miércoles, 26 de agosto de 2015

La reputación de la embajadora María Gabriela Chávez




El que al buen árbol se arrima... 

La señora María Gabriela Chávez, embajadora del castro-chavismo en la ONU, proyecta demandar a “El Diario de las Américas” por difamación, ya que su abogada, Eva Golinger, afirma que su cliente no tiene $4.197.000.000 en depósitos bancarios. Yo creo en lo que las dos damas dicen. La suma debe ser diferente y nadie sabe, sino María Gabriela (y el banco) cuanto es el monto. Las posibilidades son infinitas, desde cero hasta ...
Quisiera sugerirle a la Sra. Embajadora que la manera más rápida de resolver estos problemas tan enojosos es la siguiente: haga público el monto de sus depósitos bancarios. Quien no tiene nada que esconder no tiene por qué hacerlo. Yo lo haría, si alguien me acusara de haber robado unos reales. No habría nada más satisfactorio para mí que revelar el monto de mis haberes, a fin de probar mi honestidad.  
Para ser exactos, esto es lo que un funcionario público está obligado a hacer. Lo que pasa es que en la Venezuela del difunto y del payaso esto no se hace y, a quien pregunte, lo llevan preso. Es un estado policial y corrupto. Por serlo la embajadora está pagando el precio, ya que la gente cree,  sospecha, presume, que a la hija de quien fuera un dictador y manejara el dinero de la Nación a su antojo, debe haberle quedado un repele. Y eso no es necesariamente así. El difunto seguramente les dijo a sus hijas e hijos: “trabajen dignamente. No metan la mano donde no deben. Nada de utilizar mi nombre para hacer negocios con otros países. Nada de ocupar casas de la Nación a lo cual no tienen derecho. Nada de comprar relojes costosos o andar viajando en los aviones de PDVSA para Disneyworld o París. Miren que la mujer y toda la familia del César, y soy un César,  deben parecer honestas”.
Por eso creo que la Sra. Embajadora pegaría un jonrón moral y avergonzaría a quienes dudan de su honestidad,  dando a conocer su (s)  saldo (s)  bancario (s), tanto los corrientes como los de ahorro, porque todos tenemos derecho a tener nuestros ahorros. Eso sí, deben ser proporcionales al trabajo que hemos hecho en la vida, nada de premios gordos fantasmas o herencias raras  o “el tesoro que me encontré bajo el cují”.    
Si la Sra. Embajadora hiciera esto daría una clase de civismo a Venezuela, la clase de civismo que la Nación espera de sus familias reales, que den a conocer sus reales.
¿Para que gastar dinero en contratar a Eva Golinger, quien ya tiene suficientes ingresos, pudiendo publicar una carta en El Diario de las Américas revelando sus haberes?

¡Vamos a simplificar nuestras vidas, Sra. Embajadora! 

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pastor Maldonado se retiró en la segunda vuelta

Pastor_Maldonado_EFERedacción deportes, 23 ago (EFE).- El piloto venezolano Pastor Maldonado (Lotus) que había salido séptimo en el Gran Premio de Bélgica, tuvo que retirarse de la carrera por un problema mecánico, así como el alemán Nico Hülkenberg (Force India) apenas pudo iniciarla.

http://www.noticierodigital.com/2015/08/pastor-maldonado-se-retiro-a-la-segunda-vuelta/

...que viva la calidad "piloto F1 Venezuela"...!


Anónimo dijo...

Con la verdad, ni debo, ni temo. Este Principio no lo practican los castrochavomaduristas.

Creo que esta hija de chavez esta muy embarrada con dinero mal habido. Dudo que muestre lo que tiene.

No se le pueden pedir peras al Olmo.

LLevatelo Willie