sábado, 5 de enero de 2013

"El Derecho de Morir", la gran telenovela venezolana



Cada día la gran telenovela venezolana trae un nuevo capítulo que mantiene a todo el país en suspenso. Más que “El Derecho de Nacer” esta nueva telenovela,  que tiene sintonía total en nuestro país y en una América Latina ávida de culebrones,  pudiera llamarse “El Derecho de Morir”, dadas las circunstancias y la trama.

Se trata de la historia de un caudillo que manejó al país a su antojo por 14 años, despilfarró casi un mil millones de millones de dólares de dinero nacional durante ese periodo y se convirtió, mediante una pródiga política de dádivas, en un favorito de la clases más pobres del país y de los politicos latinoamericanos expertos en adular a quien le puedan arrancar algunos dólares. Es una historia que apasiona a las masas, hecha a la medida de una sociedad frívola y negligente, acostumbrada a vivir en un presente eterno. Para esa sociedad el pasado ya se borró  mientras que no tiene sentido alguno pensar en el futuro. Lo de ella es el hoy y como quedo yo allí.

 El protagonista de la telenovela decidió modelar al país a imagen y semejanza del existente en una isla miserable,  en la cual había mandado su ídolo por medio siglo. En lograrlo puso sus mayores esfuerzos y cada dólar de la nación. Pero una parte importante del país se negó tercamente a complacerlo y hoy, después de 14 años de desastre nacional,  el caudillo se encuentra en su lecho de enfermo, lejos de lo que fué su patria, rodeado de medicos extranjeros,  familia y  candidatos a reemplazarlo. Debe pensar, desde su lecho, que Stalin tuvo días agonizando, sin que los miembros de su entorno íntimo se atrevieran siquiera a ir al baño, por temor a que su ausencia fuera aprovechado por sus rivales para perjudicarlos.

Más allá de la historia del individuo, lo triste y trágico de la gran telenovela venezolana es que muestra a una sociedad resignada a vivirla, con todo lo que ello implica de cursi y de mediocre. Porque la telenovela, por definición, es el género de lo anecdótico, de lo del día al día, del mini-drama del momento. No hay en ella espacio para los grandes sueños, los grandes gestos, los anhelos de creación colectiva de futuro. ELa telenovela es el género adecuado para una sociedad que se niega a pensar con seriedad en su propósito común.

 La telenovela es el llanto como diálogo, la besadera de cruciijos y el ritmo de vudú,  la sórdida historia de la hija desdeñada, de los hermanos codiciosos, del chofer leal que pasa a manejar el pais, del enfermo con  máscara de oxígeno, del médico que mueve la cabeza con pesadumbre. De vez en cuando, para darle cierta variedad a la trama insertan en la trama del día a  una  jamona que preside algun organismo del Estado,  cargada de joyas y  cuyo corpiño aun hace ofertas aunque solo muestra dos palomas muertas, como decía Job Pim en uno de sus poemas.

De esas viñetas sin sustancia y sin otro propósito que ver pasar los días pegados al televisor es que vive el país. Los capítulos se suceden unos a otros con un ritmo pausado, mostrando el cotidiano suceder de cosas y cositas intrascendentes, de las cuales se nutre, casi exclusivamente, la vida nacional. 

 Desde cuando no muestra Venezuela un evento o una iniciativa realmente dignificante, que llame a la grandeza? Ciertamente no me refiero a  la exhibición de Pastor Maldonado en Los Próceres o el grotesco desfile de la payasería castrense en conmemoración del golpe de 1992.

Cuando Rómulo Gallegos se inauguró como presidente, en 1946, su primer decreto fue ordenar la publicación de las obras completas de Andrés Bello. En la telenovela de hoy el caudillo ordena la  compra de dos satélites hechos en China, a un costo de  $800 millones y decreta fábricas domésticas  y refinerías petroleras en todo el mundo, las cuales jamás se construirán, porque en la telenovela el logro es el decreto.     

Nuestro país es una telenovela,  el género más grosero y embrutecedor que existe en el mundo del espectáculo.  

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo peor es que se muere la plasta y nos deja el mierdero.

José María Souza Costa dijo...


Invitación - español
Soy brasileño.
Pasei acá leendo , y visitando su blog.
También tengo un, sólo que mucho más simple.
Estoy invitando a visitarme, y si es posible seguir juntos por ellos y con ellos. Siempre me gustó escribir, exponer y compartir mis ideas con las personas, independientemente de su clase Social, Creed Religiosa, Orientación Sexual, o la Etnicidad.
A mí, lo que es nuestro interés el intercambio de ideas, y, pensamientos.
Estoy ahí en mi Simpleton espacio, esperando.
Y yo ya estoy siguiendo tu blog.
Fortaleza, la Paz, Amistad y felicidad
para ti, un abrazo desde Brasil.
www.josemariacosta.com


Anónimo dijo...

EN LA NOVELA DE CORONEL EL COMANDANTE ES EL PRIMER ACTOR...........IGUAL PARA LOS VENEZOLANOS,
JG

Anónimo dijo...

DIOS LE DE LARGA VIDA A CORONEL...........PARA QUE VEA LA CONSOLIDACION DE LA REVOLUCION BOLIVARIANA.
JG

PD:A VECES SE LOGRA LO IMPOSIBLE

Anónimo dijo...

"The United States of America does not have friends; it has interests"
Esta cita es de John Foster Dulles, Secretario de Estado durante Eisenhower.

Hablamos hipotéticamente. Creo que es oportuna la cita en medio de la trágica telenovela venezolana. Pienso que el régimen de Cubazuela está intentando venderle a los gringos la idea de que el cese del coloniaje cubano sobre Venezuela sería una inmensa carga para USA, toda vez que pondría a la dictadura cubana en la inevitable situaciòn de otro "período especial" con una combinación de los "marielitos", esto es, una ola de emigraciòn incontrolable de cubanos a USA, que ya bastantes problemas con su economía tiene.

Siempre hipotéticamente, los traidores que aceptan sumisamente las órdenes de la cúpula castrista están de acuerdo con que Venezuela forme parte del "paquete" de negociación para la transición cubana hacia un régimen estilo chino: cero derechos políticos con capitalismo salvage y mantener el suministro petrolero de la colonia venezolana a USA.

Aclaro: no soy "anti-yankee". Me encantan los Estados Uniodos, especialmente la ciudad de New York que he visitado 8 veces, sus artes, el beisbol, su literatura y muchas otras cosas. También creo en la autodeterminación y que nadie va a resolvernos el peo que tenemos para salir de esta pesadilla. Pero cómo haría falta la canción de los Beatles ("With a Little Help From My Friends") que se traduce como la no aceptación por Obama del mantenimiento del coloniaje cubano sobre nuestro país como parte de las hipotéticas negociaciones para una transisión en Cuba.

Muy respetuosamente, me gustaría su opinión sobre esto. ¡Ah!, muchas gracias por el blog y por su labor de documentación de estos interminables e insoportables años de pesadilla.



Anónimo dijo...

PD: si no fuera por este asunto del coloniaje cubano, un asunto de DIGNIDAD, uno hasta estaría ganado a la idea de que estos bichos se pasen la Constitución por las bolas, sigan en el poder y no convoquen elecciones, para que sufran en carne propia la crisis económica y social por su pésimo manejo, corrupto, vendepatria e inepto, de los inmensos recursos que han dilapidado en 14 años, mayores que todo lo ingresado en este territorio desde que Colón lo descubrió hace más de 500 años.

Un gobierno de transisión o uno electo se va a tropezar con esa crisis y con la gente acostumbrada a la pedidera. No es por dármelas de adivino, pero se ve un panorama como el argentino de hace varios años, con presidente huyendo en helicóptero y todo. Ya me parece estar oyendo "con chávez esto, con Chávez lo otro". El chavismo es la fase superior del clientelismo adeco, corregido y aumentado -cómo diría un editor, y sazonado con el anacronismo ñangaroide y la dependencia infantil a Cuba.

¡Qué desgracia!

Gustavo Coronel dijo...

He leído algo similar a lo que expresas en un artículo de Franceschi. Sin negar de plano esa posibilidad pienso que lo opuesto sería favorable para USA. Un rompimiento nuestro con Cuba probablemente acelere la caída definitiva de los Castro y el acercamiento político con USA y la apertura de Cuba a la inversión estadounidense y, por ende, a la influncia política de ese país en una nueva Cuba.
Saludos,
Gustavo

Anónimo dijo...

Gracias por la pronta respuesta. Buen punto. En una conversacion privada hace varios días mantuve la opinión de que una verdadera apertura en Cuba traería a esa isla prosperidad y crecimiento económico en libertad. Lo más triste es que creo que la recuperaciòn de ellos sería rápida, pues, aunque parezca mentira su mal social puede curarse más facilmente que el nuestro

Cuba ha sufrido de envenenamiento ideológico por más de 50 años y sus hijas se han tenido que prostituir para poder llevarse algo a la boca. No obstante, Venezuela, que tiene menos tiempo de envenanamiento ideológico, sufre de lo peor de dos mundos: ese lavado de crerebro y la deformación social de los valores familares.

Realmente es dantesca la situaciòn en todos los estratos sociales, especialmente en los más pobres. La amoralidad, la promiscuidad, la falta de respeto, la ausencia de valores es espantosa.

Nuestro mal es no sólo político y económico, es moral y social. Titánica tarea la que toca.

Anónimo dijo...

Yo no se nada de esa novela "el derecho de nacer" porque soy de "menudo" para aca.....Pero mi abuelita me lo explico toooodo. Y este novela "el derecho de morir" es peor que la primera......jajajaj
El Piquijuye (deberia cambiarme el sobrenombre al "pavo" canoso, jaja)

Gustavo Coronel dijo...

La recuperación de Cuba puede ser rápida con el concurso de los miles de Cubanos que viven fuera, especialmente en USA. Esa es una diáspora muy exitosa en todos los ordenes: económico, social, etc. Venezuela se encuentra hoy desmantelada en materia de gente preparada y animosa. El virus del populismo ha invadido el alma de la nación y la mantiene aletargada, esperando con la boca abierta que alguien providencial le ponga la comida en la boca, no imprta el precio a pagar por esa actitud. Como dicen en USA: esto se va a poner peor antes de ponerse mejor. Esd decir, aun no hemos tocado fondo.