domingo, 21 de diciembre de 2014

De Palomita Blanca a la Variación Nimrod, de Elgar


Allegro finale, Segunda Sinfonía de Rachmaninov

REFLEXIONES DOMINICALES

Es posible representar musicalmente una trayectoria vital. Comienza desde la cuna, con Palomita Blanca, una canción tradicional venezolana que arrulló a millones de niños, una de las primeras que recuerdo en las frías noches de Los Teques. Continúa con  Desesperanza, de María Luisa Escobar, cantada por Sadel, en la cual está el recuerdo de los primeros amores, amores de adolescencia, generalmente no correspondidos. En Carora, la bella canción de Rodrigo Riera y en Nostalgia Andina, de César Prato,  sentimos el amor y el recuerdo del terruño, al cual todos tenemos que dejar tarde o temprano.
El preludio de Rachmaninov y el andante de Shostakovich representan la transición de nuestra juventud a la vida adulta. Nos enfrentamos con optimismo a la vida. No hay nada, sentimos, que no podamos cambiar para bien.
La vida adulta requeriría, en cada caso, de una sinfonía completa. Pienso en mi propia vida como una especie de Segunda Sinfonía  de Rachmaninov o de la Cuarta sinfonía de Brahms.  Seríamos inmodestos pensando  en ella como  la Quinta de Bethoven o a la Octava de Mahler o, aún,  la Segunda de Sibelius.
Pero, como bien nos dice Ilán Chester, debemos enfrentarnos  algun día al destino. Llegará el momento en que otros escuchen, pensando en nosotros, la variación Nimrod, de Elgar, en sus Variaciones Enigma, una música noble que hubiésemos deseado que representara nuestro mensaje final.
Aquí está la selección. Todas son piezas que duran breves minutos. Por donde vamos nosotros? Creo que por el cuarto movimiento de la segunda Sinfonía de Rachmaninov. Es una larga sinfonía, de una hora de duración en su versión original, algo así como 85 años de vida humana. La he disfrutado en cada nota y en cada melodía.   
Cancion venezolana tradicional, Palomita Blanca
Maria Luisa Escobar, Desesperanza,  canta A. Sadel
Carora, Rodrigo Riera
César Prato, Nostalgia Andina, Serenata Guayanesa
Rachmaninov, Prelude 5, opus 23, piano. Lang Lang
D. Shostakovich, Andante, 2nd piano concerto, El hijo de Shostakovich  al piano.
Aquí: Insertar la sinfonía de su predilección. Yo prefiero la Sinfonía 2 de Rachmaninov.
Es el destino, Ilán Chester
Elgar  Nimrod, Enigma variations

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La canción venezolana que Ud. Nos muestra acá, la de Sadel, es preciosa. A mí me gustaría añadir una que es importante para los que nos enamoramos y luego perdemos ese amor, cosa que yo le felicito por nunca haber pasado por ello.

La bossa nova do Antonio Carlos Jobim, interpretada por Frank Sinatra y él mismo.

http://youtu.be/0JkX8PLZtWQ


Anónimo dijo...

Tambien me gusta este programa en vivo de ellos dos:

http://m.youtube.com/watch?v=CRbmfX7-nMw