulantes. Quienes lo hacen de buena fe están motivados por esa tendencia venezolana, de raíz noble, a pensar que todos somos familia y que debemos sentarnos alrededor de una mesa a dirimir nuestras “diferencias”.
Esta nota está más dirigida hacia a los de buena fe que a los oportunistas. Quienes actúan de mala fe no van a ser persuadidos a actuar de otra forma. Ellos son cómplices del gran crimen y no tienen vergüenza en aceptarlo. En este grupo de cómplices figuran los militares de alto nivel que trafican con drogas y que mantienen al narco-régimen en el poder para lograr una parte del botín. Figuran también la legión de adulantes venezolanos y extranjeros que dicen basar su apoyo en consideraciones “ideológicas’, pero que – en realidad – solo buscan su beneficio personal, los Zapateros y los Manuel Rosales o los Henri Falcón.   
Quienes actúan de buena fe, a lo Capriles o a lo Eduardo Fernández,  simplemente se niegan  a ver la horrorosa realidad venezolana y persisten en buscar una transacción, un acomodo con el narco-régimen, a fin de que podamos atenuar la miseria de los venezolanos. Este grupo se niega a considerar cualquiera otra forma de protesta cívica que no sea la “pacífica, constitucional y electoral” y ello lo ha llevado a validar con su presencia los grandes fraudes electorales cometidos en Venezuela o a aceptar pasivamente los resultados que todos los venezolanos saben que son fraudulentos.  Se niegan a aceptar que la protesta cívica en las calles, a través de huelgas sectoriales o generales, la desobediencia ciudadana, todo ello es constitucional y pacífico aunque no sea electoral. Este grupo ve las sanciones de países extranjeros al narco-régimen como “indeseables” porque “perjudican a la población”, sin darse cuenta de que la población tiene 18 años muriendo, perseguida, humillada y sometida al hambre y a la enfermedad, una tragedia ayudada por la actitud pasiva de algunos de sus líderes.
Hay que hablar claro. El liderazgo que va a sacar a Venezuela del foso no es ese liderazgo que busca  el acomodo con los criminales chavistas, que considera que lo estratégicamente deseable es negociar una salida con los miembros de la pandilla que ostenta el poder. Ese liderazgo no es el requerido. El liderazgo que se necesita es el moral, basado en los principios y valores.  James McGregor Burns definió estos dos tipos de liderazgo como Transaccional y Transformacional ( o transformativo). El liderazgo transaccional está basado en la oferta de promesas por parte del líder a fin de obtener lealtades, un “yo te doy, tú me das”. Hay un intercambio. Por ello, estos líderes siempre estarán dispuestos a transarse con el enemigo porque de una transacción siempre se derivan beneficios, dependiendo de cuál astuto sea el negociador. En el liderazgo transformacional no hay consideraciones de intercambio sino manifestaciones de principios y valores. Es el “solo puede ofrecerles sangre, sudor y lágrimas” de Churchill y no el  “hemos comprado la paz de Europa” de Chamberlain.
La diferencia entre los dos tipos de liderazgo, el que se transa y el que transforma, es esencialmente una diferencia moral. La transacción considera los beneficios a corto plazo, la transformación ve más allá del corto plazo. Transarse puede llevarnos a ganar la batalla pero a perder la guerra. Quien se transa está a la misma altura ética de sus seguidores. Quien transforma debe colocarse en un plano superior, por ello es que lidera verdaderamente.
El líder transformacional no diluye sus principios y valores a fin de obtener una victoria momentánea o  porque la transacción  represente la línea de menor resistencia. No rehúye el conflicto necesario. El líder transformacional no tiene necesidad de desdoblarse en su vida privada y en su vida pública pues actúa en base a sus principios en ambas dimensiones. No es el hombre de familia público y el libertino privado. No es el Trujillo, el Somoza  o el Chávez, quienes fingían ser en público lo que no eran en privado. Es el Vargas, el Betancourt o el Sucre, no el Guzmán Blanco o el Cipriano Castro. En la Venezuela contemporánea es el momento de María Corina Machado, de Luis Ugalde, de Antonio Ledezma, Enrique Aristeguieta, Diego Arria y Leopoldo López, no puede ser el momento de Cabello, Padrino López, Timoteo o Claudio Fermín.
En la Venezuela de hoy no necesitamos líderes transaccionales sino líderes transformacionales porque la redención de Venezuela no será un asunto de corto plazo o de conveniencias instantáneas sino una lucha larga por la recuperación de la dignidad, por el establecimiento de una masa crítica de ciudadanos y  la creación de una verdadera Nación. Para ello será necesario terminar con la dictadura del Estado, el cual ha asfixiado a la Nación por ya demasiado tiempo.  El estado en Venezuela ha sido realmente el gobierno y el gobierno, tristemente, es generalmente un hombre y su camarilla. Habrá que romper con esta estructura mezquina existentes, de enanos morales y ello demanda líderes transformacionales, no de la montonera de gente pequeña en plan de falsos líderes.