Gana una batalla pero pierde la guerra

He querido pasar tres días sin escribir, para poder decantar mis emociones y obtener una perspectiva más objetiva. Esta es la primera de esas reflexiones:

Hay ingredientes de la situación actual venezolana que indican que la victoria electoral de Hugo Chávez, obtenida a punta de dinero y corrupción, es de corto plazo y se parece mucho más, a largo plazo, a una derrota. Veamos las razones:

1.      La re-elección coloca en la presidencia a un hombre enfermo, física y mentalmente. Los resultados de esta lamentable situación se verán de manera inevitable;

2.      Haber sido re-electo con pocas probabilidades de ejercer a cabalidad la posición es un acto de profunda irresponsabilidad. Es evidente que pensó en términos muy mezquinos y no en términos de la nación y los venezolanos le pasarán esta factura;

3.      La situación financiera del país se agrava cada día más: el ingreso petrolero es aun cuantioso pero las exigencias del populismo lo hacen cada día menos y menos suficiente, obligando al país a un endeudamiento brutal. Ello hará una devaluación muy probable a corto plazo;

4.       Las empresas del Estado están en serios problemas: CVG en la ruina, la gerencia de PDVSA podrida, los puertos en colapso, las empresas expropiadas en franco declive. Las empresas del Estado simplemente no funcionan y esto es comprobable. Esta situación no puede ser simplemente desestimada con palabras huecas y demagógicas, porque la realidad es implacable;

5.      Los programas sociales son ineficientes y representan apenas un componente de ayuda temporal pero no se han establecido programas sociales estructurales. No los hay. La pobreza estructural sigue allí, a pesar de que se le dé dinero a la gente. Muchos se han dado cuenta de esto, aunque haya millones quienes aun piensen que esto es suficiente;

6.      La industria petrolera continua su deterioro. Rafaél Ramírez no es solo ineficiente sino corrupto. Ello significa que la empresa caerá en manos de China, país que le ofrece dinero por adelantado al gobierno a cambio de porciones cada vez mayores de la producción petrolera de Venezuela;

7.      La inflación y el crimen seguirán causando tragedias en las familias venezolanas. Hay un proceso de desencanto de los venezolanos en las grandes ciudades, mientras que todavía el venezolano rural sueña con promesas y piensa que el país está bien. Esto es lo que los resultados numéricos del voto ha mostrado con toda claridad. La oposición ganó las grandes ciudades, Chávez ganó en las pequeñas ciudades y en el medio rural, la porción menos informada de la población;  

8.      Continuará la polarización y se acentuará aun más el resentimiento social. Tanto de los pobres hacia la clase media, debido a las prédicas de Chávez, como de la clase media hacia un gobierno que los ha excluído y humillado. En Venezuela no puede haber reconciliación.  6.3 millones de votantes venezolanos resienten un gobierno que los ha insultado sistematicamente por 14 años. Pasar esa página es impensable;

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Creo que lo esencial de todo este cuadro de profunda descomposición es que la re-elección le dá a Chávez tiempo para implosionar. Si hubiera perdido, hubiera pasado a la historia como un héroe. Ahora tendrá que mostrarse como es: un hombre enfermo e inepto tratando de manejar un país que se ha ido de las manos, un fracasado en su intento de hacer una revolución.   

Yo pienso en términos de meses. Sin embargo cada día que pasa es un alto precio el que la nación tiene que pagar por esta tragedia.  Lástima que el país sea el que tenga que pagar ese alto precio.