La tomadera de pelo de las "reservas "certificadas" de la Faja del Orinoco

**** El ejemplo de PetroSA, la empresa de Africa del Sur en el bloque Boyacá.


La mejor cuantificación de las reservas petrolíferas de la faja del Orinoco me la dió un geólogo amigo hace ya muchos años. Cuando le pregunté cuanto petróleo había allí me respondió: “uuuuuuuh….”, señalando con un brazo hacia el cielo.

La PDVSA de Hugo Chávez ha convertido este asunto en una tomadera de pelo que tiene como propósito reforzar su maltrecha imágen geopolítica. Y así el déspota declara ufano: “Tenemos las reservas probadas mayores del planeta, más que las de Arabia Saudita”.

Para perpetuar esta tomadera de pelo ha invitado un grupo de empresas petroleras, la mayoría de las cuales no sabe de petróleos pesados, de como producirlo y mucho menos de como mejorarlo, las cuales dicen “certificar” estas reservas, violando su integridad profesional. Sin decir como lo hacen pero sirviendo de cómplices del engaño.

Un ejemplo reciente de esta zarzuela es el anuncio de PetroSA, la empresa petrolera de Africa del Sur, la cual tiene un bloque de 700 kilómetros cuadrados en la zona llamada Boyacá de la faja del Orinoco. La noticia habla de un hallazgo de mil millones de barriles recuperables hecho por la empresa Surafricana. Felicitaciones!

Esta es la noticia:

“South Africa’s national oil company PetroSA said its joint venture with Venezuela’s PDVSA has found about 1 billion barrels of recoverable oil in the crude-bearing Orinoco Belt, a senior PetroSA official said on Wednesday. PetroSA signed oil exploration and heavy crude oil production agreements in 2008 with its Venezuelan counterpart, which also paved the way for the two oil companies to certify reserves in Boyaca 4 block and covering some 700 square kilometers in the Orinoco oil belt, Reuters reported”.

Claro, los periodistas suelen usar el primer término que se les venga a la cabeza. Pero la empresa no ha “hallado” esos barriles. Lo que ha hecho es “certificar” que están allí y son recuperables. Lo que no dicen es como lo certifican. Para certificar que en una zona existen X barriles de petróleo recuperables es necesario tener un grado de control, de conocimiento sobre la dimensión del yacimiento, sobre los mecanismos de producción, sobre el comportamiento en el tiempo de estos yacimientos, que estos caballeros simplemente no poseen.

Cuantos pozos se han perforado en ese bloque de 700 kilómetros cuadrados? Cual es la historia de producción de ese bloque? Por cuanto tiempo? Estos y otros datos de geología, de petrofísica y de ingeniería de yacimientos que son indispensables para “certificar” debidamente unas reservas, simplemente no están disponibles en la calidad y cantidad requeridos.

Si uno juega con las cifras de la misma manera un tanto alegre como están jugando PDVSA y sus amigos, podemos decir que ese bloque de PetroSA parece ser bastante pobre, si solo tiene mil millones de barriles recuperables. Digo esto porque el bloque Boyacá, según PDVSA, es uno de los más ricos de la faja. Si uno asume que la distribución de los yacimientos en el subsuelo de la Faja es más o menos uniforme (lo cual no es necesariamente así) y que el espesor de arenas petrolíferas y características petrofísicas de las arenas es también uniforme (otro supuesto aventurado) y que, finalmente, los yacimientos se comportan de similar manera en toda la superficie de la faja (tampoco tiene que ser así) ,se puede decir que si en sus 700 kilómetros cuadrados de faja PetroSA ha encontrado mil millones de barriles recuperables, en los 55.000 kilómetros cuadrados totales de la faja se deberían encontrar unos 80.000 millones de barriles recuperables. Sin embargo PDVSA ha anunciado que se han “certificado” unos 300.000 millones de barriles, casi cuatro veces más que esta extrapolación. Y si Boyacá es una de las mejores zonas de la faja, entonces solo caben dos alternativas: o PetroSA no sabe lo que está haciendo o PDVSA ha inflado groseramente los barriles recuperables de la faja. Por supuesto, la otra alternativa es que la distribución de arenas y características de los yacimientos en la faja es bastante errática, lejos de ser uniforme. Esta es la verdadera explicación pero, si ello es así, ilustra el por qué PDVSA no puede de manera tan burda como lo hace, extrapolar recuperaciones de pequeños sectores de la faja a toda la extensión de la faja. PDVSA ha hecho esto, como diría Rafaél Ramírez, a los “carajazos”, que es como ellos hacen las cosas.

Lo que da tristeza es que haya tanto cómplice extranjero y macho vernáculo y tanto silencio en torno a esta zarzuela indigna.