“Simplificando un poco podemos
decir que hay dos chavismos. Uno atrapado y dominado
por la lógica de los delincuentes poderosos: cualquier medio es
válido si refuerza su dominio. Por eso el régimen se convirtió en tiranía, unas
veces con halago y dádivas generosas, y otras con miedo e imposición de las
armas, con abuso de leyes y de propaganda falsificadora que transforma en bueno
lo que sirve al poder y en delito cuanto se opone. El poder es la verdad y debe
perpetuarse. Además, en este chavismo se dan la mano la corrupción y la
incapacidad, que juntas han llevado al país a la miseria en los años de
ingresos petroleros más fabulosos, empeñados en imponer un modelo económico y
político fracasado en otros países. Aquí el derrumbe ha sido más rápido, pues
la insensata prédica presidencial de que nuestro problema no es la producción
(por la inmensa riqueza petrolera) sino la distribución; por lo que “buen
gobierno” es el que reparte y distribuye la riqueza existente, sin tener que
esforzarse en producirla. Por eso su rapiña e ineficacia supera lo visto en
otras sociedades de poder comunista.
El otro chavismo expresó la esperanza y dignidad de la gente con un
humanismo mesiánico que ponía en primer lugar la vida y felicidad de millones
de venezolanos frente al empobrecimiento y corrupción crecientes desde la
década de los ochenta, no corregidos por los partidos hegemónicos y la economía
reinante. Nunca voté por Chávez, pero es claro que millones de venezolanos
vivieron esta esperanza cuasi-religiosa de paraíso prometido y todavía bajo la
ceniza de su frustración están las brasas, prontas a encenderse al primer nuevo
viento favorable. Este segundo chavismo se siente cada vez más traicionado e
indignado al contrastar su creciente miseria con las cuentas bancarias de
muchos de sus dirigentes que disfrutan del poder y de las riquezas robadas.
Debemos
distinguir entre la legítima demanda humana a la que el chavismo dio alas y la
oferta política chavista que además de desacertada es delictiva. La actual
catástrofe de colas, hambre, inseguridad, miedo… dejan en evidencia el fraude
del “poder popular”, pero no le quitan verdad, ni legitimidad a esas
necesidades y aspiraciones de millones de venezolanos, sobre todo la de los
pobres. La necesidad-demanda sigue ahí y no se podrá construir una Venezuela
nueva, productiva y justa, excluyendo e ignorando a los necesitados. Esas
aspiraciones insatisfechas no siempre fueron chavistas. Por ejemplo AD en sus
albores fue el “partido del pueblo” y la partera de la democracia para las
mayorías relegadas secularmente a ser peones y carne de montoneras
caudillistas.
La nueva democracia debe contar con ese “chavismo” y
convertirlo en dignidad productiva, política, económica y socialmente”.
Creo que es preciso examinar con cuidado estas
bellas palabras del Padre Ugalde, no solo por el prestigio e influencia que él
tiene sobre la opinión pública sino porque intuyo que hay algo en ellas que no responde
exactamente a la realidad. Su descripción del chavismo malo es perfecta. Lo que
ha representado para la nación ha sido ruina, corrupción y muerte. Es sobre su
descripción del chavismo bueno que tengo dudas. Dice: “El otro
chavismo expresó la
esperanza y dignidad de la gente con un humanismo mesiánico que ponía en primer
lugar la vida y felicidad de millones de venezolanos frente al empobrecimiento
y corrupción crecientes desde la década de los ochenta, no corregidos por los
partidos hegemónicos y la economía reinante…”.
Por más que esfuerzo mi memoria no
logro recordar en Chávez ese “humanismo
mesiánico que ponía en primer lugar la vida y felicidad de millones de
venezolanos”. Desde el primer momento Chávez se mostró como un populista lleno
de promesas fáciles que, según vimos pronto, no tenía la menor intención de
cumplir. Ese chavismo que el Padre Ugalde dice haber expresado la esperanza y la digna de la gente solo alimentó con
promesas lo que ya existía antes de su llegada, ese anhelo de millones de salir
de la pobreza. Definir ese populismo, esa demagogia, como humanismo mesiánico,
es en mi criterio demasiado generoso por parte del Padre Ugalde. Si se quiere,
lo que hizo Chávez fue exacerbar esos anhelos a sabiendas de que no podía
responder a ellos de manera efectiva. De allí que se embarcó en una política de
dádivas y subsidios que, en efecto, acentuó la pobreza, no la solucionó.
Según Ugalde esa concepción del chavismo originario habría descubierto el
deseo de las masas de salir de la pobreza. No creo que eso haya sucedido. Ese
deseo de las masas venezolanas había sido una constante por décadas, desde el advenimiento
de la democracia en 1958 y, debemos decir, que fue atendido con algún éxito
durante presidencias como las de Betancourt, Leoni y Caldera I, no así por
otras.
El Padre Ugalde añade que el
chavismo “dio alas a la legítima demanda
humana” aunque se apresuró a añadir que “la oferta política de Chávez fue desacertada y delictiva”. La
primera parte de la frase parecería elogioso de un chavismo bueno pero la segunda
parte de la frase es condenatoria. El problema es que estos dos componentes de
la frase no tienen separación en el tiempo, no pueden referirse a un chavismo
bueno que vino primero y, luego, a un chavismo malo que llegó después. Fue el
mismo chavismo el que aprovechó las expectativas de la gente, le dio alas a
esas expectativas y en el mismo discurso le prometió solución, a punta de dinero,
al mismo tiempo que exigía como contraprestación lealtad política.
Parecería ocioso y demasiado sutil
hablar de esto, ya que la buena
intención del escrito del Padre Ugalde
es evidente. Su mensaje esencial es que hay mucha gente que fue engañada por el
chavismo y que esa gente es ahora incorporable a la nueva democracia que surgirá
al final de esta pesadilla. ¿Cuánto de esta gente puede aun ser definida como “chavismo”, la identidad que le da el Padre Ugalde?
Hemos creído necesario este
comentario porque existe en este momento una corriente importante que está
tratando de diferenciar al chavismo de Maduro del chavismo de Chávez,
pretendiendo que Maduro es un monstruo que distorsionó el “legado” de Chávez. En
esa corriente se incluyen grupos políticos como Marea Socialista, ex-ministros
de Chávez a lo Giordani y hasta algunos líderes de la oposición que atacan a Maduro,
contrastando su torpeza y estupidez con el mesianismo y simpatía de Chávez.
Hace poco leí declaraciones de uno de ellos que decían que, mientras Maduro miente Chávez “jamás mentía”,
aseveración que me llenó de asombro. Creo que, aún más importante que el daño
material que se le ha hecho a la Nación, es el daño espiritual que el chavismo
ha causado. Por ello, creo que Chávez debe ser denunciado abiertamente, sin que
quede dudas sobre cuáles fueron sus propósitos.
Contribuir a convertirlo en un Evita
Perón venezolano, aún de manera inadvertida, no ayudaría al país a superar esta
horrible etapa de nuestra historia.
8 comentarios:
Lo he dicho varias veces acá. Una de las consecuencias -y no la menor- de esta pesadilla interminable es que el país "compró" un peronismo tropical. Chávez es Perón y Evita en la misma persona. El hecho de que haya muerto antes de que se derrumbara su "modelo" y no tuviera que cargar con las consecuencias, no hace sino alimentar esa patraña del chavismo "bueno" y el chavismo "malo". Ahora, quien quiera justificar el renacimiento de esta cochinada, siempre dirá que Chávez era distinto, lo cual es una grandísima falacia pues él es el padre de este desierto que nos dejan como país. No hay tal chavismo "bueno".
¿Ugalde? Jesuita dejará de ser...
"este chavismo se dan la mano la corrupción y la incapacidad, que juntas han llevado al país a la miseria en los años de ingresos petroleros más fabulosos"
Es mucho mas corrupcion que 'incapacidad', o ineptitud. Robo, a todo nivel.
Manejar a un pais no es ciencia infusa. Creas las condiciones para que los empresarios puedan trabajar, mientras garantizas un buen nivel de seguridad. Con esas libertades, el pais y sy gente pregresan naturalmente y por si solos. Viene el turismo, inversion extranjera, prestamos, y la gente se pone las pilas.
El 'gobierno' no es que sea 'incapaz'. Es que son ladrones. Venezuela nunca ha tenido un gobierno muy 'capaz'. Nadie ha sabido producir otra cosa que no sea petroleo, diversficar las industrias, apoyar a nuevas empresas, seguridad.. el resto funciona sin gobierno. De hecho, el 'gobierno' lo unico que tiene que haver es robar menos, y desaparecer, dejando a una policia fuerte, que mantenga el orden, y a un sistema judicial que meta presos a los ladrones.
No es incapacidad.. Son muy capaces para robar.
Y concuerdo completamente con Mr. Coronel, que 'el otro Chavismo' fueron puras mentiras. Chavez era maligno, y tremendo mojonero. Ofrecio prosperidad, el fin de la corrupcion, educacion, y hasta capitalismo, y empresas privadas.
Estuvo en el poder absoluto como 14 años, muchos mas que el imbecil de Maduro, y fue entonces que destruyo a Venezuela. Chavez era tremenda rata, mentiroso, falso y ladron. Pero mucha gente todavia lo quiere y lo venera. Por sus regalitos, supongo.. Pero eso se llama Ignorancia. Ese bicho denominado Chavez fue el que creo todo el desastre, el hambre, el crimen, la fuga de gente, la decadencia economica.
Los que piensan que Chavez era un santo, y Maduro es el unico culpable, no saben ni en que planeta viven.
Chavismo es Chavismo, una pesadilla, no hay forma de que esta desgracia se justifique o suavice, si no se reconoce el error no hay forma de corregirlo. Chavistas a Trabajar honestamente y a estudiar.
Para mi siempre fue un desalmado, farsante, etc., etc.......... No tiene perdón de Dios! Me da lastima que tanta gente se engañara.
Lo peor del caso es que tuvo en sus manos todo para haber hecho una gran Venezuela, popularidad, dinero.......
(No se poner los acentos en esta laptop)
El comunismo es una plaga roja que mata y destruye. Su poder y influencia vienen de ODIO. Sus victimas son los que creen en mentiras y promesas vacias.
¡Claro que hay dos chavismos! Y esto lo afirmo porque, cuando se empezó hablar de la acuciante corrupción de la familia Chávez Frías, el presidente Hugo Chávez, para salir del atolladero,y lavarse las manos como Pilatos, dijo: "Una cosa es la familia de Chávez y otra la familia del Presidente", justificándose que él no tenía, como primer magistrado, nada que ver con esa familia (casi nada: a nivel biológico, y cultural por el apellido), pero como ya había referido: su padre (político, por supuesto; es decir, no putativo)era el dinosaurio de Fidel. Luego, mi reflexión para el momento, que incluso hasta era afín al movimiento revolucionario, por lo que marcó en mi persona un antes y un después igualmente, en torno a la llamada "revolución bolivariana", fue el siguiente: Entonces, quiere decir que hay dos Chávez: Uno con Dios y el otro con el Diablo. Por lo que dejé de seguir al chavismo y su pretendida "revolución". Gracias por compartir.
https://www.youtube.com/watch?v=CHQk9Ht3owA
La partida e idiotas rojos. Pura chusma.
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