EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI: EN LAPTOP HACIA EL ABISMO

Anomía en Caracas: insurgencia contra Chávez, por "blando".
La Parroquia 23 de Enero, controlada por grupos anárquicos.

No solo le costó mucho nacer sino que parece destinado a morir pequeño. El Socialismo del Siglo XXI fue un término acuñado por los asesores de Hugo Chávez para tratar de darle un poco de sustancia al débil caldo ideológico de la “revolución”, el cuál solo consistíó en el árbol de las tres raíces desde 1992 hasta 2000. Los asesores estratégicos empleados por Chávez, desde Norberto Ceresole hasta Marta Harnecker, Alberto Muller Rojas y William Izarra generaron un sancocho militarista y fascistoide que le gustó mucho a Chávez pero que ha sido rechazado por el pueblo.
Posteriormente Haiman El Troudi y Heinz Dieterich hicieron un intento más serio de darle forma al muñeco ideológico. El Troudi llevó a cabo un intento inexplicable de definir el Socialismo del Siglo XXI en base a lo que no debía ser, una curiosa forma de definición negativa: “El Socialismo del Siglo XXI no es capitalismo de Estado, ni populista-paternalista, ni centralizador, ni totalitario, ni armamentista, ni mesiánico, ni unipartidista, ni auspiciante de divisiones sociales…”. Para los lectores de esta definición, El Troudi se convirtió en uno de los mejores humoristas del régimen, puesto que su enumeración de lo que el socialismo no debía ser era, precisamente, lo que caracterizaba al régimen de Chávez! Pero El Troudi no había terminado. Definió al socialista así: “Es ético, es moral, no es individualista, no es egoísta, no es dogmático, no es sectario, no es racista, no es consumista, no es autoritario, no es intolerante…. Es humanista”. Les pregunto a los lectores si esta lista de grandes cualidades aplica a Chávez y su pandilla! Hasta Chávez se dió cuenta de que El Troudi le estaba tomando el pelo, despidiéndolo de inmediato como asesor en materia ideológica.
Heinz Dieterich publicó un libro bastante ladrilloso sobre el Socialismo del Siglo XXI, el cuál parece haber sido escrito para otros propósitos y adaptado apresuradamente para complacer a Chávez. En este libro Dieterich menciona conceptos tales como la paridad de remuneración para todos, según la cuál un barrendero y un neurocirujano (ejemplo utilizado en su libro) ganarían exactamente lo mismo, ya que ambos hacen labores importantes. Sin embargo, nos advierte Dieterich, el barrendero salva más vidas que el neurocirujano. El libro también contiene ideas sobre la moneda y sobre el trueque, concepto favorecido por Chávez e implementado a través del “Zambo”. Sin embargo, Dieterich ha caído en desgracia recientemente,después de criticar la creciente estupidez de Chávez y parece haberse ido del país.
Lo cierto es que, mientras estos intentos ideológicos se venían haciendo con poco éxito, una serie de derrotas, tanto domésticas como internacionales, han puesto a Chávez contra las cuerdas. Su rotunda derrota de Diciembre 2007, su regaño a manos del Rey de España en la Cumbre Iberoamericana celebrada en Chile, su alineamiento con las FARC, la vegetalización de Castro, han hecho que tanto los venezolanos como la comunidad Latinoamericana lo hayan comenzado a ver como un perdedor. Sus discursos han perdido el efecto de galvanizar las fuerzas de la izquierda extrema y son rechazados por los ciudadanos moderados del hemisferio.
El golpe de gracia pudiera estar constituído por la información encontrada en los laptops de los narcoterroristas de la FARC recientemente capturados por el ejército Colombiano y en manos de Interpol. Hay excelentes razones para pensar que esta información es genuina. El cronista de El Tiempo, Daniél Samper menciona en un reciente escrito las más importantes: la especificidad de los datos, con abundancia de información comprobable; el lenguaje utilizado, imposible de reproducir por quienes no sean parte de las FARC; el poco tiempo que transcurrió entre la operación militar y la entrega de la copiosa información a Interpol, ya que es imposible la falsificación de ese cúmulo de datos encontrados; la entrega misma de la información a una instancia de verificación independiente y, la reacción de los incriminados, negando los hechos de plano y hssta la existencia misma de los datos.
La publicación masiva de estos datos y su vuelta al mundo será lo que enterrará definitivamente al Socialismo del Siglo XXI, mostrando a sus promotores: Chávez, Correa, Morales, Ortega, como lo que son, un grupo de malandros y aventureros sin otra ideología que no sea el engrandecimiento propio y el poder indefinido.

El Socialismo del Siglo XXI viaja en laptop hacia su desintegración.