LA REFORMA CONSTITUCIONAL: HIRVIENDO LA RANA.
Desde Washington.
Como hierve usted a una rana? La coloca en una paila de agua tibia y le va aumentando la temperatura al agua lentamente. Si la eleva abruptamente la rana salta. Si lo hace con cuidado hierve la rana. Esto explica porque muchos golpes militares, violentos y súbitos, terminan en fracaso. En febrero de 1992 Hugo Chávez trató de hacerlo así y fracasó debido a su cobardía e ineptitud. Cuando ganó las elecciones se sintió contento y frustrado simultáneamente ya que se vería obligado a gobernar dentro del sistema democrático. Sus esfuerzos desde entonces han estado dirigidos a convertir la democracia venezolana en una dictadura. Para lograrlo el tipo ha estado “calentando el agua” con cuidado.
Si su propuesta de reforma constitucional tiene éxito habrá logrado algo que parecía imposible: convertir a Venezuela en una dictadura militar-socialista manteniendo pretensiones de legalidad democrática.
La reforma involucra 30 artículos de los 350 que posee nuestra verborréica constitución pero es significativa. Contiene elementos que convertirían a Chávez en un nuevo dictadorzuelo tropical, a la usanza de Trujillo, Somoza y del que se muere pero no se muere.
1. Acorta la jornada laboral a seis horas, es decir, pone el agua sabrosita para la rana;
2. Se recentraliza el gobierno, desmontando 20 años de descentralización democrática;
3. El período presidencial se alarga a siete años y se establece la re-elección indefinida, lo cual es el objeto fundamental de la propuesta;
4. El presidente podrá nombrar todos los vicepresidentes que se le antoje;
5. El presidente manejará las reservas financieras internacionales y el Banco Central no será autónomo (de hecho, ya no lo es);
6. El presidente podrá disolver la Asamblea Nacional y convocar una Constituyente cuando le plazca;
7. Las fuerzas armadas incluirán una milicia popular y la guardia nacional se irá a lavarse ese paltó;
8. El presidente podrá crear nuevas ciudades, nuevas provincias y nuevos territorios federales;
9. El estado será política y economicamente socialista. La propiedad privada se aceptará con limitaciones.
Esta reforma será objeto de un referendum manejado por los amanuenses del presidente, el cuál tendrá un resultado favorable, porque así lo dictaminarían los poderes establecidos. La participación de la disidencia en ese evento solo serviría para darle un barniz de legalidad. Hasta en el Congreso de los Estados Unidos, el representante Bill delaHunt, amigote de Chávez, se pararía a decir que el proceso no pudo ser más democrático.
Los venezolanos estamos, de nuevo, en una encrucijada. Lo que se nos está proponiendo con el mayor descaro es que validemos la muerte de la democracia en el país, que votemos por el suicidio. Lamentablemente hay millones quienes ni siquiera saben lo que entraña la reforma y siguen aceptando sumisos la limosna chavista. Pero hay millones de venezolanos que si estamos plenamente conscientes de lo que está en juego. Si no actuamos con decisión los delincuentes se quedarán con el país.
Aquí ya no hay negociación posible, ni diálogo, ni pedirle al dictadorzuelo una transparencia electoral que no va a permitir. Aquí lo único que cabe es decirle no al golpe de estado, decirle no a la pretensión dictatorial de este sujeto. Esa negativa rotunda tendrá que llevarse hasta las últimas consecuencias: la huelga general indefinida, el rechazo abierto al dictadorzuelo, con el país en la calle.
En Abril 2002 Chávez fue sacado de Miraflores por la protesta popular, aunque la torpeza de un grupito insensato y la acción de Baduel contribuyeran a restituirlo en el poder. En este momento Chávez está más débil que nunca: PDVSA en crisis técnica y moral, Chávez aislado de las naciones civilizadas del planeta, con parte de sus seguidores protestando sus pretensiones dictatoriales y abusos de poder, gastando más dinero del que obtiene, enfrentado a la Iglesia Católica y a los estudiantes y objeto del ridículo internacional por su patanería.
Ayer leí unas declaraciones del nuevo ministro de la defensa que claramente constituyen un golpe de estado: dijo que para el ejército la reforma no era una propuesta sino “una orden”. También leí un escrito del adulante Eleazar Diaz Rangel, en el cuál pide un “amplio debate”sobre la reforma. Este escrito de Diaz Rangel es una repugnante maniobra para distraer al país. Díaz Rangel propone que, frente a las pretensiones del sátiro con SIDA de violar la Democracia, debatamos si esta violación deba llevarse a cabo en un hotel, en un motel o a campo traviesa.
Rechazemos al ministro gorila y a los adulantes. Si aceptamos calladamente esta insolente propuesta el dictadorzuelo se queda con el país.
Desde Washington.
Como hierve usted a una rana? La coloca en una paila de agua tibia y le va aumentando la temperatura al agua lentamente. Si la eleva abruptamente la rana salta. Si lo hace con cuidado hierve la rana. Esto explica porque muchos golpes militares, violentos y súbitos, terminan en fracaso. En febrero de 1992 Hugo Chávez trató de hacerlo así y fracasó debido a su cobardía e ineptitud. Cuando ganó las elecciones se sintió contento y frustrado simultáneamente ya que se vería obligado a gobernar dentro del sistema democrático. Sus esfuerzos desde entonces han estado dirigidos a convertir la democracia venezolana en una dictadura. Para lograrlo el tipo ha estado “calentando el agua” con cuidado.
Si su propuesta de reforma constitucional tiene éxito habrá logrado algo que parecía imposible: convertir a Venezuela en una dictadura militar-socialista manteniendo pretensiones de legalidad democrática.
La reforma involucra 30 artículos de los 350 que posee nuestra verborréica constitución pero es significativa. Contiene elementos que convertirían a Chávez en un nuevo dictadorzuelo tropical, a la usanza de Trujillo, Somoza y del que se muere pero no se muere.
1. Acorta la jornada laboral a seis horas, es decir, pone el agua sabrosita para la rana;
2. Se recentraliza el gobierno, desmontando 20 años de descentralización democrática;
3. El período presidencial se alarga a siete años y se establece la re-elección indefinida, lo cual es el objeto fundamental de la propuesta;
4. El presidente podrá nombrar todos los vicepresidentes que se le antoje;
5. El presidente manejará las reservas financieras internacionales y el Banco Central no será autónomo (de hecho, ya no lo es);
6. El presidente podrá disolver la Asamblea Nacional y convocar una Constituyente cuando le plazca;
7. Las fuerzas armadas incluirán una milicia popular y la guardia nacional se irá a lavarse ese paltó;
8. El presidente podrá crear nuevas ciudades, nuevas provincias y nuevos territorios federales;
9. El estado será política y economicamente socialista. La propiedad privada se aceptará con limitaciones.
Esta reforma será objeto de un referendum manejado por los amanuenses del presidente, el cuál tendrá un resultado favorable, porque así lo dictaminarían los poderes establecidos. La participación de la disidencia en ese evento solo serviría para darle un barniz de legalidad. Hasta en el Congreso de los Estados Unidos, el representante Bill delaHunt, amigote de Chávez, se pararía a decir que el proceso no pudo ser más democrático.
Los venezolanos estamos, de nuevo, en una encrucijada. Lo que se nos está proponiendo con el mayor descaro es que validemos la muerte de la democracia en el país, que votemos por el suicidio. Lamentablemente hay millones quienes ni siquiera saben lo que entraña la reforma y siguen aceptando sumisos la limosna chavista. Pero hay millones de venezolanos que si estamos plenamente conscientes de lo que está en juego. Si no actuamos con decisión los delincuentes se quedarán con el país.
Aquí ya no hay negociación posible, ni diálogo, ni pedirle al dictadorzuelo una transparencia electoral que no va a permitir. Aquí lo único que cabe es decirle no al golpe de estado, decirle no a la pretensión dictatorial de este sujeto. Esa negativa rotunda tendrá que llevarse hasta las últimas consecuencias: la huelga general indefinida, el rechazo abierto al dictadorzuelo, con el país en la calle.
En Abril 2002 Chávez fue sacado de Miraflores por la protesta popular, aunque la torpeza de un grupito insensato y la acción de Baduel contribuyeran a restituirlo en el poder. En este momento Chávez está más débil que nunca: PDVSA en crisis técnica y moral, Chávez aislado de las naciones civilizadas del planeta, con parte de sus seguidores protestando sus pretensiones dictatoriales y abusos de poder, gastando más dinero del que obtiene, enfrentado a la Iglesia Católica y a los estudiantes y objeto del ridículo internacional por su patanería.
Ayer leí unas declaraciones del nuevo ministro de la defensa que claramente constituyen un golpe de estado: dijo que para el ejército la reforma no era una propuesta sino “una orden”. También leí un escrito del adulante Eleazar Diaz Rangel, en el cuál pide un “amplio debate”sobre la reforma. Este escrito de Diaz Rangel es una repugnante maniobra para distraer al país. Díaz Rangel propone que, frente a las pretensiones del sátiro con SIDA de violar la Democracia, debatamos si esta violación deba llevarse a cabo en un hotel, en un motel o a campo traviesa.
Rechazemos al ministro gorila y a los adulantes. Si aceptamos calladamente esta insolente propuesta el dictadorzuelo se queda con el país.
1 comentario:
Sr. Coronel, muchas gracias por este orientador nuevo artículo para la historia de este negro período del país. Ciertamente, no es posible hacerle comparsa al dictador HCh, discutiendo una reforma constitucional que es a todas luces un sancocho e' rana para prolongar su dictadura. Un rechazo en bloque de dicha pretendida reforma se impone, bien con una huelga general indefinida como usted lo sugiere, o realizando una concentración popular frente a la Asamblea Nacional, con el fin de que este cuerpo se abstenga de seguir dándole curso a la mentada solicitud de HCh. Si el pueblo tiene que ponerle un candado al Capitolio para que esto último suceda, la historia premiará a quienes a ello concurran. Reciba un gran saludo, Francisco Páez.
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