Rafael Ramírez y Eulogio Del Pino: culpables del fraude de la Faja del Orinoco

Par de pajarracos culpables del fraude de la faja del Orinoco

En una revista llamada Orinoco: Magna Reserva, el entonces presidente de PDVSA y Ministro de Energía, Rafael Ramírez, decía lo siguiente en septiembre 2010, ver EDITORIAL de la revista, firmado por Rafael Ramírez en : http://www.pdvsa.com/

Plena Soberanía Petrolera: Ejemplo para el mundo

“De acuerdo con nuestro Plan Siembra Petrolera, para 2015 debemos haber llegado a 4,15 millones de barriles/día, de producción de crudo y en 2021 estamos apuntando a una producción de 6 millones 850 mil barriles/día. Este número es importante porque aquí lo que se quiere mostrar es que el crecimiento hacia el futuro de nuestra producción petrolera va a venir de los desarrollos en la FPO, por eso estamos concentrando especial atención en preservar y explotar adecuadamente estos recursos para todo nuestro pueblo”.

Esta predicción fue una farsa, como todo lo que dijo el corrupto Ramírez durante los trágicos años en los cuales manejó la empresa petrolera. Hoy en día la faja produce menos de lo que producía durante la apertura petrolera de la década de 1990. La producción de la faja está disfrazada por maniobras del PDVSA pero no llega al millón de barriles diarios. Pero, aun aceptando la cifra oficial de producción actual como cierta , ella es cuatro veces menor de lo que pronosticó Ramírez, similar a la que tenía la Faja hace 15 años.

Esta es la mayor evidencia del gran fracaso que ha resultado la faja del Orinoco en manos de esta pandilla de corruptos e ineptos de la PDVSA roja.

Todos los directivos de la empresa, comenzando por Ramírez y Del Pino (encargado de Exploración y Producción durante el período del “plan”)  deberían estar en la cárcel. Digo esto con plena responsabilidad, por lo siguiente: estos malandros nunca pensaron seriamente que el tal pronóstico podría ser logrado. Ellos engañaron al país con pleno conocimiento de causa. Como lo sigue engañando Del Pino hoy,  al decir que esos cuatro millones de barriles diarios de producción si se lograrán para 2019. La estrategia de esta pandilla es simple: anuncian que en un futuro lograrán esto o lo otro. Pero este es un futuro que se desplaza en el tiempo. La gente se acostumbra a creer en estas promesas fraudulentas. Cuando llega el año en el cual debe concretarse la promesa ya los venezolanos  se han olvidado de lo que los malandros prometieron. Y así llevan al país, de una promesa a otra, todas incumplidas.

Por ello estoy convencido de que esta gente debe ir a la cárcel, si es que vamos a hacer justicia. Esta gente no debe quedar impune.  

Y los venezolanos deberían dejar de ser tan pendejos y tan mansos.