sábado, 23 de noviembre de 2019

Descubriendo a Balakirev, el líder del grupo de los Cinco

De arriba hacia abajo: Balakirev, Cui, Musorgsky, Rimsky Korsakov y Borodin: El Gran Puñado. 



Muestra de Balakirev: https://www.youtube.com/watch?v=TO674dbpaXA Overture on three Russian songs
En San Petersburgo, Rusia, entre los años de 1856 y el fin de siglo existió un extraordinario grupo de músicos que dieron impulso a la música nacionalista rusa. Este grupo fue bautizado por el abogado Vladimir Stasov, uno de los miembros de la periferia del grupo, como Moguchaya Kuchka, algo así como “El Puñado Poderoso” o “El Gran Puñado”.  Sus miembros eran diletantes, aficionados a la música. Modesto Musorgsky era un burócrata del gobierno, Alexander Borodin un Químico-médico, Nikholai Rimsky Korsakov un miembro de la marina rusa, Cesar Cui un ingeniero de fortificaciones y militar. Solo Mily Balakirev había llegado a San Petersburgo como estudiante de música, mostrando un especial talento como pianista.  Debido a la acción catalizadora de Vladimir Stasov se comenzaron a reunir, alrededor de 1856, en la residencia de Balakirev. Su objetivo fue claro desde el inicio, la promoción de una música genuinamente rusa, a partir del ejemplo de la figura para ellos paternal de Mikhail Glinka, generalmente considerado como el padre de la música nacionalista rusa.  Los cinco miembros del grupo eran de edad variada, Borodin uno de los mayores, de unos 27 años,  Rimsky Korsakov el menor, aún no había cumplido los 20 años.
A pesar de no ser el de más edad Balakirev fue aceptado desde el inicio como la figura dominante del grupo  en materia musical. Los otros miembros le llevaban sus composiciones o ideas sobre canciones, sinfonías, óperas u oratorios y Balakirev les hacía los comentarios, a veces descarnadamente severos, y les imponía cambios en la composición de la pieza, los cuales eran generalmente aceptados por los otros sin protestas. Ese liderazgo duró por muchos anos. Al morir Balakirev, en 1910, el miembro del grupo Cesar Cuí escribió: “Toda nuestra música pasó por sus manos. Podría haber sido Director de la Opera Imperial o del Conservatorio. Los poderosos pudieran haberlo apoyado, pero Balakirev era diferente, independiente, no muy sociable, frecuentemente obstinado…. La música que escribió es fina y elegante, de extraordinaria orquestación. Hubiera podido escribir mucho más pero su carácter se lo impidió”.   Cui agregó: “Soy el último sobreviviente del Grupo. Ello me asusta. Estoy  examinando el inmenso material sobre el grupo que se ha acumulado. Soy el albacea de la nueva escuela musical rusa”.  Cui vivió ocho años más cultivando la memoria de sus compañeros.
Por años he tenido una especial predilección por la música compuesta por este grupo. Es difícil, diría imposible, que pueda decir quién de ellos es mi favorito. Quizás el menos talentoso como compositor fue César Cui pero fue, en compensación, fue el gran cronista del grupo. De resto, siempre pensé que Balakirev era el de menor lustre pero ahora estoy revisando esta opinión, después de leer un extraordinario libro de Stephen Walsh sobre el grupo llamado “Musorgsky y su Círculo”, New York 2013. En este libro, bellamente escrito, producto de una investigación musical exhaustiva, Balakirev emerge como el gran líder del grupo, casi como un dictador, en la medida en la cual su opinión era la decisiva en materia de evaluación del trabajo de sus compañeros. Esa influencia determinante nunca desapareció totalmente pero se fue diluyendo con el tiempo, a medida que los miembros del grupo adquirían madurez musical. Fue especialmente clave durante los primeros diez años de la vida del grupo, etapa en la cual sus miembros aprendían composición y desarrollaban sus respectivos talentos. Ya para la década de 1875-1885 cada uno de los integrantes del  poderoso puñado había adquirido suficiente confianza para trabajar por su cuenta. Más aún, una nueva estrella había aparecido en el universo musical ruso, Peter Ilich Tchaikovsky, quien no fue miembro del grupo pero se mantuvo en estrecho contacto con ellos, desarrollando su propio estilo, apoyado en un inmenso talento que hacía aparecer como  muy fácil lo que a los miembros del grupo de los Cinco les exigía mucho esfuerzo.   
Basado en la curiosidad que me ha despertado el libro de Walsh, me he dado en los últimos días a escuchar en YOU TUBE todo lo que he podido de la música de Balakirev. Y para mi gran sorpresa, encuentro que Balakirev ha sido la gran fuente de la cual se han nutrido casi todos los  grandes músicos, no solo los otros miembros del Grupo de los Cinco, sino quienes vinieron después, desde Tchaikovsky hasta Stravinsky, Prokofiev y Shostakovich. En esta música de Balakirev, específicamente en su “Obertura sobre tres canciones Rusas” y en su poema sinfónico “Rusia” me he encontrado con temas que luego usarían Tchaikovsky en su Sinfonía #4 y con temas como los que había escuchado en el Ballet “Petrushka” de Stravinsky. No dudo que la influencia de Balakirev haya sido mucho mayor, ya que buena parte de su trabajo musical fue la recopilación de un inmenso material de música folclórica rusa, el cual serviría a los miembros del grupo y a los compositores posteriores para escribir sus obras.  
La gran secuencia histórica de la música rusa durante la etapa 1850-1920 parece, entonces,  haber sido:
Glinka ->  Balakirev -> Grupo de los Cinco  -> Tchaikovsky -> Stravinsky –>  Prokofiev y Shostakovich, con menciones honoríficas para compositores como Kalinikov (situado cronológicamente entre Tchaikovsky y Stravinsky).
Les recomiendo a Balakirev, maravilloso hallazgo que he hecho después de muchos años en los cuales no le dediqué tiempo suficiente. Así me pasó con Kalinikov.
Nunca es demasiado tarde para descubrir nuevas maravillas.

2 comentarios:

Maria Teresa van der Ree dijo...


Me gusto muchísimo tu artículo. Lo traduje para enviárselo a un amigo que también le encanta la música. Siempre me cautivó la música rusa, Borodin y Rimsky Korsakov. No conocía los otros. Siempre es bueno aprender.

Un abrazo,

MT

Gustavo Coronel dijo...

Los dos que mencionas fueron los más prolíficos y los mas conocidos hoy en dia. Musorgsky compuso poco pero su reputación está cimentada sobre su Opera BORIS GODUNOV, su impatactante "UNa Noche en el Monte Calvo" (lo utilizó Walt Disney en Fantasía) y susCuadros para una Exposición, para piano, orquestado por Maurice Ravel (creo).
César Cui fue el menos conocido y Balakirev el líder y gran motor del grupo.