miércoles, 1 de enero de 2014

Simonovis y Maduro


 

El país ve con horror como Nicolás Maduro persiste en mantener en prisión a un hombre inocente y colocarlo en peligro de muerte. Simonovis no es la única víctima de su mezquindad pero es el más emblemático, por la manera perversa como fué enjuiciado y condenado.  La sentencia de 30 años de prisión dada a Simonovis por la infame jueza Marjorie Calderón fue impuesta por el poder politico, por deseos de venganza,  segun lo denunciado por el fugitivo Luis Aponte Aponte, quien no tenía ninguna razón para mentir.

Aunque apoyo los pedidos que ya son un clamor nacional  por la inmediata liberación de Simonovis, pienso que ello no sería una medida de gracia sino un acto de justicia. Es triste que muchos venezolanos se vean obligados a pedirle a Maduro una concesión graciosa, en lugar de exigir a nivel ciudadano la libertad para un hombre que ha sido objeto de intolerable tortura y maltratos.

Al mismo tiempo admiro la postura de Simonovis, de su familia y abogados defensores, quienes han soportado esta dura prueba con gran dignidad y fortaleza. Y mi más ferviente deseo es que pronto pueda salir de su pesadilla y recupere su plena libertad. Sin embargo, ya nadie le podrá recompensar por los años peridos y los maltratos recibidos por el régimen descastado.

Debemos recordar que un hombre con las manos llenas de la sangre de inocentes, Hugo Chávez, fue liberado por el gobierno democrático de Rafaél Caldera. Así como la prisión de Simonovis es un caso extremo de crueldad, la liberación de Chávez fue un acto de extrema permisividad, poque aquel hombre si fué un asesino, pero ilustra el abismo moral que existe entre los presidentes de ayer y el Maduro quien hoy pretende ejercer el liderazgo en nuestro país, con el apoyo de un ejército prostituído.

Y, para acentuar la naturaleza sádica de su actitud, Maduro libera cien presos comunes.   Si yo pudiera llegar lo suficientemente cerca de Maduro, trataría de abofetearlo, sin que ello pudiera ser visto como un acto en contra de la presidencia de la república sino, simplemente, en contra de un bribón.  Como estoy lejos, esperaré una oportunidad de tratar de hacerlo en terreno neutral.

 Escarrá, Muller Rojas, Tascón, Lara, Ron, Russián, García Ponce, Chávez ya pertenecen al baúl de los recuerdos y, con excepción de Muller Rojas, se despidieron sin rectificar. Maduro no debería dejar para mañana lo que su conciencia (?) debería dictarle hacer hoy.

  

1 comentario:

Anónimo dijo...

Los fidel-chavistas exijen para ellos los que le niegan a los demas. Pidieron libertad y trato humano cuando estan presos y se los dieron. Pero ellos no hacen lo mismo. Lo que demuestra la naturaleza injusta y ventajista de esta manada de cavernicolas. Tanta mala intencion enferma. Tanto odio sorprende. Cuando les toque a ellos estar en el banquillo de los acusados, sugiero un trato equitativo a lo que le han dado a estos prisioneros que injustamente permanecen encarcelados sin ninguna esperanza de obtener un gesto de compasion y de gracia. Esto ultimo demuestra que tampoco son Crisitianos, como pretender hacer creer, pues con esos gestos, lo que demuestran es que son adoradores del diablo.