La Sala Constitucional del coro de castrati mal llamado Tibunal
Supremo de Justicia dijo lo siguiente, para apoyar el abuso de poder del Capitán
Cabello contra María Corina Machado en la Asamblea nacional: “Determina la
sentencia que las incompatibilidades para los diputados y diputadas de la
Asamblea Nacional, tienen como finalidad evitar actuaciones contrarias a la
ética y a los principios de soberanía, independencia, autodeterminación,
responsabilidad social, paz internacional, justicia, entre otros, por ser
éstos, base fundamental del Estado venezolano”.
Los miembros de esta Sala Constitucional son:
 Juan José Mendoza Jover |
Apenas ayer la
Sra. Gutierrez decía que el TSJ era imparcial y no recibía órdenes de nadie. Evidentemente
preparaba el terreno para emitir la grotesca sentencia contra María Corina Machado.
Los miembros de esa Sala que conozco por sus actuaciones son la Morales, la
Gutierrez y el Carrasquero. La Morales riene
una trayectoria grotesca, ha sido destituída
por el Consejo de la Judicatura no una sino dos veces. Carrasquero es el
analfabeta funcional que hablaba de “tramparencia” cuando era presidente del
CNE, premiado por sus actos con un puesto vitalicio en el coro de castrati. La Gutierrez es nada menos que la presidenta
del TSJ, la que alaba la “independencia” del organismo antes de cometer un acto
de traición a su misión de hacer justicia. Los otros que no conozco deben ser
cortados por la misma tijera. Son parte del grupo que canta alborozado: Uh ah,
Chávez no se va, ver: https://www.youtube.com/watch?v=UQYVK4RlEUc; parte del grupo que da discursos nauseabundos en elogio del régimen, como lo
hace Fernando vegas Torrealba, quien habla, entre otros jalones de testículos de: promover
los cambios sociales requeridos, bajo el liderazgo de
nuestro
Comandante Presidente y una vanguardia cada vez más
esclarecida,
para proporcionar al pueblo venezolano la mayor
suma de felicidad
posible. Este grupo justifica, torciendo las leyes, todas las sinverguenzuras de la
pandilla de malandros que manda en Venezuela.
Y es añadir golpes al
insulto de la sentencia decir que ella está orientada a “evitar situaciones
contrarias a la ética”. Este es un argumento insultante para nuestra inteligencia
porque es esgrimido por un grupo que no ha hecho más que limpiarse el rabo con
la ética.
Esta decisión
del coro de castrati se explica por lo que el mismo Vegas Torrealba, arriba
citado, dice en discurso de 2011, diseñado
para asegurar su cambur vitalicio: “estamos ante una política de Estado y el Poder
Judicial es uno de los poderes del Estado venezolano quien, entonces, con
fundamento en el artículo 136 Constitucional que establece la colaboración
entre Poderes, está en el deber de dar su aporte para la eficaz ejecución de
esa política dentro del ámbito de su competencia”.
Es decir, para
quienes aun no han comprendido como se bate el cobre, el TSJ no es sino un instrumento
en manos del Ejecutivo, el cual establece la “política de estado” que los
invertebrdaos magistrados deben apoyar de manera automática.
Por ello, estos
castrati deben ser llevados al Tribunal Penal de La Haya, puesto que constituyen,
vergonzosamente, la última instancia formal de la “justicia” en Venezuela.
Y ello explica
por qué sentencian en contra de María
Corina Machado, utilizando un lenguaje cínico y vergonzoso.
Cundo la justicia está en estas manos en nuestra patria no
puede haber diálogo. Contra este malandraje no cabe sino resistencia y más resistencia
3 comentarios:
La protesta pacífica no puede tener éxito en la ausencia de la ley constitucional.
En la democracia, además de la consagración del principio de libertades, es fundamental el establecimiento de la división de poderes entre los diversos organismos de Estado.
Sabido es que uno de los pilares que sustentan el estado de derecho es el Poder Judicial, toda democracia se fundamenta siempre en una judicatura autónoma e independiente, de ahí que cuando nos referimos a un estado democrático damos por hecho que el gobierno de dicha nación se subordina en todas sus actuaciones al imperio de la ley, esto es de perogrullo.
Hoy en día esa es la característica de las principales democracias de mundo, aunque lamentablemente algunos países, entre los que se cuenta la Venezuela chavista, prefieren seguir adoptando el modelo totalitario impuesto por los regímenes despóticos del siglo XX, es decir, la Italia fascista, la España de Franco, el comunismo soviético, el nacional socialismo alemán, el castrismo, etc.etc.
Siempre se ha dicho que la profesión o desempeño más degradante de un hombre o mujer de leyes es dado cuando dicha función se ejerce como juez bajo una dictadura, la historia esta llena de ejemplos que corroboran tal afirmación.
En la Alemania nazi, si un magistrado juez no actuaba en “aras del interés del gobierno nacionalsocialista” como así lo expresaba la ley del Servicio Civil, podía ser obligado a retirarse, o peor, podía se juzgado por traición al Estado, varios fueron condenados a largas penas de prisión.
Ronald Freisler, presidente del Volksgerichtshof o Tribunal del Pueblo pasó a la historia como uno de los personajes más siniestros del régimen, encarnó el abuso del Poder Judicial del sistema de gobierno, arbitrario, dictatorial y criminal por antonomasia.
Entre sus frases célebres destaca una que encaja perfectamente con el tema que me ocupa hoy: puesto que nacionalsocialismo y justicia no pueden separarse, no podrá haber distinción entre los criterios del fiscal del estado, juez y supremo líder.
¿Nota el lector alguna analogía con lo que acontece hoy en Venezuela?
dentro de pocos dias se cumpliran 12 anos del que pueblo Venezolano saco al traicionero dictador. Mosca chavistas, esa fecha le va a dar mucha energia a la protesta, y va a ser arrecha ante tanto abuso. Preparense porque el pueblo los va a sacar. No hay Puente llaguno, ni tanquetas, ni balas que para a ese bravo pueblo.
El fin de ustedes y su mal experimento totalitarista esta a punto de terminarse.
Publicar un comentario