La situación acual de Cuba y perspectivas a corto plazo

Cuba se desmorona después de 50 años de dictadura castrista. Como mago de Oz impotente Raul Castro ha comenzado a desmontar, paso a paso, el artificial tinglado de estado todo-poderoso existente en la isla. El primer paso significativo ha sido el despido de 500.000 empleados públicos, lo cual será seguido por el despido de otros 500.000 empleados públicos. Muchos de estos empleados tendrán que transformarse, de la noche a la mañana, de burócratas estatales a carpinteros, zapateros, taxistas, agricultores o magos, sobretodo lo último. Muchos otros serán despachados secretamente a Venezuela, desde donde lograrán eventualmente llegar a tierras de libertad. Se está llevando una revolución silenciosa para desmantelar la revolución.

La agricultura está en ruinas y Raúl Castro ha tenido que destinar millones de dólares para la importación de alimentos, en su mayoría de los Estados Unidos. En teoría miles de cubanos pudieran regresar a las tareas del campo pero encuentran una situación donde no existen utensilios de labranza, no existen sistemas de riego, viviendas rurales adecuadas o equipos para cosechar. La zafra azucarera ya ha dejado de ser una prioridad para el régimen y, como consecuencia, la producción de azúcar en Cuba está al nivel de hace 50 años, a pesar de que Brasil les está ayudando.

Ayer asistimos a una informativa charla sobre Cuba del miembro del Lexington Institute, Phil Peters, en el Diálogo Interamericano. Decía Peters que Raúl Castro sabe lo que tiene que hacer: reducir la deuda, buscar financiamiento externo, aumentar el empleo en el sector privado, aumentar la producción y la productividad. Sin embargo, Peters no nos dijo como Castro puede lograr hacer eso (probablemente porque el mismo Castro no lo sabe). Añadió Peters que lo que se está haciendo es muy paso a paso, a fin de dar la impresión de que no hay crisis, que el modelo sigue funcionando. Sin embargo, hace poco el otro Castro, Fidel, reveló que el modelo ya no funcionaba en Cuba y trató de disuadir a otros países, especialmente Venezuela, de adoptarlo.

En un país como la Cuba castrista, donde la corrupción es endémica y se ha convertido en un instrumento indispensable para la sobrevivencia, será imposible mantener la disciplina social necesaria para llevar a cabo una transición organizada, como la que pretende Raúl Castro. La isla vive hoy de los envios de dinero que hacen los cubanos quienes viven fuera de la isla y de las significativas limosnas de Hugo Chávez. Es muy dificil estimar el monto de las remesas pero el monto de las limosnas de Chávez en petróleo y dinero efectivo se estima en unos $3200 millones al año. Ambas fuentes de ingresos son frágiles y pueden cambiar o hasta desaparecer en cualquier momento, sobretodo las dádivas de un Chávez muy acosado por problemas internos que amenazan dar al traste con su dictadura.

Según Peters los renglones productivos que pudiesen ayudar al gobierno a aumentar sus ingresos, tales como la minería, la agricultura y el turismo, no muestran avances significativos.

En esencia, lo que parece estar sucediendo en Cuba es un desmantelamiento progresivo de la revolución, de todo el modelo que no funcionó bien nunca y que ahora ha dejado de funcionar casi por completo. El sector privado se ha convertido, subitamente, en algo de prioridad para el régimen, después de haberlo aplastado en las décadas anteriores. Sin embargo, todavía hay pretensión de que no se está reformando el modelo sino, simplemente, afinándolo.

Un asistente pro-régimen cubano, Wayne Smith, comentó que este cambio descrito por Peters podría revertirse cuando Cuba comienze a explotar sus  "importantes yacimientos petrolíferos y que tal actividad obligará a los Estados Unidos a acercarse de nuevo a Cuba”. Yo comenté que los prospectos petrolíferos cubanos no son tan importantes como para convertir a Cuba en un futuro exportador de petróleo y que cualquier desarrollo de este tipo tardará mucho tiempo, unos diez o más años. Además dije que las limosnas de Chávez se pueden terminar en el corto plazo, a juzgar por lo que está ocurriendo en Venezuela.

Peter comentó que el problema mayor para el régimen cubano es ver como se lleva a cabo una transición organizada hacia una nueva generación política, habida cuenta de que los líderes originales están a punto de pasar a mejor vida.

Al escuchar este recuento de la situación cubana me he preguntado: que queda de esta revolución después de casi 60 años de terror, privaciones, éxodos y odios? Habrá algo salvable de la revolución cubana? Habrá logrado algo esta revolución que no era posible lograr en democracia y libertad y sin causar tanto sufrimiento a una nación entera?

Como es posible que este ejemplo cubano, que está tan a la vista como el de Corea del Norte, no sea suficiente prueba para los duros-de - matar -  ideológicos del mundo, que estos regímenes comunistas y totalitarios no llevan sino a la miseria y a la destrucción?

Quien tenga un comentario favorable al balance de la revolución cubana, que lo haga.