jueves, 25 de julio de 2013

Venezuela: al galope hacia el Siglo XIX


Galopando hacia el pasado...

***(Apuntes para la historia de Venezuela del Siglo XXI)

Los historiadores venezolanos coinciden en que Venezuela solo entró a la modernidad a la muerte de Juan Vicente Gómez, en 1935. Hasta ese momento Venezuela conservó su fisonomía de país rural, donde el campesino era presa del paludismo, la desnutrición y la desesperanza y donde la brujería era preferida a la medicina como fuente de curación. Los caudillos, decimonónicos eran, con algunas excepciones, seres bastante primitivos. Tan rara era la tradición intelectual, tan escaso el respeto por la educación, que Guzmán Blanco se hizo llamar el Ilustre Americano, a fin de resaltar su sofisticación para deslindarse de los rústicos de la época: Julián Castro, Ezequiel Zamora o los hermanos Monagas.  El país carecía de carreteras, de hospitales, de base industrial diversificada, vivía endeudado, bajo la influencia de una u otra potencia extranjera, con poco que exportar que no fuera café, cacao y cueros.

La democracia que comenzó con Eleazar López Contreras, continuó con Medina Angarita y alcanzó su apogeo bajo las presidencias consecutivas de Rómulo Betancourt, Raul Leoni y Rafaél Caldera I, se fué estancando con Lusinchi, CAP II y Caldera II, para comenzar su galope de retorno al siglo XIX al llegar a la era de Hugo Chávez y Nicolás Maduro.

Varias particularidades de esta era permiten definirla como una grosera involución. Entre ellas:

1.      La prostitución del lenguaje oficial, en especial el presidencial. La dignidad del lenguaje que llegó a su punto más alto durante las presidencias ciudadanas de Medina, Betancourt, Leoni y Caldera se vino abajo con Hugo Chávez y llegó a un punto francamente cloacal con Nicolás Maduro. Chávez puso de moda el insulto a la oposición doméstica e internacional. La vulgaridad, el machismo y la patanería caracterizaron sus discursos interminables: te doy lo tuyo, María Isabél, eres un burro genocida, Bush, la victoria de ustedes es de…mieeeeerda, cerdo Capriles, son pequeñas muestras de la indecencia del difunto pero las hay más y peores. Por su parte Nicolás Maduro, el ilegítimo, ha mostrado y demostrado sin rubor una crasa ignorancia geográfica, histórica y política, así como un desconocimiento de lo que ocurre en industrias esenciales como la petrolera. En sus labios el insulto, que podia hasta divertir a sus seguidores cuando salía de la boca del difunto, suenan chocantes y desabridos en la boca de este Cacaseno.

2.      El retorno de las epidemias ya desaparecidas, como el paludismo, la sarna, el sarampión. Mientras tanto, La Red de Sociedades Científicas Médicas Venezolanas denunció que en la actualidad “de un total de 42 mil camas en los hospitales del Estado solo se cuenta con 16 mil camas operativas”. Esto lo dice María Yánez, presidenta del gremio científico venezolano

3.      El abaratamiento y degradación de los símbolos patrios. Quien vió jamás a Betancourt o Gallegos o Medina con una bufanda tricolor, o una gorra con la bandera o quien vió jamás a soldados desfilando con la bandera pintada en la cara, como payasos de circo de pueblo? Chávez instauró ese pernicioso hábito, exagerado ahora por Maduro, quien probablemente usa calzoncillos tricolor como si el patriotismo entrara por el fundillo. Es lamentable ver como la opoiión lucha por imitr al régimen en esta exhibición patriotera. Menos gorras y más pago de impuestos, amigos! Menos bufandas y más producción agrícola, Nicolás!

4.      El retorno de los brujos. Aunque nunca se han ido del todo de Venezuela, porque en todas las épocas hemos tenido brujos y brujas como consultores políticos, o en los negocios y en el amor, hoy vemos una verdadera explosion de superstición, salmos, piedras mágicas, curas que ponen la efigie de Arias Cárdenas en el altar, rezos y cuanta basura de este tipo pueda concebirse. Si usted va por la carretera de La Mariposa se encontrará con no menos de unos 20 centros de brujería, en los cuales se llevan a cabo misas extrañas, sacrificio de animales, tratamientos anti-pava, lectura del Tabaco por varias vías y otros portentos . Los informes de prensa hablan de largas colas de lujosos autos con placa oficial que esperan su turno para que los altos dirigentes del régimen oigan de su brujo favorito si  les tocará ministerio o empresa del estado, si les saldrá embajada en estos días de gran incertidumbre o de como caerle bien a la gran sacerdotisa de Sai Baba en Venezuela.

5.        La montonera por sobre el ejército institucional. Han proliferado los grupos para-militares, las milicias de reposeros y viejitas con furor uterino, las maniobras anti-invasión hechas por empleados de PDVSA quienes deberían estar produciendo petróleo, grupos de motorizados terroristas, de tupamaros, de La Piedrita, grupos semi-anárquicos glorificados, por cierto, en un libro escrito por un sandalista recientemente bautizado (el libro) nada menos que  en la Biblioteca Carter, en Atlanta: “We Created Chavez: A People’s History of the Venezuelan Revolution” por George Ciccariello-Maher, $26.  

6.      La  adulancia. Esta práctica alcanzó su maxima intensidad en la Venezuela del Siglo XIX. Recordemos a Delpino y Lamas, el chirulí del Guaire, autor del inmortal verso: “Cuando por tu vergel vaya un canario y entre flores te cante divino, no lo espantes, que es mi humilde emisario, tu cantor, Francisco Antonio Delpino”. Esto para que ustedes vean que el pajarito apareció hace mucho tiempo en la picaresca venezolana. Durante el régimen chavo-castrista hemos tenido especímenes mucho más avanzados en esa materia de la adulación: los hermanos Escarrá , Arias Cárdenas (convicto y confeso), Isaías Rodríguez, Diego Molero, Fernando Vegas Torrealba, Roy Chaderton Matos, Nicolás Maduro, Pedro Carreño, Rafaél Ramírez, y siguen miles de firmas arrastradas.

7.      El resurgimiento de la limosna como Política de Estado. Después que el período democrático había hecho logros en materia de empleos, educación, infraestructura física (ayudada en esto último por la dictadura de Pérez Jiménez) y caminado un buen trecho en la dirección de construír  un ciudadano y no un parásito, la llegada de Chávez coincidió con un violento salto atrás hacia la Venezuela de la limosna, del estado paternalista, del taita a lo Gómez, a quien había que escribirle carticas pidiéndole casa, dinero, empleo.  Chávez se convirtió en el taita Venezolano del siglo XXI. Con el dinero de todos los venezolanos procedió a estructurar una política de dádivas para una parte de los venezolanos, aquellos quienes le daban lealtad política a cambio. “A los otros, ni agua” , fué su consigna. En un momento de soberbia, amenazó con sacar a los tanques a la calle si la oposición triunfaba en las elecciones. O es que ya el país no lo recuerda?

8.      El abandono. La suciedad es una característica de la Venezuela de hoy. Hay que ver el aspecto de las ciudades, la basura no recolectada, el descuido de la gente en las calles. La obesidad, una señal de mala nutrición, ha hecho estragos entre los venezolanos de ambos sexos.  Es mi imaginación o las barrigas y los fundillos que se ven en las calles son ahora más prominentes que hace 20 años?

9.      Las vías de comunicación. Depués de ser el país con el mejor sistema vial de América Latina el país ha regresado a la época en la cual viajar de Caracas a Valencia era una aventura de largas horas. La via existe, hecha por la democracia, pero su mantenimiento ha colpsado. Los puentes se caen, los huecos proliferan, llegar a Margarita es una odisea, ir a Los Andes es peligroso. Viajar en el país es, de nuevo, arriesgado por los bandidos del camino y las condiciones precarias de las carreteras.  

10.   La cursilería. El siglo XIX fué pródigo en ridiculeces, montoneras y montunerías y gobernantes de medio pelo. La patriotería de Cipriano Castro, con aquello de “la planta insolente del extranjero” solo encuentra dignos paralelos en los rimbombantes discursos de Chávez y el estúpido balbuceo de Maduro. Por ejemplo, dice Maduro: “Si llegaran a hacerme algo a mí, la ira de los Dioses y de los pueblos sería incontenible". Ha escuchado usted alo tan pomposo y estúpido como esto?  Y dice Cabello: "Le recordamos a los medios de la derecha que hoy es el natalicio del Libertador Simón Bolívar, porque hoy le dan mucho espacio a otro natalicio", como si una noticia tuviera que asfixiare a la otra. Lo del pajarito y el coro de castrati del Supremo Tribunal de Justicia, uh, ah…,  no tienen rivales en la historia de la cursilería venezolana.

 

Galopamos hacia el Siglo XIX con el conductor Maduro con las riendas en la mano. Un pueblo embrutecido galopa trás él, en silencio,  hacia Haití y Angola,  hacia el pasado.

 

 

 

 

9 comentarios:

Daniel dijo...

Estimado Gustavo

Veo que te has unido al pequeño grupo que tiene ya años diciendo que la pseudo Robolución Bolsivariana no es mas que un pobre movimiento reaccionario, liderado por un tal Hugo, aparentemente salido directo de una montonera del siglo XIX, mas arcaico posiblemente que su supuesto antepasado Maisanta. ¡Imagínate! El tipo ese era tan primitivo que hasta trajo de vuelta la Locha, ya desaparecida porque su misma inflación se la comió allí mismo.

Daniel dijo...

Gustavo

Ya que estoy comentando, ¿por que no tratas de poner una barra en tu blog para poder twitear tus entradas?

Anónimo dijo...

A propósito, lean esta perla:

Jaua: la característica propia de los fascistas es usar el juego democrático

Mejor autorretrato, imposible

(el comunismo -1- es un fascismo de izquierda)

A 150 por hora, en retroceso...

-1- Y sus variantes caudillistas, populistas y anacrónicas

Gustavo Coronel dijo...

Hola Daniél:
La verdad e que tengo años diciéndolo, desde el primer día, cuando aun muchos demócratas le firmaban un cheque en blanco: Miguel Henrique Otero, Mayz Vallenilla, Combellas, mi querido Jorge Olavarría, Cervini, para usted de contar.

Daniel dijo...

Gustavo

bueno, si, los has estado diciendo siempre pero nunca evocaste el lado "reaccionario" tan claro como los has hecho hoy. :)

Anónimo dijo...

Todo muy cierto, pero aderezado con un ingrediente especial: la atadura neocolonial a uno de los dos países COMUNISTAS que quedan en el planeta. La guinda de la torta.

Me cuento entre los que calificaron al anacrónico caudillo como lo que era en el alma: CO-MU-NIS-TA. Por eso recibí, allá por los 90, más de una risa desdeñosa.

Otro día les traigo una cita de "los demonios", de Dostoievski, que demuestra lo que siempre fueron los comunistas, aun antes de su acceso al poder por primera vez, que fue un saqueo para pasearse los bolcheviques con las putas luciendo las pieles y joyas robadas. Cosa que siguiron haciendo en todas partes -digo, vivir como reyes-, pues el comunismo siempre fue para el resto, no para ellos.

Pónganle la etiqueta que quieran, pero no enmascaremos la realidad: estos sujetos tienen el alma en La Habana ¿O no?

Anónimo dijo...

Gustavo, me ha parecido excelente tu escrito de esta semana. En 1998 no quedaba alternativa distinta a la de emigrar. Con el "crack" de la democracia y la pérdida de fé en el liderazgo (?) político, no quedaba otra opción: Irse.

Comenzaba la inseguridad, la pérdida del poder adquisitivo y el desvío hacia el sálvese quien pueda que es hoy eso que se llamaba Venezuela. Lo de Chávez fue la ¨Crónica de la Muerte Anunciada¨.

O es que, ¿Nadie recuerda que en 1994 fue a La Habana a decir en la Universidad que iban a hacer la Revolución?

Como Venezuela no era un país de emigrantes, pues tardamos mucho en adaptarnos a esa circunstancia. Además el pasaporte venezolano era respetadísimo en el concierto de naciones. Aún hoy entramos con 90 días a la Unión Europea, por ejemplo.

Los Mayz, Olavarría, Otero, Combellas, etc. etc. etc, son en mucho responsables de lo que vino después. Ojo, no hay que olvidar qué y quiénes nos metieron en el atolladero del que salió Chávez triunfante. Busquen a Caldera y su soberbia permanente, que lo llevó a destruir todo a su paso sin importarle el país.

Muchos de estos personajes apoyaron a Chávez se sumaron a él buscando las dádivas del poder. Sumen al Marqués del Toro Reencauchado de Singapur, a Roy, etc. Otros se mantuvieron frontales en contra, y nada les mancha hoy día. Aunque en su mayoría hayan tenido que largarse. Pero para esta gente decente no quedaba otra opción.

Algún día se escribirá esa historia, como hoy podemos leer a nuestras anchas la tristísima de 1933 en Alemania.

Anónimo dijo...

"Galopamos hacia el Siglo XIX con el conductor Maduro con las riendas en la mano. Un pueblo embrutecido galopa trás él, en silencio, hacia Haití y Angola, hacia el pasado."

Sin embargo, Angola abandonó el marxismo hace años y los hermanos haitianos adoptaron un presidencialismo moderado tipo Francia y el analfabetismo ha bajado del 90% del Papá Doc a menos del cuarenta, que aún es demasiado alto y el número de liceístas y universitarios porcentualmente aumenta lentamente. Son avances, quizás milimétricos, pero avances al fin

Bitteschön! dijo...

Aun cuando no es "Santo de mi devoción", me revienta ver al candidato de la oposición vistiendo con atuendo deportivo, como si tratase de llegar a los fanáticos chavistas y lograr que se fijen en él y cambien su voto.

Por lo menos en España, está mal visto vestir con mono deportivo cuando NO se está practicando algún deporte, la gente que usa esa indumentaria es catalogada como, cómodos, ordinarios o vagos o una mezcla de todos ellos, y he escuchado a periodistas mofándose y haciendo chistes sobre quienes así lucen incluyendo a Capriles.
Con esto me refiero a la imagen de HCR ante la opinión pública internacional, debe cuidarla un poco más, se puede vestir de manera informal sin necesidad del "mono y la gorrita tricolor" (que como Ud. refiere; no aumenta el patriotismo) que lo que parece es que se quiere imitar al VEGESTORIO ENFERMO CUBANO, al MUERTO o al ILEGÏTIMO.
O será que su asesor de imagen es un infiltrado chavista.