DIARIO DE VIERNES
ESTA ES UNA ENTREGA ESPECIAL DE MI DIARIO DE VIERNES, DEDICADA A LA
RELACIÓN DE CHEVRON CON EL RÉGIMEN DE NICOLÁS MADURO.
CHEVRON EN VENEZUELA TRANSITA UNA CUERDA FLOJA ENTRE EL MUNDO DE LOS
NEGOCIOS Y LA COMPLICIDAD CON EL CRIMEN
Este Diario de Viernes está dedicado exclusivamente a lo que considero uno
de los más graves aspectos de la relación entre los Estados Unidos y Venezuela,
el cual está impidiendo, atrasando, obstaculizando la transición democrática en
Venezuela. Se llama CHEVRON.
Mi entrega tiene dos partes. En la primera parte hablo de los antecedentes
y la naturaleza actual de la relación de Chevron con el gobierno de Venezuela.
En la segunda parte, transcribo la carta que le envié a mediados de noviembre
de este año, en inglés en el original y en traducción al español, a los
accionistas y a la junta directiva de CHEVRON sin tener, hasta ahora, respuesta
alguna.
PARTE I
ANTECEDENTES Y SITUACIÓN ACTUAL
Cuando me gradué de geólogo en la Universidad de Tulsa, en 1955, regresé a
Venezuela a trabajar para la empresa Shell de Venezuela. Uno de los primeros
amigos y mentores que tuve en aquellos años fue Ronnie Kitch, gerente general
de Chevron en Maracaibo. Cultivé esa gran amistad y, por extensión, desarrollé
una visión amable de Chevron, la empresa que manejaba el campo de petróleo pesado
de Boscán, en la costa occidental del Lago de Maracaibo. Tiempo después, cuando
Chevron fue objeto de una demanda brutal en Ecuador, en la cual se confabularon
algunos líderes indígenas ecuatorianos, un abogado estadounidense quien lideró
el grupo y el gobierno de Rafael Correa, para demandar a la empresa, comprando
jueces, abogados, contratistas de Colorado y utilizando el poder del estado, me
interesé en el caso y escribí no menos de unos seis artículos en mi blog y en
publicaciones internacionales sobre lo que vi como un acto criminal contra la
empresa. Al final, Chevron logró prevalecer en las cortes internacionales. Digo
todo esto para mostrar que si acaso he tenido sesgos en relación a Chevron han
sido sesgos a su favor.
Hoy pienso diferente. Estoy indignado con la postura que Chevron ha
adoptado en Venezuela, de colaboración estrecha con los regímenes más crueles,
más desastrosos que Venezuela haya tenido jamás, los liderados por Hugo Chávez
desde 1999 hasta 2012 y por Nicolás Maduro, desde 2012 hasta la fecha. En esta
entrega de mi DIARIO DE VIERNES explico en detalle las razones por las cuales
estoy enfrentado a Chevron hoy, después de haberla defendido en el pasado. Lo hago
porque pienso que una empresa, como un individuo, siempre debe serle fiel a sus
principios, no adoptarlos hoy y rechazarlos mañana para obtener beneficios
materiales, como quien se cambia de camisa.
CHEVRON EN TIEMPOS DEL CHAVISMO
Chevron en Venezuela adoptó dede hace mucho tiempo una estrategia de
permanencia de largo plazo en el país, a diferencia de otras empresas
petroleras de igual tamaño, lo cual es – en principio - perfectamente legal y admisible. En 2006 - 2007,
el gobierno autocrático de Hugo Chávez cambió abruptamente las condiciones de
asociación para las empresas petroleras extranjeras en el país, convirtiendo lo
que eran contratos de operación en la Faja del Orinoco en empresas mixtas, en
las cuales el socio extranjero podía tener hasta el 49% de las acciones pero
debía aportar el 100% de las inversiones necesarias. La mayoría de las empresas
estadounidenses se fue del país y dos de ellas, Exxon y ConocoPhilips demandaron
a PDVSA por considerar que estaban siendo confiscadas (ambas ganaron sus
demandas en el tribunal de arbitraje del Banco Mundial). Chevron fue la única
empresa petrolera estadounidense de importancia que decidió permanecer en el
páis bajo las nuevas condiciones.
Esta decisión fue consistente con
su estrategia de permanecer en Venezuela en el largo plazo aunque los llevó a
aceptar que el régimen podía modificar, sin un proceso razonable de negociación,
los términos de la asociación.
Al aceptar esta medida Chevron
fue entrando progresivamente en una estrecha relación con el régimen,
personificada por la creciente amistad del Gerente General, Ali Moshiri, con
Hugo Chávez, quien lo comenzó a llamar “el mejor aliado que la revolución
bolivariana tenía en el sector petrolero”.
Parece ser que Hugo Chávez, en algun momento, definió esta relación
comentando que Chevron ya no era cachifa
sino concubina, auqnue no he encontrado la cita exacta, ver: https://theanarchistlibrary.org/library/el-libertario-editorial-collective-chevron-and-the-bolivarian-government
En abril 2022 y luego en este año
2024 mencioné publicamente este “romance” y su repercusión negativa sobre la
empresa, ver: https://petroleumag.com/invito-a-la-verdadera-chevron-a-ponerse-de-pie/ y: https://www.lapatilla.com/2024/08/22/gustavo-coronel-chevron-con-razon-en-ecuador-sin-escrupulos-en-argentina-complice-de-la-dictadura-en-venezuela/ .
Chevron fue estableciendo una
alianza con el chavismo en el poder, el cual parecía ir más allá de lo
puramente comercial para entrar en el campo político. Chevron conocía bien la naturaleza del régimen
chavista y el desastre que estaba causando en Venezuela. Ya Chávez había tomado
a PDVSA por asalto y la había transformado en una caricatura de empresa
petrolera. No solo Chevron lo sabía sino que hasta podría pensar que ello
representaba una oportunidad estratégica para consolidar su influencia sobre
PDVSA, como en efecto ha ocurrido.
En 2011-2012, en un momento en el
cual la situación del régimen de Chávez se debilitó, debido a la caída en los
precios del petróleo, Chevron le prestó la cantidad de $2000 millones, suma que
fue definida como una inversión para el pequeño campo de Boscán, cuyos
requerimientos ciertamente no eran de esa magnitud. La falta de transparencia
del régimen hizo imposible saber el destino de ese dinero pero tengo pocas
dudas de que sirvió, en buena parte, para consolidar a Chávez en el poder y
financiar su nueva campaña por la
presidencia.
La muerte de Chávez le dio mayor poder a Chevron en Venezuela
La muerte de Chávez no
obstaculizó la influencia de Chevron en Venezuela. Maduro se fue entregando en
sus brazos, cediéndole más control de las operaciones petroleras de PDVSA en la
Faja del Orinoco. En esta nueva fase de la relación Chevron comenzó a actuar de
manera visible como embajadora de Maduro en Washington, abogando por el cese de
las sanciones petroleras, a fin de garantizar
la seguridad energética de los Estados Unidos y minimizar el problema
inmigratorio ilegal, asuntos que – en realidad- han sufrido un relativo
deterioro, precisamente por la presencia de Maduro en el poder.
En paralelo con la actuación de
Chevron, su exgerente general, Ali Moshiri, ya retirado, creó una empresa de
inversión en el sector petrolero, AMOS GLOBSL ENERGY, la cuál está activa en
Venezuela tratando de obtener contratos de exploración y producción en el país,
tanto por su cuenta como junto a INELECTRA, empresa venezolana, con la cual ha
formado una asociación llamada GRAMERCEY-AMOS para optar a contratos en el
oriente del país, para lo cual requerirían un relajamiento de las sanciones. Una
actividad comercial perfectamente legal los lleva a ser aliados voluntarios o
no del régimen.
ALGUNOS HITOS DE LA RELACIÓN DE
CHEVRON CON EL CHAVISMO
2007: “El 8 de noviembre en
entrevista Alí Moshiri dijo: “El gobierno de Hugo Chávez es el primero en
desarrollar el gas. Está en buen camino”.
2008. En enero se firmó contrato
entre Chevron y PDVSA para manejar a Petropiar en la Faja del Orinoco por 25
años
2010. Chevron obtiene licencia
para explotar bloques Carabobo 1 y 3
2011: En Septiembre Ali Moshiri
dice en el Congreso de Hidrocarburos organizado por PDVSA: “Hemos encontrado
una nueva Arabia Saudita en la Faja del Orinoco”.
2012: El 18 de julio Chevron
anuncia una “inversión” de $2000 millones para expandir producción en el campo
Boscan.
2012: El 18 de agosto en el teatro
Teresa Carreño Hugo Chávez anuncia: “Aquí tenemos a la ChevronTexaco, con quien
trabajamos muy bien. Me alegra que Obama diga que no somos una amenaza para
USA”
2013: El 2 de Marzo el
representante regional de Chevron dice a la prensa: “La colaboración entre
Chevron y PDVSA es una de las mejores”
2013: El 27 de mayo Rafael
Ramírez anuncia que PDVSA ha recibido $2000 millones para promover producción
en PetroBoscán
2013: El 11 de noviembre Kelly Hartshorn, presidente de Chevron para
América Latina, comenta que ya la producion de la empresa en Venezuela es
de 270,000 b/d.
2014: En su primera visita a la
Faja del Orinoco la nueva presidenta de Chevron para América Latina dice “Estamos
orgullosos de los resultados y de ser socios de PDVSA en PetroPiar”.
2022: el 26 de noviembre el Departamento de Estado anunció la
suspensión de sanciones para que Chevron produczca petróleo en Venezuela.
2024: Dice el WSJ “Chevron
Wants the Oil to Keep Flowing in Venezuela after Disputed Election”. Behind the scenes, the oil
company’s message to the White House is that it needs to stay in Venezuela,
even if Maduro remains
Esta secuencia es ilustrativa del grado de creciente
cooperación de la empresa Chevron con el chavismo en Venezuela. Por cierto, el orgullo expresado por la Gerente
Regional de Chevron, la Sra. Kelly Hartshorn, por PetroPiar no se ha visto
justificado, ya que esta empresa ha mostrado altos niveles de corrupción en su
manejo, situación que ha debido merecer una respuesta más enérgica por parte de
Chevron.
PETROPIAR
ES UNA EMPRESA CON UN ALTO NIVEL DE CORRUPCIÓN
Al menos desde 2017, ver: https://www.venezuelapolitica.info/denuncian-empresas-y-funcionarios-que/#google_vignette hemos
visto en la prensa numerosas referencias a la corrupción en la empresa
PetroPiar, en la cual Chevron posee el 30% de las acciones y, presumiblemente,
tiene empleados suyos en nómina quienes deberían mantener un razonable control
sobre la empresa. Sin embargo, existen múltiples referencias sobre empresas contratistas
y empleados de la empresa PetroPiar involucrados directamente en un amplio operativo
de corrupción. Recientemente la justicia estadounidense ha llevado a cabo una
demanda contra un empresario establecido en Florida quién defraudó a la empresa
en millones de dólares durante años, ver: https://www.justice.gov/criminal/criminal-fraud/case/united-states-v-rixon-rafael-moreno-oropeza
Por lo que conocemos no existen funcionarios de
Chevron directamente involucrados en estos actos. Chevron parece ser una
víctima de la red de ladrones que ha proliferado en la empresa. Nuestra
preocupación se centra en su actitud pasiva y silenciosa, la cual permite que
el prestigio de su nombre se vea comprometido por una asociación con una
empresa en la cual campea la corrupción.
La actual presidente de PetroPiar, la Sra. Ninoska
Rodríguez, cuyas credenciales para manejar esta empresa quisiéramos conocer,
dice lo siguiente en su cuenta de Instagram:
Ninoska Rodríguez: Con inmenso orgullo y compromiso, hoy celebramos el 16°
aniversario de nuestra segunda casa: PDVSA Petropiar S.A., empresa mixta
adscrita a la Corporación Venezolana del Petróleo S.A. (CVP).
Que
sigan los éxitos, porque es gracias a esta gran familia petrolera que hoy
contribuimos en la construcción de la Venezuela Potencia, y muy especialmente
al bienestar del pueblo. ¡Muchas felicidades PDVSA Petropiar, te llevamos en el
corazón!
¡16 años produciendo por Venezuela!
Chevron no debería aceptar que esta señora se burle con
cinismo del pueblo venezolano. Seguir hablando de una empresa azotada por
fraudes y robos cómo si tal empresa fuera un símbolo de la Venezuela potencia y cómo contribuyente
al bienestar del pueblo es un insulto y Chevron, con su silencio, se hace
parte de esa payasada. No es que Chevron sea agente activo de la corrupción y del
fraude que se le hace a Venezuela sino que es cómplice por omisión de este
crimen.
PARTE II
MI COMUNICACIÓN DIRECTA A CHEVRON
En base a lo dicho hasta ahora pensé necesario, en mi
capacidad de exgerente y cronista petrolero y de ciudadano venezolano, enviar a
CHEVRON una carta en la cual hablo de esta situación y de la brecha existente
qie observo entre su Código de Ética Corporativa y su relación con un régimen
forajido e ilegítimo, como lo es el de Nicolás Maduro en Venezuela. La carta original
está en inglés, seguida de una traducción al español.
McLean
November
12, 2024
FROM
A VENEZUELAN CITIZEN TO THE SHAHOLDERS OF CHEVRON
Dear
friends:
I am a retired petroleum
geologist from Venezuela, a member of the founding Board of Directors of
Petroleos de Venezuela, 1976-1979. When Chevron was unjustly attacked in
Ecuador I wrote many articles in its defense based on my convictions about the
truth in that case, some of which I link to below:
https://www.elcato.org/el-caso-chevron-texaco-en-ecuador https://explorer.aapg.org/story/articleid/59321/chevron-in-ecuador https://petroleumag.com/el-caso-del-falso-desvalido-el-juicio-contra-chevron-en-ecuador/ https://lasarmasdecoronel.blogspot.com/2011/04/el-caso-chevron-texaco-en-ecuador.html .
Today I write to
you to express my deepest concerns about the behavior of the company in
Venezuela, characterized by a close collaboration with a cruel regime which
violates human rights and is clearly illegitimate both of origin and of
behavior.
This attitude
started during the times of Ali Moshiri as General Manager of Chevron in
Venezuela, when autocrat Hugo Chavez publicly referred to him as one of his
best allies. This relationship included an important loan from Chevron to Chavez
for the amount of U.S. 2 billion, much of which served to consolidate Chavez’s
authoritarian regime and cruel repression of dissidence.
Since 2022, by
means of the emission of General Licenses the government of the United States
has allowed Chevron to produce not only the oil volumes needed to recoup its
debts but also to produce and market in
the United States increasing volumes of oil, generating an income that
consolidates the power of the illegitimate regime.
I admit that the
reason to exist of a company is to generate dividends to its shareholders and
that Chevron could argue that this is, precisely, what they do in Venezuela.
However, it is also true that this basic objective has experienced a
transformation in modern business practices to include a strong component of
social responsibility towards the communities where the company operates, its
stakeholders.
In a voluntary
manner Chevron has assumed this responsibility through the structuring of an
Ethical Corporate Code, of obligatory compliance by all Chevron staff, from the
CEO down to the most modest employee.
This is a document of which Chevron can feel justly proud, that clearly
spells what the behavior of the company must be in the communities where it
exercises its activities.
However, this
beautiful document contrasts with the posture adopted by the company in
Venezuela. To illustrate my point I summarize below the commitments made
voluntarily by Chevron, to be applied in all communities where the company
operates:
1.
Chevron’s motto reads: THE HUMAN ENERGY COMPANY. It
unites two main principles, one referring to its commercial nature, the other
to its concern for the welfare of the communities where it operates. The motto
implies that one should not exist without the other
2.
Before acting the company should ask itself the
following questions:
·
Is
it legal? If there is doubt the action should not be followed through
·
Is
it consistent with company policies, including Human Rights policies? If not,
the action should not be followed.
·
Is
it consistent with the CHEVRON WAY? Is the action to be taken in line with core
values?
·
If
the action was made public, would the staff feel comfortable? Would the action be taken if we knew it would
be published in the front pages of the newspapers?
As a reasonably well informed observer of the behavior of
Chevron in Venezuela I cannot fail to notice the contrast between its actions with the imperatives contained
in its code of ethics:
·
In July 2024 the Venezuelan regime
declared themselves winners of the presidential elections without any proof,
supported only by a brief declaration made by a single member of the National
Electoral Council. The official ballots collected by the opposition showed the
clear victory of their candidate, as confirmed by the Carter Center, which
handed this evidence to the Organization of American States, OAS. The action by
the regime represents a coup d’état, an open violation of the Venezuelan
constitution and laws, as well as of international laws, rendering the regime
clearly illegitimate. Chevron’s existing relation with the regime is in open
collision with its Code of Corporate Ethics.
·
Chevron’s relations with the Venezuelan
regime are also incompatible with its human rights policies. That regime is
clearly in violation of those rights, as evidenced by documented investigations
made by the United Nations, the OAS and the International Court of Law. The
government of the United States has put a $15 million reward on the head of the
regime’s leader, Nicolas Maduro, and has sanctioned as drug traffickers many of
his main collaborators. Although it could be argued that the U.S. government is
authorizing the relationship of Chevron with that regime, such incoherence on
the part of the U.S. government cannot free Chevron from the commitments
contained in its Code of Corporate Ethics.
·
The relation of Chevron with the
Venezuelan regime is clearly inconsistent with THE CHEVRON WAY, which
establishes as its core values adherence to the highest ethical standards and
full respect for universal human rights
·
Chevron’s activities in Venezuela are
perceived as an alliance with a regime that has destroyed a country in 24 years
of repression, authoritarianism and high levels of corruption and inefficiency.
Every day this relationship exists erodes the prestige of the company, not only
in Venezuela but in the world.
For these reasons I respectfully ask
Chevron’s shareholders to ask from the company full compliance to its Code of
Corporate Ethics in its relations with the Venezuelan regime, not only for the
sake of the prestige and continued welfare of the company, but, equally
important, for the relief of Venezuela’s immense tragedy which already lasts 24
years.
Sincerely,
Gustavo Coronel
CARTA DE UN CIUDADANO VENEZOLANO A LOS ACCIONISTAS DE CHEVRON
Apreciados
amigos:
Soy un
geólogo petrolero venezolano, miembro de la primera junta directiva de
Petróleos de Venezuela, 1976-1979, ya retirado. Cuando Chevron fue atacada
injustamente en Ecuador, escribí abundantes artículos en su defensa, basado en
mi convicción sobre la verdad del caso. Ver ejemplos de mis escritos:
https://www.elcato.org/el-caso-chevron-texaco-en-ecuador https://explorer.aapg.org/story/articleid/59321/chevron-in-ecuador https://petroleumag.com/el-caso-del-falso-desvalido-el-juicio-contra-chevron-en-ecuador/ https://lasarmasdecoronel.blogspot.com/2011/04/el-caso-chevron-texaco-en-ecuador.html .
Hoy les escribo para expresar mis graves
preocupaciones sobre la conducta de la empresa en Venezuela, caracterizada por
una estrecha colaboración con el cruel régimen que viola los derechos humanos y
es claramente ilegítimo, tanto de origen como de comportamiento.
Esta actitud data desde los tiempos de Ali Moshiri
como Gerente general de Chevron en Venezuela, cuando el autócrata Hugo Chávez
se refería a él públicamente como su mejor aliado. Esta relación incluyó un
préstamo importante a Chávez por $2000 millones, mucho del cual sirvió para
consolidar el régimen autoritario de Chávez y la represión de la disidencia.
A partir de 2022, a través de las llamadas
Licencias Generales, el gobierno de los Estados Unidos ha permitido a Chevrón
no solo producir petróleo para resarcirse de la deuda que el régimen contrajo
con ella, sino producir y comercializar petróleo en mucho mayor volumen, ingresos que van a consolidar la posición de
poder del régimen ilegítimo.
Reconozco que la razón de ser de la empresa es la
de generar beneficios a sus accionistas y, en este sentido, Chevron bien podría
argumentar que eso es precisamente lo que está haciendo en Venezuela. Sin
embargo, no es menos cierto que esta razón de ser ha ido transformándose en la
empresa moderna para incluir un fuerte componente de responsabilidad social
hacia el entorno humano donde la empresa lleva a cabo sus actividades,
expresado por el concepto de Stakeholder.
De manera totalmente voluntaria Chevron ha
reconocido esa responsabilidad mediante la estructuración de un Código de ética
corporativa, el cual es de obligatorio cumplimiento y adhesión por todos sus
funcionarios, desde el CEO hasta el más modesto de sus empleados. Este es un
documento del cual la empresa puede sentirse justamente orgullosa, donde se
enuncia con diáfana claridad cuál debe ser la actitud de la empresa en las
comunidades donde lleva a cabo sus actividades.
Sin embargo, este bello documento contrasta con la
postura adoptada por la empresa en Venezuela. A fin de ilustrar lo que digo,
a=resumo de seguidas los compromisos contraídos por Chevron en ese documento ,
a ser aplicados en todas las comunidades donde opera:
3.
Chevron tiene como lema: LA
EMPRESA HUMANA DE ENERGÍA. Aquí se unen de manera indivisible la naturaleza
comercia de la empresa con su deber hacia la gente afectada directa i=o
indirectamente por sus actividad. El lema sugiere que no debe existir lo uno sin lo otro;
4.
Antes de actuar, la empresa se compromete a
plantearse las siguientes preguntas en torno a la actividad que piensa llevar a
cabo:
·
¿Es legal? Si piensan que la decisión
puede ser ilegal no se lleva a cabo.
·
Es consistente con las políticas de la
empresa, incluyendo las políticas de Derechos Humanos? Si la acción propuesta
no es consistente con las políticas de la empresa no debe llevarse a cabo
·
Es consistente con LA MANERA CHEVRON?
Considere si la acción es representativa de nuestros valores medulares;
·
¿Si
se hiciera público me sentiría cómodo? Pregúntese si usted haría la misma
decisión si supiera que ello sería publicado en la primera página del periódico
de mañana.
Como observador razonablemente bien
informado de la situación de Chevron en Venezuela encuentro que estas son
preguntas pertinentes que la empresa debe hacerse en Venezuela por las
siguientes razones:
·
En Julio 2024 el
régimen venezolano se declaró ganador de las elecciones presidenciales sin
aportar prueba alguna, solamente apoyado por un solo miembro del Consejo
nacional Electoral. Las actas de votación oficiales fueron rescatadas por la
oposición y mostraron una clara victoria del candidato opositor, lo cual fue
confirmado por el Centro Carter, evidencia que presentó a la Organización de
Estados Americanos, OEA. Esta acción del régimen equivale a un golpe de estado,
clara violación de la constitución y leyes venezolanas e internacionales, lo
cual hace al régimen claramente ilegítimo. La relación existente de Chevron con
el régimen se encuentra en abierta colisión con su código de ética corporativa
·
La relación de
Chevron con el régimen venezolano es inconsistente con su política de derechos
humanos. Este es un régimen claramente violatorio de esos derechos, condenado
por las Naciones Unidas, por la OEA, investigado por la Corte penal
Internacional, con la cabeza de sus jefes puestas a precio por el gobierno de
los Estados Unidos. El hecho de que el mismo gobierno de su país sea éticamente
inconsistente en sus actitudes hacia el régimen no libera a Chevron del deber
voluntariamente expresado en su Código de Ética Corporativa;
·
La relación de
Chevron con el régimen venezolano es inconsistente con la MANERA CHEVRON, la cual establece como sus valores
medulares la obediencia a los más altos
estándares éticos y el desempeño de su actividad con respeto a la ley y a los
derechos humanos universales
·
La actividad de Chevron en Venezuela es ya
universalmente conocida y lamentada en el seno de nuestra sociedad, como una
alianza con un régimen que ha destruido el país durante sus veinte y cuatro
años de represión, autoritarismo y altos niveles de corrupción e ineficiente
gobernanza. En este sentido cada día que esa relación existe es un día en el
cual el prestigio de la empresa sufre, no solo en Venezuela sino en toda la
región que se ha visto afectada por los desmanes del régimen.
Por las razones expuestas pido respetuosamente a los accionistas de Chevron
hacer valer el contenido del Código Ético Corporativo de la empresa en lo
relacionado con la tragedia que se desarrolla en Venezuela y de la cual Chevron
se ha convertido lamentablemente en copartícipe.
Sinceramente,
Gustavo Coronel